PASADENA -- El crecimiento de Estados Unidos en el futbol no solamente ha implicado que a México se le haya complicado en los últimos años. En el Tri se respeta al rival y se asume su evolución, al grado que se cree que no son los únicos que sufren con ellos.
“Brasil y Argentina también sufren contra Estados Unidos, es un equipo que ha crecido mucho y con un gran nivel de juego”, destacó Rafael Márquez, capitán del conjunto mexicano, quien recuerda que los estadounidenses no exclusivamente son el problema del Tri.
El defensa del Hellas Verona llega a este encuentro luego de haber superado una lesión en el aductor derecho. Su evolución fue gradual, pero finalmente está en condiciones de jugar.
“Si no estuviera aquí no estuviera al 100 por ciento. Mañana daré mi 100 por ciento para dar mi granito de arena y se logre el resultado”, expuso.
A sus 36 años y con cuatro Mundiales a cuestas, Márquez todavía no hace un recuento de su carrera ni se pone a pensar cuándo anunciará un eventual retiro. Se lo deja todo al tiempo y a su condición física.
“Vivo el presente, la vida me ha dado esa enseñanza. El nivel futbolítico es el que me tiene aquí, no nada más por el Rafa Márquez que ganó muchos títulos con el Barcelona. Estoy conciente que tarde o temprano mi nivel bajará y hoy tengo que disfrutarlo. Mañana tengo un gran partido, puedo disfrutarlo”, señaló.
Lo que pide el capitán del Tri es concentrarse en este encuentro ante Estados Unidos y ni siquiera distraerse con la llegada del nuevo entrenador, con el colombiano Juan Carlos Osorio ya en puerta.
“No pienso responder a esa pregunta porque tenemos un partido muy importante mañana”, indicó cuando se le pidió su opinión sobre la llegada del estratega colombiano quien próximamente tomará las riendas del combinado nacional.