BUENOS AIRES -- Tras dos años alejado de la definición, Hindú volvió a coronarse campeón. Su séptimo título en cinco años, en los que su reinado fue interrumpido por el SIC. En un plantel con experiencia y varios campeonatos en su haber, el capitán Juan Ignacio Gauthier disfrutó de manera especial la nueva conquista. Saltó, gritó, dio la vuelta olímpica con sus compañeros y luego se subió solo al Elefante y recorrió varios metros mientras saludaba a sus seres queridos.
- ¿Qué sensaciones se te cruzaron tras este título?
- Es un gran cierre de año, jugamos contra un gran equipo, pudimos sumar, creo que tuvimos una buena defensa, eso es lo importante, y se nos dio. Es una alegría enorme, creo que arrancamos un año con mucho recambio, con lesionados, pero tuvimos una gran cabeza, fuimos mejorando, jugamos un muy buen rugby. Sobre todo nos divertimos, que fue lo que nos propusimos a principio de año, así que muy contento.
- ¿Por qué son los campeones?
- No sé, pudimos ganar los partidos que teníamos que ganar, fuimos inteligentes, cuando tuvimos que sumar, sumamos. Creo que también siempre hay un poco de suerte, tuvimos un corazón gigante, unas ganas enormes. Cambiaron nombres pero el sentimiento está igual y esto es un regalo para todo el club.
- ¿Sentís que lo mejor del juego de Hindú llegó en las últimas fechas?
- Sí, tuvimos una gran cabeza para jugar estos partidos. Fuimos fieles a nuestro juego, no nos traicionamos por jugar esta instancia, seguimos manteniendo nuestro ritmo y estamos muy contentos por eso.
- El año pasado volviste de Europa, ¿fue para esto?
- Volví para disfrutar, la verdad que esto es un regalo, no es verso, disfrutamos mucho toda la semana, todos los sábados y domingos. Esto es un regalo, no sólo para nosotros quince, sino para todo el club.
A mediados de 2011, volvió a su club tras un paso por Italia y Francia, y el equipo quedó eliminado en cuartos de final frente a San Luis. Su reflexión en aquel entonces reflejaba una situación que el último sábado quedó demostrada: "Estamos en un proceso, volviéndonos a armar, a encontrar el juego. Es un equipo diferente al de los últimos años, ya nos había pasado de perder cuatro semifinales seguidas para poder salir campeones. Hay que laburar, ya no se gana con la camiseta". Sus palabras de aquel día suenan ahora a premonición...por algo fue el capitán del barco campeón.