MADRID -- La Champions no perdona. O machacas al rival cuando tienes la oportunidad o sino lo pagas. Es lo que le pasó al Real Madrid contra el Manchester City. Durante los primeros 25 minutos los de Mourinho tuvieron una intensidad altísima y atacaron en oleadas. Hasta cinco ocasiones tuvo para hacer gol y sólo consiguió uno. Después de ese tiempo el equipo se fue diluyendo y desapareció hasta perder por completo la identidad, sobre todo en la segunda parte donde no existió.
El madridismo tiene motivos para estar preocupado. Las sensaciones que transmite el equipo no son buenas en esta competición… de momento. Hacer cinco puntos de doce posibles en los dobles enfrentamientos contra Dortmund y Manchester City es un bagaje pobre. Recuerden además que contra el City dio la vuelta al marcador en el Bernabéu en los últimos minutos con goles de Benzema en el 87' y Cristiano en el 90', y ante el Dortmund empató Özil tras un error gravísimo del arquero en el 89'.
El equipo no carbura como el año pasado que presionaba arriba y mordía al rival para recuperar el balón. Luego con un par de triangulaciones rápidas y verticales te destrozaba. Este Madrid no hace eso ya. Es marcar un gol y tirarse atrás a defender bien con la esperanza de cazar a alguna contra. El problema es que al replegarse para defender está cerca de su área y cuando roba el balón tiene que hacer muchos metros para llegar al arco rival.
La segunda parte es lo que ocurrió. El Real se limitó a defender. No es que sufriera demasiado y eso que Silva dio un recital de fútbol. El canario es justo lo que le falta al Real Madrid. Alguien que organice, distribuya y juegue bien al fútbol en el medio del campo. Aunque ya saben que Mourinho no lo quiso cuando llegó. Tampoco a Agüero.
Cosas del fútbol, el español y el argentino fueron los mejores del City y demostraron su enorme categoría. El aficionado merengue sigue sin explicarse como Mourinho obligó al club a pagar 30 millones por Coentrao cuando Silva costaba lo mismo. O sino Modric que valió casi 40, o Sahin 15. Vergonzoso. Igual con el Kun. Florentino Pérez soñaba con él y quiso ficharlo a toda cosa, pero al final no lo hizo porque a Mourinho dio orden de no hacerlo. Mucha gente de dentro del club se está arrepintiendo de no haberlo comprado.
En cualquier caso y pese a lo mal que estuvo el Real Madrid vio como el Kun les empató merced a un penal injusto de Arbeloa que además le costó la roja. El City después de ese tanto, excepto una nueva ocasión de Agüero, apenas inquietó cuando estaba obligado a ganar para soñar con pasar de ronda.
Este empate a uno deja al Real Madrid como segundo de grupo. Ya no tiene ninguna opción de ser primero por lo que en el cruce de octavos jugará la vuelta lejos del Santiago Bernabéu. Mourinho cuando ganó sus dos Champions siempre habla de que lo hizo habiendo quedado segundo de grupo. Efectivamente es así, aunque no recuerda que en otras dos veces también cayó en ese cruce de octavos habiendo sido segundo en la fase inicial.
Con la clasificación ya conseguida al Real Madrid no le queda otra cosa que pensar en otros objetivos y mejorar. A partir del 12 febrero empiezan los octavos de final y es en ese momento cuando el Real Madrid tendrá que llegar a tope si quiere avanzar en este torneo.
Quien sí quedó primero de grupo fue el Málaga tras empatar 2-2 contra el Zenit en San Petersburgo. Excelente el rendimiento de los de Pellegrino en esta fase.