Rampage Jackson ha revelado que tiene planes de pasarse al boxeo cuando finalice su contrato con el UFC, tras su humillante derrota frente a Jon Jones en el UFC 135.
Jackson, ex campeón de peso semipesado, se está acercando al final de su carrera en las AMM a los 33 años de edad. Su derrota ante Jones, por sumisión en el cuarto asalto, sin duda marcará su última arremetida por un título del UFC, aunque aún se espera que dispute una revancha -- seguramente ante Forrest Griffin -- a principios del año próximo.
Hace tiempo que Rampage se viene quejando de la nueva generación de peleadores, con tácticas y habilidades de piso convirtiéndose en una necesidad a medida que las AMM continúan su desarrollo. Jackson ganó reconocimiento con nocauts de un golpe sobre hombres de la talla de Chuck Liddell y, más adelante en su carrera, Wanderlei Silva, y añora repartir más golpes antes de colgar los guantes.
Contra Jones, Rampage terminó frustrado ya que el campeón usaba permanentemente sus excelentes movimientos de cabeza para mantenerse fuera del alcance de Jackson, por lo que Rampage ahora quiere mudarse al boxeo, adonde la lucha de piso no es un factor.
"Odio pelear contra gente que tiene miedo", dijo Jackson para ESPN UFC Podcast. "Cuando peleas contra alguien que tiene miedo nunca sabes lo que va a hacer. Se dan vuelta y corren.
"Es por eso que me iré al boxeo. Voy a probar suerte en el boxeo ya que tienen que quedarse contigo. Si me noquean no me importa porque al menos es una pelea.
"He probado mucho el boxeo, me estoy enamorando del boxeo, y sé que puedo poner gente en los asientos".
No obstante, el futuro inmediato de Rampage está en el UFC, y un viaje a Japón en febrero es su próximo destino probable. El ex campeón inicialmente llamó a Mauricio Shogun Rua, pero como el brasileño tiene programado enfrentarse a Dan Henderson, Griffin parece la opción más obvia.