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La ronda de los grandes

Borghi esperará hasta el viernes la evolución de Viatri y Erbes Fotobaires.com

BUENOS AIRES -- ¿River es un puntero esperado? ¿Alguien imaginaba que en apenas cuatro fechas se iba a quedar solito en el tope de la tabla de posiciones?

¿Se podía suponer que Boca iba a ganar su primer partido recién en la cuarta fecha, ante Vélez?

¿Y el Ford Falcon de Ramón Díaz? Con la escasa convocatoria de jugadores, con las pocas estrellas que tiene Ramón, ¿era esperable que armara un equipo sólido, guerrero, peleador en lugar de los que habitualmente nos tenía acostumbrados? ¿Resulta que el técnico de San Lorenzo ahora es un gran estratega?

¿Independiente? ¿Era previsible pensar que Garnero no iba a dar pie con bola y que todo un estadio se iba a ocupar expresamente de insultar al manager César Luis Menotti y de pedir a gritos el regreso del Tolo Gallego a la conducción técnica del equipo?

¿Y Racing? No jugaba bien pero ganaba y eso era suficiente para que la crítica, tan poca afecta al análisis y tan influenciable por los resultados, lo había ungido como el candidato natural al título. Pero dos derrotas lo volvieron a poner en un lugar incómodo.

Así es amigos, como se desarrolla el torneo Apertura 2010. Con muchas situaciones poco previstas y con partidos muy parejos y con un nivel que todavía no termina de despegar, que no entrega actuaciones convincentes como para imaginar un candidato claro al título.

Sólo van 4 fechas, es cierto. Y todas jugadas después de un parate muy largo, como de tres meses (por el Mundial): Eso hace que los entrenadores y que los jugadores todavía se estén acomodando, buscando sus propios destinos.

Nosotros, en medio de este enjambre, apenas podemos hacer nuestro aporte a la confusión general con algunas líneas argumentales. Vamos hacia ellas.

1) El River de Cappa, al menos por ahora, suma más de lo que juega. Lo que no es un tema menor, ya que para algunos equipos es importante acostumbrarse a ganar, y más aún si es River, con el peso que tiene esa camiseta cuando mira a todos desde el tope de la tabla. El funcionamiento llegará con el rodaje y allí se tendrá un panorama más claro de cuál es el verdadero nivel del equipo de Cappa. El asunto es que los resultados favorables no obnubilen a los protagonistas.

2) Boca jugó a lo Boca. Superó a Vélez durante gran parte del partido. Repetimos, porque no nos parece un tema menos: superó a Vélez, es decir a uno de los tres mejores equipos del campeonato, uno que sí tiene rodaje porque cambió poco y nada respecto de los torneos pasados. No se puede decir que Borghi encontró el equipo, porque todavía quedan muchas dudas, especialmente en el funcionamiento del mediocampo (no defiende bien, no respalda en ataque) pero al menos consiguió un respiro que le permite mirar el futuro con un poco más de optimismo.

3) San Lorenzo, tal cual como lo definió su entrenador, es un Ford Falcon. Es decir un equipo duro, pesado, pero rendidor. Dos empates y dos triunfos le dibujaron una sonrisa a su gente. En la próxima fecha enfrenta a Boca en la Bombonera, lo que será una buena medida para saber hasta qué punto el equipo tiene ambición de ser campeón o si, apenas, será uno más en la mitad de la tabla.

4) ¿Quién hubiera dicho que Menotti se iba a convertir en un escudo para Garnero? Nadie lo decía claramente y hasta Menotti se ocupo de desmentirlo, pero la salida de Gallego fue empujada por el ex entrenador campeón del mundo en 1978. Y todos sabemos lo que significa el Tolo para la gente de Independiente. Es el niño mimado, un hombre que fue capaz de sacarle agua a las piedras y de armar equipos competitivos con poco y nada. Garnero, más allá de Menotti, está complicadísimo por los malos resultados y, básicamente, por el muy bajo rendimiento del equipo y de las individualidades.

5) No se puede ser tan duro con Racing. Nunca, ni Russo ni sus jugadores se pusieron en el primer lugar de las consideraciones. Eso corrió por cuenta de los exitistas simpatizantes racinguistas y de los periodistas, que siempre andan a la captura de candidatos. Racing, para ser sinceros, ni aún cuando ganaba, era un gran equipo. Un par de resultados afortunados lo habían dejado líder con puntaje ideal, pero ese espejismo duró poco y nada. Russo deberá trabajar mucho para ubicas a sus jugadores en el lugar en donde están para así poder construir sobre bases más sólidas.

Los cinco grandes, como se ve, le dan vida al torneo. Toda una novedad, ya que hacía varios campeonatos que no eran protagonistas. Continuará…