Dominic Raynor 12y

Tottenham, temporada 2012/13

LONDRES -- Fue la temporada de la frustración y del dolor para los Spurs la última vez. Después de terminar cuartos en la Premier League, se les negó un lugar en la Champions League cuando el sexto clasificado el Chelsea desafió las probabilidades de ganar la competencia emblema de Europa y los suplantó en el torneo esta temporada.

Fue un duro golpe a la moral en White Hart Lane, y hundió las posibilidades del Tottenham de contratar los servicios del centrocampista Luka Modric. Pero, en realidad, los Spurs deberían haber tenido el tercer lugar asegurado y señalaron con el dedo en una dirección al culpable de tirarlo a la basura.

En febrero, con diez puntos de ventaja sobre sus rivales del norte de Londres, el Arsenal, las ruedas se desprendieron de una forma dramática, cuando Harry Redknapp se instaló como favorito para suceder a Fabio Capello como técnico de Inglaterra después de que el italiano se fue del equipo nacional.

Redknapp, que no consiguió al final el trabajo en Inglaterra, insistió en que la especulación no era distracción para él y sus jugadores, pero, como los Spurs derramaron puntos y quedaron en el cuarto lugar, el presidente Daniel Levy no estuvo de acuerdo y despidió a su manager.

El hombre encargado de llevar al Tottenham de nuevo a la UEFA Champions League será André Villas-Boas, quien fue despedido por el Chelsea después de 27 partidos de liga en Stamford Bridge. Es una gran apuesta por parte de Levy, y Villas-Boas rápidamente tiene que asumir una serie de cuestiones clave en White Hart Lane si quiere emular su éxito en el FC Porto - donde ganó el triplete - en lugar de repetir su falta de ello con los Blues.

En primer lugar, debe convencer a los jugadores que él es el hombre adecuado para el trabajo. Su intento de revolucionar el Chelsea en términos de personal y el estilo no cayó demasiado bien con sus jugadores influyentes, pero los Spurs parece estar más predispuestos al plan maestro de AVB y tiene los jugadores para llevarlo a cabo.

En Gareth Bale y Aaron Lennon, dos de los más rápidos extremos de la liga, y con laterales con mentalidad ofensiva como Kyle Walker y Benoit Assou-Ekotto ofreciendo apoyo por las bandas, el portugués ya cuenta con el marco sobre el cual construir un equipo de respuesta veloz que tuvo tanto éxito en el Porto.

En el centro de la defensa, puede que el baluarte de los Spurs, Ledley King, haya dicho adiós en un momento donde se vio plagado de lesiones de rodilla, pero el nuevo fichaje, Jan Vertonghen, es defensor con juego, que debería integrarse con brillantez, ya sea con Michael Dawson o Younes Kaboul, con William Gallas en la banca.

Los problemas reales de Villas-Boas comienzan en el centro del campo, donde perderán la brecha creativa si Modric deja el club después de un verano con especulación de transferencia. Una opción sería retroceder a Rafael van der Vaart al centro del campo, pero el holandés, que opera principalmente como un media punta, apenas duró unos 90 minutos la temporada pasada y ofrece poco a la defensiva.

El nuevo fichaje Gylfi Sigurdsson, quien impresionó en Swansea estando a préstamo del Hoffenheim alemán la temporada pasada, es probablemente la mejor contratación. El islandés, que también estuvo en la mira del Liverpool, es un futbolista de calidad, pero son dos cosas distintas brillar en un equipo recién ascendido a reemplazar a uno de los mejores volantes creativos de Europa. También se habla de la llegada de Joao Moutinho del Porto para ayudar a tapar el hueco.

Un departamento en donde necesitarán ayudar es en el ataque, tras las partidas de Louis Saha, Roman Pavlyuchenko y Emmanuel Adebayor, y la muy posible partida de Giovani dos Santos en breve. Eso deja a Jermain Defoe, quien sólo tuvo un rol secundario la temporada pasada, y al joven Harry Kane como a los únicos delanteros en el club.

Este es obviamente el gran dolor de cabeza para Villas-Boas. Hablando de la pretemporada, y después de utilizar a Bale como delantero improvisado, dijo: "Estamos siempre en busca de un goleador más, ya que es una posición que estamos buscando para fortalecer. Creo que teniendo tres delanteros en una temporada de la Liga Premier es más que suficiente. A veces no lo es, pero espero que lo sea. Estamos tratando de traer a alguien más".

Pero incluso si AVB se las arregla para contratar a un delantero, descubrir un nuevo Modric, comenzar a ejecutar y restaurar su reputación después de sus decepciones con el Chelsea, terminar entre los cuatro primeros no dependerá exclusivamente del Tottenham. Manchester City, Manchester United y el Chelsea esperan tomar las tres primeras posiciones, dejando a Liverpool, Arsenal, Newcastle y Tottenham a batallar por las migajas.

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