PARIS -- Roger Federer volvió al centro de la escena, a lo más alto del tenis mundial para ser más específicos. El suizo, a los 31 años, supo retornar a los primeros planos y alcanzó nuevamente el número uno del ránking de la ATP. Y eso, según dijo, tuvo una pequeña consecuencia: el estado físico y mental.
"Tengo una gran necesidad de vacaciones. Estoy lesionado, cansado, agotado y necesito cortar para decidir a dónde voy", explicó el helvético en declaraciones que recoge la edición digital del diario francés L'Équipe.
Federer, cabe destacar, viene de participar en la Copa Davis en el repechaje ante Holanda, en el que Suiza, con su festejo en Amsterdam, irá en busca del Grupo Mundial ante República Checa, de local, del 1° al 3 de febrero.
Estos partidos por el certamen continental, claro, se suman al trajín de la jornada para el número uno del mundo, que lleva 69 partidos -61 victorias- disputados en 2012, con su séptimo título en Wimbledon y la medalla de plata en los Juegos Olímpicos.
"Aún no he decidido nada sobre el final de la temporada. Aunque haya un programa establecido, todo puede cambiar. Me corresponde a mí decidir qué es importante, qué es lo más importante y qué es verdaderamente importante", señaló el suizo.
Vale decir que Federer el año pasado, para esta misma época de la temporada, se tomó unas vacaciones de seis semanas y ahora el camino no parece estar muy lejano. "Ante todo, tengo que pensar a largo plazo, en los próximos seis o doce meses", remarcó.
El número uno del mundo, cabe destacar, en 2011 frenó su actividad luego de los playoffs de Copa Davis y recién volvió a la acción para el ATP de Basilea, en su casa, en la primera semana de noviembre. Luego jugó los Masters 1000 y la Copa Masters. ¿La particularidad? En su retorno a las canchas ganó sus 15 partidos.