<
>

La familia Moroni y el debut mundialista

La familia completa despidió a Tute en la previa al Mundial de Inglaterra. Flia. Moroni

BUENOS AIRES -- El domingo 4 de octubre quedará marcado en la vida de Matías Moroni. Ese día debutó en la Copa del Mundo con la camiseta de Los Pumas y desde Buenos Aires, la familia también fue parte. Con nervios y ansiedad para que llegue la hora, esperaron delante del televisor para alentar a “Tute”, en el que será sin dudas un recuerdo difícil de olvidar.

Scrum se metió en la intimidad familiar y en primera persona Belén y Fernando, madre y padre cuentan cómo fue la semana previa y el día del debut de su hijo en la Rugby World Cup.

La semana no fue una más, desde el entrenamiento del miércoles donde se suele plantar a los titulares, se palpitaba que el debut podría llegar. Fernando, el papá lo intuía, pero con cautela y para no quemarlo no quería decir nada. “Sospechábamos que se podía dar por como venía entrenando, pero no queríamos quemarlo. Cuando llegó el mensaje de TU13 fue lo que faltaba para cumplir su sueño”.

Por su parte, la mamá contó cómo se enteró que “Tute” iba a ser titular, Rochi, la novia de Matías fue la encargada de decírselo: “Me enteré por Rochi (su novia) que había entrenado como titular. Cuando llegué al colegio donde trabajo, la preceptora lo estaba leyendo por internet, pero como Mati no le gusta hablar hasta que salga la lista oficial ni le pregunté”.

“Me daba muchos nervios por él y mucha ansiedad. El viernes a las 10 al prender al teléfono en sala de profesores recibí su mensaje que decía solamente “TU13”. Se lo conté a todos los que estaban. ¡No lo podía creer! Al fin iba a cumplir su sueño”, cuenta Belén.

Mil cosas pasaron por la cabeza de Fernando al saber que el día había llegado. Me pasaron por la cabeza todos sus objetivos deportivos que fue cumpliendo en estos años. Tengo presente cuando me dijo en M19 con CUBA que no iba a parar hasta sacarlo “Campeón con sus amigos”. Seleccionado de la URBA, Mundial Pumitas en Italia 2011, Mundial de Seven con Los Pumas en Moscú 2013, Campeón con CUBA 2013, y sus primeros pasos con Los Pumas por Italia visitando al Papa Francisco. Mi sensación fue “lo logró ¿y ahora qué viene? Llegar lo más lejos posible con el equipo y soñar una final en Londres”.

El padre tuvo la suerte de poder compartir junto a Matías los dos primeros partidos del Mundial, vivió momentos únicos junto al plantel. “Lo vi Feliz haciendo lo que más le gusta. Por suerte pudimos compartir con él y el equipo dos noches post partido. Me impresionó lo unido del grupo, tengo una imagen del Chelo Bosch con Tute después del partido contra los All Blacks que lo dice todo”.

“Ver que todos tienen en claro que la estrella es el equipo y no los jugadores te hace sentir que este equipo puede llegar muy lejos. Todos los jugadores transmiten que están a full, concentrados y al mismo tiempo disfrutando el momento que les toca vivir”.

El domingo no fue un día más y Belén cuenta lo que sintió cuando vio a Matías salir a la cancha. “No sé si a todas las madres les pasa lo mismo, pero para mi es un estrés. Primero no puedo dormir y rezo para que no le pase nada, que juegue bien, que esté contento, que ganen. No la paso muy bien… Cuando termina el partido recién ahí empiezo a disfrutar. Me gusta ver el partido después que terminó y que se que está bien”.

Para Fernando fue otra sensación, él siempre está en los partidos junto a su hijo, es el fotógrafo personal de “Tute”, pero está vez le tocó verlo a la distancia. “Fue difícil, siempre desde que empezó a jugar al rugby en M17 en CUBA yo estaba al borde de la cancha con cámara en mano. Esta vez tenía la TV y la computadora a la vez para no perder detalle pero a la distancia. En ese momento pensé todas las cosas que nos dio el rugby y que son difíciles de expresar en papel en este momento”.

“¿Qué sentí? Un orgullo y un objetivo más logrado, ahora vamos que vamos por más”.

No quisieron estar afuera y lo vivieron igual que sus padres, Marcos y Ángeles, sus hermanos, expresaron su emoción: “Estoy muy contento por él, porque se le cumplió un sueño por el que lucho mucho, teniendo que dejar cosas de lado, viajando y entrenando” dice Marcos.

Por su parte Ángeles habla de las emociones que sintió: “Fue un orgullo. Lo único que podía pensar era en la mezcla de emociones que él debería estar sintiendo, que finalmente estaba logrando su objetivo de vida. Esperaba que después de todo el esfuerzo que hizo, pudiera demostrarlo en el partido”.

Al hablar sobre si se puede comparar con la primera convocatoria, Fernando contó: “Es muy distinto, esto es casi lo máximo que puede soñar un jugador y un padre para su hijo rugbier. Pero le tengo fe a este gran equipo, contagian buena onda, compromiso, responsabilidad, desde el entrenador al cuerpo técnico, staff y jugadores”. “Solo quiero agradecer a todos ellos por hacernos sentir parte, también a todos nuestros amigos y familiares que nos ayudaron a poder vivir esto junto a ellos”, agregó.

Pasó el partido y la comunicación con su hijo fue a través de mensajes. “No tuvimos mucho contacto, solo unos mensajes de que estaba entero y que fue un sueño vivir eso. Que parecía que estaban jugando en Argentina. Ahora nosotros queremos seguir soñando y esperar el equipo que ponga el entrenador para el próximo domingo, para volver a dejar todo”.

Por último un recuerdo que tiene Fernando y que quedará marcado por siempre fue ver a Tute invitando a su hermanito Fran, de tan sólo 9 años, a ser parte de este sueño. “Ver la cara de su hermanito invitado por Tute al Mundial y lo que disfrutó estar ahí rodeado de todos Los Pumas que tenían la mejor onda con él y con todos los que se acercaban a ellos fue mágico. Es algo que no se lo olvidará más en su vida”.

Los padres siempre dejan todo por ver a sus hijos felices y esta familia lo demuestra en el día a día, conviviendo en cada momento que Matías pasó, desde aquel debut en CUBA hasta este en Los Pumas en la Copa del Mundo. “Compartir con los familiares de los jugadores el partido y las experiencias fue espectacular. Todavía me acuerdo un día de lluvia londinense ver al padre y a la madre de Corcho (Fernández Lobbe) empapados diciendo ‘espero que el próximo Mundial sea en Miami (risas)’. Yo le pregunté si sabrán del esfuerzo que hacemos por seguirlos”, culmina Fernando.

La nota termina, pero ellos no quieren dejar de agradecer a todos lo que hicieron que este día sea espectacular, viendo por un televisor el sueño de Tute cumplido. Jugar una Copa del Mundo y nada menos que con la celeste y blanca.