SAO PAULO (Enviado especial) -- La Selección Colombia ya está en Fortaleza para afrontar el partido más trascendente de su historia. Por los cuartos de final de la Copa del Mundo, enfrentará al más campeón, al anfitrión y al principal candidato: Brasil. Desde Sao Paulo, ESPNFC.com repasa los cinco puntos a tener en cuenta de este duro rival.
NEYMAR
El principal argumento de Brasil en esta Copa del Mundo. Sin un gran rendimiento colectivo, lo que salvó al seleccionado brasileño en estos primeros partidos fue el talento y la personalidad del ex jugador de Santos. Marcó cuatro de los ocho goles del equipo en el campeonato y además fue el que generó más preocupación a las defensas rivales, sin ningún tipo de dudas.
En el Mundial, Neymar no jugó como enganche pero sí lo hizo sin posición fija. Es el líder futbolístico de la Canarinha, aunque no desde la clásica función de armador. No juega de espaldas al arco ni detrás de los delanteros, pero por momentos retrocede hasta detrás de la mitad de la cancha para tomar contacto con la pelota. Tiene libertad para desplazarse, pero siempre busca estar cerca del área rival para terminar la jugada.
Colombia deberá cuidarse de todo Brasil en general, pero está claro que tiene que prestarle mayor atención al hombre de Barcelona. No habrá marca personal, pero sí Carlos Sánchez y toda la línea defensiva deben estar muy atentos para intentar que el goleador del anfitrión no reciba y, si lo hace, no juegue con libertad.
LOS DESACOPLES DEFENSIVOS
Si el primer punto mencionado es la principal virtud, este es el principal defecto de Brasil. Antes de la Copa del Mundo, se hablaba del sistema defensivo del local como uno de las mejores. El gran nivel individual de los integrantes de la línea de cuatro, más la siempre eficiente tarea de Luiz Felipe Scolari en ese sector hacían creer en que la Verdeamarela no sufríría demasiado. Sin embargo, ha sido el gran problema del equipo.
Marcelo, Thiago Silva y Dani Alves han tenido pobres rendimientos individuales, mientras que David Luiz fue quien sostuvo la defensa con su sacrificio e inteligencia. A pesar de que nadie puede dudar de las condiciones de estos tres jugadores, está claro que han perdido confianza y eso repercute en su tarea. No muestran la coordinación ni la velocidad de otros momentos, lo que resiente toda la estructura.
En ese sentido, Colombia tiene la gran oportunidad de aprovechar dicha fragilidad. James Rodríguez y Juan Guillermo Cuadrado han tenido un Mundial totalmente opuesto al de sus marcadores y pueden lastimarlos. Además, la aparición de Víctor Ibarbo como titular puede ser importante para aprovechar los errores en las espaldas de los laterales, que suben como es costumbre en los equipos brasileños.
LA AUSENCIA DE LUIZ GUSTAVO
Cuando Howard Webb le sacó la segunda tarjeta amarilla del Mundial a Luiz Gustavo, a Luiz Felipe Scolari le comenzó un dolor de cabeza que continúa hasta hoy. Es que el mediocampista de Wolfsburgo es el termómetro del equipo, el jugador que sostiene a Brasil en la contención y también es importante para dar el primer pase. Sin él, la Selección anfitrión pierde no sólo a alguien vital en la estructura, sino también a uno de los mejores rendimientos individuales.
Luiz Gustavo no tiene reemplazante fijo. En principio, Hernanes jugaría en el centro del campo junto a Fernandinho y Oscar. La otra opción es que ingrese Paulinho, pero es mucho menos probable. También es posible que David Luiz pase al mediocampo, donde ha demostrado ser útil, aunque desarmar la defensa no parece ser lo más sabio para Scolari. En cualquier caso, este es un problema grande para el entrenador.
La Selección Colombia tiene todo para aprovechar esto. Una buena manera de hacerlo es presionar arriba, para generar el error de Brasil ante la ausencia de Luiz Gustavo. Teo, James y Cuadrado están rápidos y certeros para el juego ofensivo, pero también para la presión alta.
LA DUPLA OFENSIVA
Es cierto que Fred y Hulk no están ni cerca del talento de otros atacantes brasileños, pero hacen un trabajo de sacrificio que es muy importante para que Neymar juegue con libertad. Con la pelota, no tienen mucha lucidez pero tampoco tienen la obligación de trasladar, entonces su tarea más trascendente es la de arrastrar marcas y generar espacios. Y definir, claro está.
Pese a que no mostraron un gran nivel ni mucho menos, Colombia debe tener especial cuidado con ellos. En el partido frente a Chile, Hulk fue el hombre que, desde el corazón y la entrega, lideró cada intento ofensivo de la Canarinha. Además, Fred se mueve muy bien en el área y si todas las miradas van hacia Neymar puede ser el delantero que lastime a la Tricolor. Entonces, la defensa colombiana deberá tener un ojo en Neymar y otro en esta dupla ofensiva.
OSCAR
Fue una de las grandes figuras en el primer partido de Brasil y luego se desdibujó hasta convertirse en un jugador que pasó casi inadvertido. Sin embargo, Oscar es todavía uno de los principales argumentos ofensivos de Brasil. Scolari lo ubica en un extremo y lo obliga a hacer un trabajo de ida y vuelta, pero cuando tiene la pelota en su poder, es un jugador capaz de romper cualquier defensa.
Es el mejor socio de Neymar y eso lo convierte en un futbolista al que se le debe prestar especial atención. Estará preocupado por el juego de James y Cuadrado, pero también será clave en el contragolpe y en cada avance del anfitrión. Con pelota y sin ella, los laterales colombianos deberán tenerlo siempre en el radar, para que no vuelva a explotar justo en estos cuartos de final.