BUENOS AIRES -- La dirigencia futbolística brasileña se despachó contra la directiva de AFA por haber mezclado fútbol con política y haber elegido a Chaco como escenario de un clásico que bochornosamente ni siquiera llegó a empezar por un desperfecto en el sistema de luminación.
"La AFA tiene que pensar mejor a la hora de programar esos juegos, hasta por una cuestión de respeto para las personas que pagan la entrada", criticó Andrés Sánchez, director de Selecciones de la Confederación Brasileña de Fútbol, en declaraciones al diario Folha de Sao Paulo.
Y advirtió que eso "es lo que resulta cuando se mezcla fútbol y política", en una clara referencia en torno a que se hizo el partido en Chaco por el alineamiento político de Jorge Capitanich con la Casa Rosada, a su vez socio de la AFA en las transmisiones de fútbol.
Sánchez, un empresario brasileño hijo de españoles, se despreocupó de los protocolos diplomáticos usuales y cuestionó sin pelos en la lengua a la AFA, tal vez con la fuerza que en el ámbito dirigencial brasileño le permitió llevar al popularísimo Corinthians a ganar su primera Copa Libertadores, tomando al club casi desde los infiernos de la desaparición.
Atrás quedaron gastos que hasta 24 horas después del papelón nadie mensuró: en viajes de ida y vuelta para ambas delegaciones, futbolistas argentinos que volaron desde Brasil a Ezeiza y de allí a Resistencia, y sobre todo público que no cobra por jugar partidos sino que gastó mucho más que una entrada, lo único que recuperará según anunció el propio gobernador Jorge Capitanich.
Aséptica fue la AFA al limitarse a las explicaciones del titular del Departamento de Selecciones, Germén Lerche, de por qué no se podía jugar al día siguiente.
Ni la AFA ni el club Sarmiento y menos Capitanich, gestor como gobernador y dirigente deportivo, son ajenos y deberán afrontar las responsabilidades.
El reglamento del Superclásico de las Américas señala en su artículo 8 inciso 2 que "el anfitrion garantizará que las instalaciones y el estadio en los que se disputen los partidos cumplan con el reglamento de seguridad y las demás directrices e instrucciones de FIFA vigentes para partidos intenacionales" En el inciso 4 especifica que "Los partidos que se jueguen de noche solo podrán disputarse en sedes cuyas instalaciones garanticen una iluminación uniforme de todo el terreno de acuerdo con las especificaciones de la FIFA".
Garantías, por lo pronto, faltaron. La suspensión no está contemplada en el reglamento y según el directivo brasileño será una próxima reunión de CONMEBOL la que defina si se reprograma o si la Copa queda en Brasil.