BUENOS AIRES -- Diez años pasaron y muchas cosas cambiaron en la vida de Stefano Canale. Ahora volvió a su querida Córdoba, y a La Tablada, el club de sus amores. A los 15 había dejado su provincia para trasladarse junto a su familia a Italia, y allí siempre estuvo cerca del rugby, al igual que sus hermanos Alejandro y Gonzalo. En este presente, también la ovalada está en primer plano y empezó con el pie derecho con el título logrado con los Dogos en el Seven de Córdoba, en el 80 aniversario de la Unión.
En charla con Scrum, el menor de los Canale contó cómo fue su regreso al país, los motivos, sus objetivos para lo que viene y el deseo de juntar a todos los hermanos en La Tablada, aunque no parece muy cercano este sueño por la vida de Gonzalo en el poderoso Clermont y en el seleccionado italiano.
- ¿Cómo fue tu vuelta a La Tablada?
- Era algo que venía pensando hacia tiempo y por algunas circunstancias decidí volverme a Córdoba y por supuesto a jugar con mi club. Una felicidad indescriptible.
- ¿Fue difícil tomar la decisión?
- Sí, sobre todo por el lado "profesional", porque yo jugaba al rugby como laburo en Europa y acá eso no es posible, pero tomé la decisión y le di para adelante. No me arrepiento.
- ¿El motivo principal cuál fue? En Italia se está viviendo una crisis importante y el rugby no está ajeno, ¿no?
- Principalmente fue lo económico, hay crisis y los clubes no tienen plata para invertir. Al no ver mucho futuro decidí volverme y tratar de disfrutar el rugby con mis amigos y mi club de toda la vida.
- ¿Fue raro el regreso? ¿Cambiaron muchas cosas?
- Fue algo raro porque cuando me fui jugaba en Juveniles (M-15) y ahora que volví ya soy adulto y tengo la ambición de jugar en Primera. Digamos que hay que ganarse un lugar y hay mucha competencia. Una de las cosas que más me impactó luego de estos años es la evolución que hubo, no sólo a nivel técnico sino también en estructuras y capacitación del staff que sigue al equipo. Los jugadores son seguidos en todo, se maneja mucho la alimentación y la regeneración con hielo después de los partidos y un montón de cosas más.
- ¿Y con qué objetivos volviste?
- Con ganas de disfrutar lo que es la vida de club y de mis amigos. Deportivamente espero poder estar en el plantel para la próxima pretemporada y con mucho sacrificio ganarme un lugarcito...
- ¿Y seleccionados? Ahora hay mucha actividad en el país, con competencias como Vodacom, Americas, Sudamericano, ¿se piensa en eso? Mismo con el seleccionado de Córdoba...
- No pensé en eso, la verdad. Creo que como primer objetivo es poder jugar para mi club y demostrar, lo que pueda venir después va a ser un plus. Tuve la suerte y el honor de jugar este Seven de los 80 años de la Unión Cordobesa de Rugby con un grupo de jugadores que técnicamente y humanamente son algo increíble.
- ¿Cómo fue jugar ese Seven?
- Una experiencia inolvidable, jugar con la provincia donce crecí y encima haber salido campeones fue una alegría enorme. Algo que no me voy a olvidar nunca.
En estos 10 años, Stefano Canale hizo las juveniles en Benetton cuando llegó, y luego en Primera vistió las camisetas de Petrarca Padova, Rovigo y el último club fue Cavalieri Prato. En total fueron 44 partidos para el medios crum y marcó 5 tries, todos en el Super 10 azzurro.
- ¿Tus hermanos qué te dijeron de esta decisión de pegar la vuelta?
- Alejandro, el más grande, ya se volvió este invierno y está jugando en la Primera de La Tablada. Gonzalo, que sigue en Francia, me aconsejó que haga lo que me decía el corazón y que lo haga con determinación. Y así lo hice...
- ¿Sueñan con jugar todos juntos en La Tablada?
- Es algo que generalmente nos preguntan y en chiste decimos que podríamos hacer medio, apertura y centro los tres hermanos, con mi viejo de entrenador. Pero hablando seriamente creo que lo más factible es que pueda jugar con mi hermano Ale en algún momento. Ya jugamos la semifinal contra Tala en Intermedia y fue un momento muy lindo.
- ¿A Gonzalo no lo convencen?
- Creo que si vuelve va a ser más adelante, no le preguntamos de ese tema pero está muy de novio y metido en el rugby europeo, así que tiene para algunos años más seguro.
Stefano ya se acomoda de nuevo a la vida de Córdoba y tiene sus sueños. Estuvo 10 años alejado de La Tablada y es momento de disfrutar para el más chico de los Canale.