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Santos Tricampeón de América

Santos se consagró nuevamente campeón de la Copa Libertadores después de 48 años Getty Images

BUENOS AIRES -- La 52 edición de la Copa Libertadores de América ya tiene su campeón: Santos.

Sí, el Santos de Pelé, hoy el de Neymar, acaba de ganarla por tercera vez.
Con ello, igualó al San Pablo de su país, convirtiéndose ambos en los conjuntos brasileños más ganadores del trofeo en la historia.

La batalla decisiva, en un Pacaembú repleto, finalizó 2-1 ante el glorioso Peñarol de Montevideo. La ida, 0-0 en el Centenario, lo había dejado mejor parado al "peixe", que aprovechó la localía y no perdonó.

Neymar fue la llave, el jugador que destrabó la lucha, el mejor del certamen.

El título le permitirá a los hombres conducidos por Muricy Ramalho disputar en diciembre el Mundial de Clubes en Japón. Y, si no se cruza en el camino de ambos alguna sorpresa inesperada, jugar en la definición ante el poderoso Barcelona español, el de Messi, Xavi e Iniesta.

Pero regresemos a la ya histórica noche del miércoles 22 de junio de 2011, esa en la cual, el Santos de Pelé, volvió a ganar algo muy importante a nivel continental sin Pelé.

HASTA QUE APARECIÓ NEYMAR

El partido transcurrió por los carriles esperados durante la primera mitad.
Santos con la pelota, asumiendo el protagonismo y buscando penetrar a un Peñarol que lo esperaba agazapado, listo para intentar el golpe de nocaut que debía tener a Martinuccio como armador y a Olivera como ejecutor.

No pudieron desnivelarse en esos 45 iniciales. Aunque Santos tuvo 3 claras. Un cabezazo de Durval desde muy cerca; un tiro de Elano de media distancia que Sosa pudo despejar; y un tiro libre del propio Elano que el arquero "carbonero" desvió de manera excepcional al tiro de esquina.

Pero en el inicio del complemento apareció el crack (de apenas 19 años) y comenzó a sentenciar la contienda. Recibió de Arouca y la puso abajo, en el primer palo, para abrir el marcador y el encuentro.

Ahora, el que iba a jugar el partido que más le gustaba, ya no era Peñarol sino Santos.

Aparecieron los espacios, y entonces Danilo (que también tiene solo 19 años), con una gran acción, estampó el 2-0 que parecía definitorio.

Claro que enfrente estaba el Manya. Que es grande de verdad. Y que iba a vender su derrota bien cara, tal cual su historia se lo pedía. Y así fue. Descontó (1-2) gracias a un desborde de Estoyanoff que terminó con Durval metiéndola en su propio arco al intentar el rechazo. Quedaban 10 minutos y todo era posible.

Fueron los de Diego Aguirre. Pero primero Ganso, después Neymar en una corrida electrizante, y finalmente Ze Eduardo, se perdieron el tercero.

Llegó el final, que incluyó incidentes, para ponerle un sello auténticamente sudamericano, mal que nos pese.

BOLETO A JAPÓN

El pasaje a Japón quedó en manos de Santos. La competencia que daba como favoritos a Cruzeiro, Vélez, Internacional o Estudiantes de La Plata, fue para el cuadro de Villa Belmiro. El de Pelé, que festejó en el podio junto a Neymar y compañía.

Peñarol fue un digno finalista y cayó de pie, como su grandeza siempre le reclamará.

Sudamérica ya tiene definido su representante en el próximo Mundial de Clubes y será brasileño.

"El Peixe", fundado el 14 de abril de 1912, intentará festejar su centenario subido a la cima del mundo.