BUENOS AIRES -- No es una verdad de perogrullo ni un simple lugar común, es una realidad: el fútbol es el deporte más democrático de todos, en el que hasta el más humilde es capaz de acabar con el poderoso. Y de acuerdo a los antecedentes, se puede decir que la Eurocopa es el torneo más pluralista del planeta.
Desde el nacimiento del certamen, se han sucedido decenas de sorpresas y batacazos. Entre el triunfo de Yugoslavia en 1960 y la eliminación de Holanda en 2008, los Seleccionados más pequeños han dado muestras de valentía una y otra vez. De hecho, en 1992 y 2004, el campeón fue un equipo que en la previa no tenía ningún tipo de posibilidades.
Hoy, a días del comienzo de la Euro de Ucrania y Polonia, recordaremos aquellos partidos que hicieron historia porque, como en el relato bíblico, mostraron a un David mucho más fuerte y valiente que el tremendo Goliat.
LOS 25 GRANDES BATACAZOS DE LA HISTORIA
1- Grecia 1-0 Portugal, final de la Euro 2004.
Cuando el 3 de julio de 2003 Luiz Felipe Scolari afirmó: "A la final llegan los mejores, no sería raro que Grecia gane", de seguro no pensaba vivir el desenlace que vivió. El técnico de Portugal respetaba a la increíble Selección que venía de eliminar a Francia y República Checa pero sabía que el gran favorito era su equipo, con Deco, Figo, Cristiano Ronaldo y el apoyo del público.
Los helenos habían vencido a los locales en el partido inaugural y la férrea defensa de Otto Rehagel ya se había ganado un aura mítica. Pero el mundo entero supuso que Grecia estaba más que satisfecha con lo hecho hasta la final y que Portugal lograría su primer título importante en el Estadio da Luz. Sin embargo, los guerreros se preparaban para dar el batacazo más grande de la historia de la Eurocopa.
A los doce minutos del segundo tiempo, Angelos Charisteas sacó un cabezazo ya legendario y le dio a Grecia un título jamás soñado. Hasta este campeonato, la Selección helena había jugado sólo un Mundial y dos Eurocopas, una clara muestra de que era uno de los equipos más modestos del continente. Aquel fue el día en el que once nuevos dioses se subieron al olimpo.
2- Dinamarca 2-0 Alemania, final de la Euro 1992.
El campeón del mundo, con todas sus figuras, enfrentaba a un Seleccionado que no había logrado la clasificación pero que se vio beneficiado por el retiro de Yugoslavia, un país que se desangraba por la guerra. Alemania venía de vencer al local Suecia en semis y Dinamarca había dado el batacazo frente a Holanda, el campeón defensor, en las semis.
Los daneses jugaban su tercera Euro, después de las derrotas en semis en 1964 y en 1984. Tenían una generación lujosa, con abanderados como Peter Schmeichel, Brian Laudrup y Henrik Larsen, entre otros. Sin embargo, nadie apostó por ellos frente al equipo de Klinsmann, Effenberg, Sammer y Brehme. El favorito era el máximo ganador de este torneo, de eso no había dudas.
Pero los hermanos menores del fútbol alemán decidieron por una vez sacarse todos los complejos y le ganaron a los maestros. Con un gol en cada tiempo, Dinamarca jugó el mejor partido de toda su historia y logró el título contra todos los pronósticos. Fue, hasta 2004, la sorpresa más resonante de todos los tiempos.
3- Francia 4-5 Yugoslavia, semifinales de la Euro 1960.
La primera Eurocopa de la historia se disputó en Francia. Y, como corresponde, el local era el gran candidato. En su primera partido de la fase final, se enfrentó a una desconocida Yugoslavia. Eran las semifinales, porque en aquellos tiempos la Euro sólo contaba con cuatro encuentros en su etapa definitiva.
Cuando a los ocho minutos del primer tiempo Wisnieski puso el marcador 3-1 para los locales, nadie se extrañó, todo iba por los carriles normales. Tampoco hubo sorpresa cuando nueve minutos más tarde Heutte marcó el 4-2 y no le dejó festejar a los rivales el gol del descuento. Todo transcurrió con normalidad hasta que, a quince minutos del final, Tomislav Knez anotó el 4-3.
En ese momento, Yugoslavia reaccionó y Dražan Jerkovic le dio los dos golpes de efecto a los anfitriones, que perdieron 5-4 y se despidieron de "su" torneo. Toda Europa se rindió ante los yugoslavos, que llegaron como retadores y dieron un batacazo inolvidable antes de perder la final ante URSS.
4- Inglaterra 0-1 Irlanda, primera fase de la Euro 1988.
La clasificación para la Euro ya era todo un éxito para la Irlanda de Jack Charlton. Por primera vez en la historia, la Selección del Trébol lograba participar de un certamen de nivel y todo lo que podía pasar en Suecia sería de regalo. Además, el grupo que le tocó en suerte -o mala suerte- fue el colmo del debutante: Inglaterra, Holanda y Unión Soviética.
Pero jugar contra los ingleses siempre es una motivación extra para los hombres de verde y por eso el gran objetivo no era avanzar de fase, sino hacer un buen partido frente a la Rubia Albión, a la que jamás habían vencido en un torneo oficial. Fue el 12 de junio, en Stuttgart, en la primera
fecha del torneo. Ray Houghton marcó a los seis minutos el único gol del encuentro e hizo delirar
a toda Irlanda, que obtuvo una de sus victorias más festejadas justo en su debut en un campeonato importante.
5- Grecia 1-0 Francia, cuartos de final de la Euro 2004.
Una vez más aparece en este ránking el heroico equipo de Otto Rehagel. En la primera fase había sorprendido tras eliminar a España y logró la clasificación junto a Portugal, equipo que sucumbió contra los guerreros de Atenas. El rival en octavos era el campeón defensor, con Zidane, Trezeguet, Henry y toda la historia a cuestas.
Francia esperaba un paseo para meterse en una nueva semifinal, pero se encontró con un equipo comprometido, seguro de sí mismo y valiente como pocos. No tenía grandes virtudes futbolísticas ni tampoco una idea de juego lujosa, pero sí convicción. Gracias a eso logró lo imposible: con un gol de Charisteas eliminó a los campeones y se metió en la semifinal. Como es sabido, eso no sería lo único que harían en Portugal.
6- Holanda 1-3 Rusia, cuartos de final de la Euro 2008.
Holanda venía de golear a Francia y a Italia. Había firmado la mejor primera fase de la historia del torneo y había triturado a sus rivales en el temido "grupo de la muerte". En cuartos de final debía enfrentar a Rusia, una incógnita que le ganó a Grecia y Suecia pero perdió por goleada ante España. No parecía un rival de cuidado para la reencarnación de la Naranja Mecánica.
Sin embargo, Pavlyuchenko y Arshavin tuvieron su partido consagratorio y los rusos volvieron a festejar, como en los primeros años de la Euro. Fue un triunfo 3-1 gracias a dos goles en el tiempo suplementario. Holanda volvía a caer cuando se suponía que debía despegar y Rusia retornaba a un sitio que creía perdido para siempre: las semis de la Euro.
7- Dinamarca 2-2 Holanda, semifinales de la Euro 1992.
Otra vez hace su aparición en este resumen la legendaria Dinamarca de 1992. El equipo de Laudrup logró superar la fase inicial tras dejar en el camino a candidatos como Inglaterra y Francia, a la que venció en el último encuentro del grupo A. En semifinales se
midió con Holanda, el campeón defensor. Y allí fue cuando se metió en la historia grande.
Durante los noventa minutos, el conjunto escandinavo fue superior a un Seleccionado que todavía tenía el tridente de oro -Rijkaard, Gullit y Van Basten- y a un joven crack: Dennis Bergkamp. Recién a cuatro minutos del final Rijkaard convirtió el empate 2-2. En la definición por penales Peter Schemeichle le atajó el remate a Marco Van Basten y Dinamarca se clasificó para su primera final de Eurocopa.
8- Checoslovaquia 3-1 Holanda, semifinales de la Euro 1976.
La Naranja Mecánica venía de asombrar al mundo en el Mundial 1974 pero también venía de perder la final contra Alemania. Aunque la revolución estaba hecha y nadie dudaba ya de la importancia histórica que tendría en el futuro el equipo de Rinus Michels, los holandeses necesitaban una vuelta olímpica para darle un éxito al fútbol total. La Euro 1976 era la gran oportunidad, pero, Checoslovaquia tenía preparado un gran golpe al candidato.
En Zagreb se disputó la semifinal que consagró a un modesto equipo checoslovaco y marcó el fin de a carrera de Johann Cruyff en los torneos internacionales. El tiempo reglamentario finalizó igualado 1-1 y en la prórroga Nehoda y Vesely anotaron los goles que le dieron la clasificación al retador. Una vez más, la Naranja Mecánica caía en una instancia definitiva. Aunque eso no opacó el brillo de ese equipo maravilloso, sí fue algo inolvidable para toda Checoslovaquia.
9- URSS 2-0 Italia, semifinales de la Euro 1988.
A fines de la década del ochenta, Unión Soviética ya no era aquel Seleccionado temible de los años sesenta. Lev Yashin ya no intimidaba a todos desde el arco y el comunismo estaba a punto de desaparecer de Europa. Sin embargo, la primera campeona continental tuvo en 1988 una despedida acorde a su historia. Ganó su grupo tras vencer a Inglaterra y Holanda y se clasificó para semifinales. En esa instancia logró el mejor triunfo de sus últimos años ante Italia.
El partido se disputó en Stuttgart y los soviéticos fueron superiores a la Azzurra de principio a fin. Los goles llegaron en el segundo tiempo, gracias a Gennadiy Litovchenkoy y Oleh Protasov. La Unión Soviética derrotó por 2-0 a la Italia de Zenga, Baresi, Bergomi, Maldini, Mancini y Vialli. Fue la última victoria de la revolución en Europa.
10- Letonia 0-0 Alemania, primera fase de la Euro 2004.
Letonia es uno de los países más pequeños que alguna vez disputaron una Eurocopa. Su clasificación para el torneo de 2004 fue una sorpresa mayúscula, ya eliminó a Hungría y Polonia en la fase de grupos y en el repechaje sorprendió a Turquía, que venía de ser tercera en el Mundial 2002. Todos creyeron que, con Alemania, Holanda y República Checa en su zona, su paso por Portugal sería un paseo. Pero no sabían que éste sería el certamen de las sorpresas.
El equipo teutón tuvo la iniciativa pero jamás logró superar la férrea defensa letona, que jugó con una intensidad propia de los momentos históricos. En la ciudad de Porto, la pequeña república de la ex Unión Soviética sumó su primer y hasta ahora único punto en un torneo internacional y
Alemania comenzó un renacimiento que se extiende hasta nuestros días.
11- Checoslovaquia 2-2 Alemania, final de la Euro 1976.
La historia es conocida y ya fue contada hace algunos días por separado, como se merece. Sin embargo, no podía faltar en este resumen de batacazos. Alemania, el campeón del mundo, llegaba a la Euro de Yugoslavia como amplio favorito. Tras la derrota de Holanda, la final parecía un trámite contra Checoslovaquia, que jugó un fútbol intenso y logró forzar la definición por penales. Allí apareció Antolin Panenka y se convirtió en leyenda.
12- España 0-1 Noruega, primera fase de la Euro 2000.
En 2000 España todavía cargaba con su complejo de inferioridad. Siempre llegaba a los torneos importantes como favorito y se iba derrotado, sin dar respuestas anímicas ni futbolísticas. La Euro de Holanda y Bélgica no fue la excepción y en eso tuvo mucho que ver Noruega. En su debut absoluto en una Eurocopa, el equipo escandinavo venció 1-0 al Seleccionado que comandaba Raúl. Iversen anotó el gol de una Selección que daba un gran golpe el mismo día de su bautismo.
13- Alemania 0-1 España, primera fase de la Euro 1984.
España se clasificó a la Euro 1984 de una manera increíble, que ya tuvo su lugar en este derrotero de historias del torneo europeo más importante. Por eso, nadie esperaba mucho del equipo en Francia. Sin embargo, el Seleccionado dirigido por Miguel Muñoz tenía reservada una de las victorias más impactantes de su historia moderna. Con un gol de Antonio Maceda en el último minutos, España venció 1-0 a Alemania, clasificó para las semis y eliminó a su rival, el campeón defensor.
14- Croacia 3-0 Dinamarca, primera fase de la Euro 1996.
Dinamarca llegó a la Euro 1996 como el defensor del título y Croacia hacía su debut en un torneo internacional. No parece haber equivalencias, sin embargo en el fútbol los antecedentes no juegan y el conjunto balcánico se divirtió con los campeones. Con dos goles de Suker y uno de Boban, los croatas golearon 3-0 al equipo de los hermanos Laudrup y logró la clasificación para cuartos de final, instancia a la que Dinamarca no logró acceder.
15- Grecia 1-0 Rep. Checa, semifinales de la Euro 2004.
Venía de ganarle un partido a Portugal y de eliminar a Francia. Lo de Grecia en la Euro 2004 ya era cosa seria. Sin embargo, el rival de semifinales también tenía sus pergaminos. Había triunfado en todas sus presentaciones -Alemania, Holanda, Letonia y Dinamarca- y era el mejor equipo del torneo hasta el momento. Pero el luchador conjunto heleno logró llevar el partido a la prórroga y Dellas marcó el gol del triunfo sobre el final del primer tiempo extra. Fue otra de las hazañas griegas en Portugal.
16- Holanda 3-0 Italia, primera fase de la Euro 2008.
Que Holanda le gane a Italia no es un batacazo. Ambas son dos de las grandes potencias del mundo y en sus enfrentamientos todo puede suceder. Lo que sí fue sorprendente fue cómo se dio el partido disputado en Berna. Fue un baile de principio a final. Terminó 3-0 gracias a los goles de Van Nilstelrooy, Van Bronckhorst y Sneijder, pero podría haber sido una goleada más amplia. Los campeones del mundo fueron reducidos a un equipo de barrio por una Holanda en estado de gracia.
17- Yugoslavia 1-0 Inglaterra, semifinales de la Euro 1968.
Inglaterra venía de ser campeona mundial en su casa en 1966. El equipo de Bobby Moore, Bobby Charlton y Geoff Hurst era uno de los máximos candidatos a dar la vuelta olímpica en Italia, en la tercera Euro de la historia. Sin embargo, se topó con un ignoto Seleccionado yugoslavo que le jugó de manera inteligente en Nápoles y obtuvo un sorprendente triunfo 1-0 con gol de Dzajic, en la semifinales. Fue la primera gran frustración inglesa en la Euro. Sólo la primera.
18- Grecia 2-1 Portugal, primera fase de la Euro 2004.
Puede aburrir la presencia de Grecia una y otra vez en este ránking, pero es imposible no destacar a este equipo heroico. En el partido inaugural comenzó a gestar su leyenda. Todos creyeron que el anfitrión viviría un comienzo tranquilo ante un equipo de segundo orden, pero Otto Rehagel tenía guardada su primera sorprensa. Con goles de Karagounis y Basinas, Grecia derrotó por 2-1 a Portugal y dieron el paso inicial en su torneo histórico. Luego, volverían a ganar en la gran final.
19- Italia 0-0 Bélgica, primera fase de la Euro 1980.
Bélgica sólo había jugado una Eurocopa, en 1972 y como local. Además, sólo tenía en Pfaff, Gerets y Ceulemans a futbolistas de primera clase internacional. Por eso, ni el anfitrión Italia ni Inglaterra ni España pensaron en tener a un rival de cuidado en el grupo B. Sin embargo, en la última fecha, el Seleccionado de los países bajos logró un histórico empate 0-0 ante la Azzurra en Roma y se clasificó para la final, dejando en el camino a los locales.
20- República Checa 2-1 Italia, primera fase de la Euro 1996.
La Euro 1996 marcó el renacimiento de una de las grandes potencias de los primeros años del torneo. La República Checa, ex Checoslaquia, se coronó subcampeón en un campeonato en el que dejó en el camino a grandes equipos. Uno de ellos fue Italia, a la que venció 2-1 en la primera ronda gracias a los goles de Nedved y Bejbl. Tras ese resultado, la Azzurra no pudo reponerse y quedó eliminada en la fase inicial.
21- Croacia 2-1 Alemania, primera fase de la Euro 2008.
A fines de la década del 2000, Alemania ya era de nuevo la superpotencia de siempre. Atrás habían quedado algunas malas actuaciones y el equipo teutón era temible otra vez. Aunque en su camino rumbo a la final de la Euro 2008 iba a sufrir un traspié ante un verdugo conocido. Croacia, como en Francia 1998, le dio una cachetada inesperada en el debut de ambos. Con un espléndido Luka Modric, los croatas ganaron 1-0 en Viena.
22- Rep. Checa 3-2 Holanda, primera fase de la Euro 2004.
A los veinte minutos Holanda ya ganaba 2-0 con goles de Bouma y Van Nistelrooy y todos creyeron que se venía una goleada. Los chechos venían de vencer con lo justo a Letonia y no tenían un equipo sólido como en otra ocasiones. Sin embargo, de la mano de Milan Baros lograron dar vuelta el resultado y consiguieron un inesperado 3-2. Fue el triunfo que los convirtió en candidatos, aunque luego Grecia los bajaría de la nube.
23- Portugal 3-0 Alemania, fase de grupos de la Euro 2000.
Portugal sólo había jugado una Eurocopa y dos Mundiales hasta 2000, aunque la aparición de Luis Figo le había dado una relevancia que poco tenía que ver con la historia. En Holanda y Bélgica, el Seleccionado luso se convirtió en una nueva potencia europea. Y mucho tuvo que ver el extraordinario triunfo sobre Alemania. Sérgio Conceiçao marcó los tres goles y fue la gran figura de la victoria 3-0 en Rotterdam, que marcó la eliminación de los teutones y la clasificación en primer lugar de los lusitanos.
24- Suiza 2-0 Portugal, fase de grupos de la Euro 2008.
Sí, Suiza ya estaba eliminada y sí, Portugal ya estaba clasificada, pero el triunfo del conjunto helvético ante la Selección de Cristiano Ronaldo fue importante por varias razones. Los dos goles de Hakan Yakin le dieron una alegría a los aficionados locales, que al menos festejaron un triunfo inesperado ante uno de los favoritos. Inesperado por lo que había sucedido en los primeros dos encuentros y por la diferencia de calidad entre uno y otro plantel.
25- Dinamarca 2-1 Francia, primera fase de la Euro 1992.
El ránking se cierra con uno de los dos Seleccionados más sorprendentes de la historia de la Euro. Dinamarca, en 1992, comenzó a forjar su historia gracias a esta victoria 2-1 sobre Francia en Malmo. Definieron mano a mano uno de los dos clasificados a semifinales. Los galos, con Jean-Pierre Papin en el equipo, eran los grandes candidatos. Sin embargo, Larsen y Elstrup marcaron los goles del triunfo danés, que los catapultó a la lucha por el título. El resto de la historia es conocida.