ANAHEIM -- Osvaldo Martínez está realizando su sueño de participar en el Juego de Futuras Estrellas de Grandes Ligas, 10 meses después de haber recibido tres balazos cuando se encontraba en su carro, esperando que cambiara un semáforo en una intersección en su ciudad natal de Carolina, Puerto Rico.
No es por pena que el torpedero de 22 años de edad recibió una invitación para ser parte del encuentro entre los mejores prospectos de Grandes Ligas estadounidenses y del extranjero, duelo dominado por el primer bando con pizarra de 9-1.
Y es que Martínez está gozando de una tremenda temporada con los Suns de Jacksonville, Florida, la sucursal de AA de los Marlins. El bateador derecho de 5 pies 10 pulgadas de alto (1.7 metros) y 190 libras (86 kilos) portaba promedio de .304 y estaba segundo en la Southern League en imparables (103), tercero en juegos jugados (86), cuarto en carreras anotadas (59) y séptimo en porcentaje de llegar a base (.392).
"Gracias a Dios estoy aquí con el trabajo que he hecho", le dijo Martínez a ESPNdeportes.com durante las prácticas antes del Juego de las Futuras Estrellas el domingo en la tarde.
Martínez fue encargado con una asignación importante en el juego: lo pusieron a vigilar el campocorto y a batear segundo en el orden de la alineación que abrió el encuentro para el equipo de prospectos internacionales.
"Sí, me están dando una posición importante. Lo voy a tratar como todos los días, ir a jugar el mismo juego de siempre. Divertirme. Eso es lo que me gusta; hacer mi trabajo y dar el 100 por ciento", dijo el único prospecto de la Isla del Encanto en el encuentro.
A Martínez no le gusta hablar sobre el incidente que por poco termina con su vida el 30 de septiembre del año pasado. "Fue una experiencia mala, mala, mala. No se la deseo a nadie. Gracias a Dios estoy aquí", dijo.
De acuerdo a reportes de la policía de Puerto Rico, Martínez fue herido en el costado izquierdo, la espalda, y recibió una laceración leve de bala en la nuca.
AP reportó que Martínez fue víctima inocente de una guerra por el control de unos puntos de droga. La investigación de la policía reflejó que Martínez no tenía nada que ver con la guerra, sino que fue confundido con otra persona.
"Eso ya pasó y eso no es problema mío. Me confundieron", declaró Martínez. "Eso ya pasó. Me quiero olvidar de eso ya".
Cookie Rojas, el dirigente de la escuadra de prospectos internacionales y el narrador de los juegos transmitidos por la cadena de televisión de los Marlins, considera que lo mejor que ha hecho Martínez después del incidente fue no pensar más en ello.
"El muchacho tiene todo lo necesario para poder triunfar y depende de él que se mantenga en la misma forma, 100 por ciento, recuperándose y jugando el béisbol 100 por ciento, y en ningún momento pensar nada negativo sino que todo sea positivo para él de ahora en adelante", dijo Rojas.
Rojas vio a Martínez jugar en los campos de primavera y espera que éste pronto integre la filas del equipo grande.
Mientras, los Marlins reconocen el valor de Martínez. Ellos lo galardonaron como el bateador de Liga Menor del Mes de mayo. "Estaba haciendo mi trabajo. Haciendo las cosas pequeñas", dijo Martínez, quien fue tomado por los Marlins en la 11a. ronda del sorteo de novatos de 2006.
El enfoque de Martínez es tal que éste no piensa cómo podría ascender a las Grandes Ligas con Hanley Ramírez bajo contrato con los Marlins hasta el 2014.
"Yo juego mi pelota en el campocorto y las decisiones las toman ellos", comentó Martínez.
Rojas, sin embargo, no ve que el camino de Martínez esté tan bloqueado. "No se sabe nunca lo que puede suceder en el béisbol. Si se presenta la oportunidad de poder, quizás en el futuro, mover a Hanley Ramírez al outfield, entonces Martínez tendrá la oportunidad de poder jugar el campocorto", dijo Rojas. "Si cambian a Dan Uggla, y Martínez tiene la habilidad de poder jugar la segunda base, también podría ser una segunda base muy buena y efectiva para el equipo de los Marlins. Esas posibilidades existen. Eso depende de la mentalidad de la gerencia del equipo en lo que quisieran hacer".
"Yo no estoy pensando en eso", comentó Martínez. "Yo estoy concentrándome en mi pelota. Yo no pienso en que si me van a subir o me van a bajar. Estoy concentrándome en donde estoy".
Martínez sí se confesó ansioso de saber si podrá jugar pelota invernal en Puerto Rico este año.
"Espero jugar (...) para estar allá con mi familia", dijo, a pesar de que reconoce que la decisión descansa en los Marlins. "Es lo que ellos digan. Lo que ellos digan yo lo hago. Ellos son mis jefes, son los que mandan.
"Gracias a Dios toda ha estado bien hasta ahora", concluyó Martínez.