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BUENOS AIRES -- Terminada la segunda fecha de esta Copa América, ninguno de los 3 grupos definió aún posiciones, clasificados o eliminados. Un dato contundente que habla de un certamen apretado en resultados y con desarrollos cerrados en casi todos sus juegos. La expectativa crece de la mano de la incertidumbre que genera que todos los seleccionados llegan a la tercera y última fecha de la primera fase con chances de pasar a cuartos de final o marcharse eliminados.
Increíble, pero real. GRUPO A: BIEN POR COLOMBIA Y COSTA RICA En Santa Fe, ante un estadio colmado que terminó abucheando a los locales, Colombia fue más que Argentina. Lo superó claramente en una cuestión primaria y básica: fue un conjunto. Un bloque, un equipo con orden y premisas, con un plan, y con buenos ejecutores del mismo que, si hubiesen estado acertados en la puntada final, se llevaban con tranquilidad los tres puntos. Otro planteo inteligente del Bolillo Gómez que le dio una lección de táctica a Sergio Batista, un entrenador que aspiraba a parecerse al Barcelona pero que está logrando algo más difícil aún: que los albicelestes no se asemejen a ellos mismos. En ningún libro está escrito que Argentina debe tener un conductor, un enganche o un estratega, es cierto. Tanto como que cuando no lo tiene, el todo se parece a la nada y las formas dan lugar al desorden y al desequilibrio. El jugador "aduana" siempre fue una de las características de los argentinos. Puede estar en la zona media; o más adelantado, entre los volantes y los delanteros. Pero casi siempre estuvo (cuando faltó, es preferible olvidarse de lo que ocurrió). Desalojarlo por concepto, sería como sacarle los laterales que pasan al ataque a los brasileños, o su estilo inconfundible de sorprender siempre pasando por detrás de la línea de la pelota. Brasil no sería Brasil sin ello, y Argentina no es Argentina sin ese manejador de los tiempos.  Altas performances en algunos jugadores colombianos: Carlos Sánchez borró limpiamente a Messi, y además jugó. Freddy Guarín fue el termómetro, eligiendo los momentos adecuados para atacar o para retener el balón. Yepes muy firme atrás. Los laterales, Zuñiga y Armero, criteriosos y ambiciosos. Repetimos, con precisión arriba, era triunfo cafetero por dos goles de diferencia. Costa Rica sorprendió en Jujuy a una Bolivia que había mostrado otra cara en el debut. Le ganó con holgura, un 2-0 indiscutible que pone al equipo de Ricardo La Volpe en carrera y complica seriamente las chances de los de Gustavo Quinteros. Un resultado inesperado que puso la zona "on fire". Dos "ticos" mostraron hasta aquí un buen nivel. El arquero Leonel Moreira fue el mejor considerando los dos partidos; pero Joel Campbell, "el pollo" del excéntrico Richard, la rompió contra Bolivia. Figura y un gol. 19 años. Gran promesa. Bolivia demostró que cargar con la responsabilidad del juego no es lo mismo que esperar ordenado. Tuvo que ser protagonista y no supo. GRUPO B: MANDA VENEZUELA "La Vinotinto" venció por 1-0 a Ecuador en Salta. El gol conseguido por el Maestrico González dejó a los de César Farías como únicos punteros de una zona donde juegan, nada menos, que Brasil y Paraguay. Los venezolanos tienen solidez, disciplina táctica y velocidad en los traslados. Confirman con esta campaña que en las eliminatorias buscarán como nunca su primera clasificación a una Copa del Mundo. Roberto Rosales y Renny Vega son, por ahora, jugadores destacados en la competencia. Flojo Ecuador, dejando otra vez que el rival asuma los mayores riesgos. Sin convicción ofensiva, "a media agua", indeciso, falto de identidad. Muy tibio para nuestro gusto. Duro trabajo le espera a Reynaldo Rueda para mejorar esta pálida imagen. En Córdoba, Paraguay y Brasil igualaron 2-2. Cuatro goles en un solo match, ya es para festejar. Pero a no engañarse. No fue para tanto.  Mejor Paraguay, que mereció ganar. Con dos jugadores que repitieron su buena faena del primer juego: Néstor Ortigoza y Marcelo Estigarribia. El primero es el correcto receptor y distribuidor de la mayoría de los balones; el segundo fue la figura de la cancha. Sí, Estigarribia, el mismo que le ganó el duelo durante toda la tarde a Dani Alves. Los del Tata Martino no pudieron redondear una tarde provechosa porque "se durmieron" en la última pelota. Y enfrente estaba Brasil. Que no te perdona. Un dato: jugando mal, no pierde. Eso quiere decir algo, o mucho. Mano Menezes está experimentando, apostando a la juventud para buscar llegar a punto a "su" Mundial en 2014. Es lógico, con el boleto asegurado por país organizador, suena correcta la intención. En claro período de transición y sin eliminatorias a la vista, sería demasiado ácido profundizar la crítica. No corresponde. GRUPO C: CHILE JUEGA, PERÚ ES "GUERRERO" La doble jornada en el Malvinas Argentinas de Mendoza dejó algunas conclusiones salientes. La primera es que Chile, hasta acá, es el conjunto que mejor impresiona. Juega a jugar, y eso, dentro de este contexto, es muchísimo. "Las viudas de Bielsa", como las definió el propio Borghi, deben extrañar el vértigo del Loco. Pero este equipo, al bajar la prisa, naturalmente es más preciso. Son gustos, y aquí no analizaremos si es mejor o peor. Bielsa dejó una base importante, y eso facilitará el camino del Bichi. Que seguramente intentará ponerle su sello. Ya se verá si el nivel sube o baja, aún es prematuro para aventurarlo. Alexis Sánchez está en un gran momento. Tiene velocidad y gambeta, y las usa bien. Cuando le agrega gol, es letal.  El 1-1 con Uruguay no fue un premio para los trasandinos, tampoco un castigo exagerado. Los del Maestro Tabárez no perdieron sus atributos combativos que lo hacen un rival difícil para cualquiera, pero por el momento no tienen la explosión ofensiva que se espera de un tridente formidable como el que conforman Forlán, Cavani (se lesionó) y Suárez. En el otro choque, Perú superó con justicia a un "Tri" juvenil que está cumpliendo, de todos modos, una digna labor. Los conducidos por el charrúa Sergio Markarián le están agregando fiereza a su natural buen manejo. Se hicieron más guerreros. Y justamente Paolo, una de sus dos figuras (el otro es Juan Vargas), volvió a marcar para ganar el partido y convertirse hasta aquí en el máximo artillero de la Copa América, a razón de uno por jornada. Se fue la segunda. Hubo 10 goles en los 6 partidos, lo que lleva la cuenta general a 18 en 12, una magra cosecha de 1,5 gol por encuentro disputado. Un dato que habla con claridad de una Copa América áspera, cerrada, parejísima. Los que a priori eran los 4 favoritos (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay) aún no ganaron. Ni perdieron. Colombia, Venezuela, Chile y Perú son los que mandan. Se viene la tercera. Llegó la hora de la verdad. 8 pasajes a cuartos de final esperan. Los 12 participantes tienen chances. De seguir, o de irse. Raro, pero cierto.
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