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Tiempo de balance

BUENOS AIRES -- Aunque las sensaciones son que la Temporada Argentina recién comienza, más aún con temperaturas más cercanas al invierto; la Triple Corona ya está en su punto medio.

Sin que las temidas lluvias hayan corrido el programa de partidos, ya se fue el Abierto de Tortugas y Hurlingham entró en su recta decisiva. Mientras, calculadora en manos muchos hacen cuentas para ver que número los mete en la final de la antesala de Palermo, proponemos hacer un repaso por lo que va del alto hándicap argentino.

La Dolfina sigue demostrando que está uno, dos y hasta tres escalones encima del resto. Sus resultados y su funcionamiento así lo demuestran. Desde la definición del Abierto Argentino del 2012, cuando cayó 12-10 ante Ellerstina, el conjunto de Cañuelas no conoce la derrota. Desde entonces ganó tres veces Tortugas, dos Hurlingham y otras tantas Palermo. Van 26 partidos seguidos, donde supo reponerse incluso a las lesiones y nadie logró llevarlo ni si quiera a un suplementario.

En la definición de su zona en Hurlingham, el equipo que lidera Cambiaso y que tiene a Milo Fernández Araujo como el 'invicto coach", se cruzará con La Aguada, que ya depende de otro resultado. Pero quizás lo más importante para los de Open Door será encontrar su punto de equilibrio.

Por cercanía, por ser el equipo con quien más prácticas ha disputado o simplemente por ser superior, en el doble cruce con Las Monjitas, La Aguada se quedó con la victoria. Sin embargo, a la hora de variar el rival tan estudiado, surgen las dudas acerca de su verdadero potencial porque cayó ante La Dolfina, multicampeón, y también ante Washington, que viene de clasificar.

Las letras se ponen de moda, y así como Ellerstina hace tiempo es la Z, hoy Washington es la W. El equipo cordobés, o al menos nacido en aquella provincia, aparecía como candidato en la Clasificación y arrasó; pero ya en Hurlingham, le planteó una buena lucha a La Dolfina hasta el quinto chukker, y se destapó con la sorpresa de bajar a La Aguada. Para Facundo Sola tras dos años en Open Door, fue como cumplir con la ley del ex en el futbol; mientras que para Diego Cavanagh, Ezequiel Martínez Ferrario y Alfredo Capella, se transformó en la fecha de su primer triunfo en Triple Corona con un equipo propio.

Víctima de la lesión de Sebastián Merlos, Las Monjitas ni si quiera tiene a la suerte de su lado. Estuvo a minutos de lograr su primera victoria del 2015; pero no pudo con el último penal ante La Aguada y lo sufrió de contra. Los planetas no se han alineado con el equipo naranja, que comenzó con Sebastián, pasó a jugar con Miguel Novillo Astrada, siguió con Juan Ignació Merlos y hoy tiene a Francisco Bensadón. Todo esto mientras esperan el regreso del ex suplente de La Dolfina.

Hoy, Las Monjitas es un equipo que da ventajas, ya que ha diferencia de sus rivales sigue y seguirá buscando funcionamiento cuando sólo le queda un partido de cara a su debut en Palermo.

Mirando a la otra zona de Hurlingham, todo parece más claro, pero sólo en materia de resultados, ya que Ellerstina y Alegría ganaron sus dos partidos y eso dejó una clásica semifinal.

Sin embargo, después de caer en la final de Tortugas, la Z, no parece dejar el "tiqui-tiqui" como les gusta decir a los jugadores o el traslado y posesión de bocha, si se lo describe de otra manera. Su táctica y su organización le permitieron jugar la primera final, y ahora pasar con poco a Magual y con holgura a Chapaleufú, pero jugando así podrá con La Dolfina?; en más, podrá con Alegría?

Abriendo el abanico, Alegría, es hasta aquí una vez más el tercero en discordia. Por mucho o por poco gana lo que tiene que ganar y en su primera prueba grande cayó sin atenuantes frente a La Dolfina en Tortugas. Lamentablemente volverán a ser rivales en Palermo. El lamento va a cuenta de lo que podría ser una semifinal ante la Z. En los hechos, ese gran cruce se dará en Hurlingham y quizás por trascendencia, juego y resultado termine siendo el mejor partido del año.

También será bueno espiar lo que ocurra con Magual y Chapaleufú. Doce meses atrás, el tercero de los equipos de Open Door, ganó este cruce. Sin embargo más tarde, Palermo fue su condena; como para los Heguy, su bendición. Al menos para la Comisión de Handicap, ya que a uno lo mandó a jugar la clasificación, mientras el otro consiguió el boleto directo a la Triple Corona.

Así está, y así continuará la Temporada Argentina, que con elecciones de por medio, hoy tiene su half time.