Los Cardenales de San Luis, que han ganado 101 partidos este año --incluyendo uno en la postemporada--, enfrentarán el lunes uno de sus mayores obstáculos de la temporada: Jake Arrieta.
Arrieta, el lanzador más caliente de Grandes Ligas en los últimos tres meses, será el abridor de los Cachorros de Chicago en el tercer juego de la Serie Divisional entre los dos grandes rivales de la Liga Nacional. Con la serie empatada 1-1, Michael Wacha está programado para comenzar por San Luis en el primer choque de playoffs en el Wrigley Field desde el 2008.
El derecho canadiense Wacha (17-7, 3.38) viene de su mejor temporada desde que llegó a las ligas mayores hace tres años, pero fue completamente inefectivo en cuatro salidas contra los Cachorros (1-2, 6.86). De por vida tiene 3-3, 4.86 en nueve juegos frente a Chicago, incluyendo, 0-2 en los confines amistosos de la casa de los Cachorros.
Arrieta (22-6, 1.77), un fuerte candidato al Cy Young de la Liga Nacional y quien solamente ha permitido cuatro carreras en casi cien entradas desde agosto, ha ganado 12 salidas consecutivas, incluyendo el partido de comodines contra los Piratas de Pittsburgh con una blanqueada de 10 ponches sin bases por bolas.
San Luis es un rival conocido para Arrieta, quien tuvo marca de 2-1 y efectividad de 2.42, con 25 ponches en 26.0 entradas y tres salidas de calidad contra los pájaros rojos en el 2015. De por vida, tiene foja de 4-1, efectividad de 1.63, 60 ponches y cero base por bolas en 55.1 innings ante San Luis.
Batearle a Arrieta ha sido difícil para los Cardenales y el resto del béisbol en los últimos tiempos. El barbudo de los Cachorros tiene 12-1, 0.75 en 15 salidas desde el Juego de Estrellas y en el Wrigley Field exhibe 2.01 de efectividad en 33 salidas durante su carrera.
San Luis, el equipo de la Liga Nacional con más campeonatos de la Serie Mundial (11), tiene foja de 33-16 en Series Divisionales, donde ha ganado 10 de 12 participaciones, pero para facilitar sus aspiraciones de avanzar a su quinta Serie de Campeonato consecutiva tendrán que pasar por encima del pitcher más difícil de batear estos días: Arrieta.