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La Dolfina es el Barça del Polo

BUENOS AIRES -- Todos creen poder. Sin embargo, como la espada del Rey Arturo, sólo uno puede sacarla.

Todos creen tener el secreto para voltear a La Dolfina: anular a Mac Donough, maniatar a Cambiaso, ganarle con caballos, cerrar los partidos, y la lista sigue.

La realidad marca que algo muy raro debe pasar para que dentro de una cancha de polo algo altere a este equipo de La Dolfina, hasta aquí el único ciento por ciento dotado para hacerse dueño de esa espada, aquí llamada Abierto Argentino.

Pasó un nuevo fin de semana pleno de acción y La Dolfina brindó una nueva función, ahora anulando cualquier intención de Alegría.

El canadiense Mannix, volvió a tener una destacada tarea; mientras el ímpetu de Monteverde se iba apagando, junto con las ganas de los Merlos que chocaron contra una muralla.

Pilará ganó sin regalar casi nada, consecuencia del partido que no se quiere jugar.

Magual realizó una gran tarea ante un equipo que de tanto pensar en los puntos, casi se olvida del funcionamiento.

Mientras que por la Zona B, Ellerstina, en el mejor partido del año venció a La Natividad, que retomó la onda verde con la que comenzó la temporada y cerca estuvo del batacazo, que si se dio en la cancha No. 2.

Allí, Las Monjitas y La Aguada jugaron el partido de los cinco hermanos Novillo Astrada. El encuentro de las mejores defensas.

Tan aburrido fue el comienzo, como intenso y atrapante resultó el final, donde el "quinto elemento" de la familia Novillo; Alejandro, el menor de los hermanos, vivió su día de gloria para marcar el gol del triunfo en suplementario y porque no, anotar también a La Aguada-Las Monjitas como un posible finalista del Abierto Argentino.

La Dolfina mas allá de lo terrenal
Extraña paradoja la de Adolfo Cambiaso. Desde lo que expresa su juego del 2011 ha hoy su rendimiento se acerca más a lo humano, sin embargo así como sus números de a poco siguen creciendo, es el rendimiento de La Dolfina el que se vuelve avasallante y fuera de lo común.

Aquí es donde las palabras del 1 de Cañuelas toman tanto valor como sus goles para entender su presente, cuando señalo que estos serán sus compañeros por los próximos 4 ó 5 años, justamente los últimos de Cambiaso en la Triple Corona.

¿Qué encontró el dueño de los records?. Funcionamiento, organización y la posibilidad de delegar. Hoy La Dolfina es el Barcelona del polo. Nero, Mac Donogh, Stirling y Cambiaso, son los Puyol, Iniesta, Xavi y Messi. Unos en Cañuelas, otros en la ciudad Condal, pero lo que demuestran en cada función es que uno podrá estar apagado, distraído, fuera de sintonía; hasta que los demás lo devuelven a la realidad y a la necesidad del partido. Prenden los motores y con 20 ó 25 minutos de hambre de gloria, sus encuentros son cosa juzgada.

Lo que se pensaba ya antes del final del 2010 cuando se anunció la formación de este verdadero seleccionado, hoy es una realidad.

La final de Tortugas, perdida a manos de Ellerstina, hoy parece más una mancha, un lunar en medio de una temporada donde este conjunto de Cambiaso y compañía se asemeja en números y funcionamiento a La Espadaña de los años 80.

Aquel equipo de los hermanos Alfonso y Gonzalo Pieres, Ernesto Trotz y el mexicano Carlos Gracida, fue incuestionablemente una formación de 40 goles de hándicap, como hoy lo son los de La Dolfina.

¿Podrá Pilará, el próximo fin de semana con su táctica de anular a Mac Donogh, el cerebro Iniesta de esta formación?

¿Podrá Ellerstina superar el "grupo de la muerte", dejar a tras a los Novillo Astrada, La Aguada y Las Monjitas, y rencontrarse con su juego?

Esas son las dos preguntas que se hace hoy el amante del polo, mientras asiste cada fin de semana a una nueva exhibición de La Dolfina, hoy día el Barça del Polo.

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