BARCELONA -- El técnico mexicano del Espanyol, Javier Aguirre, ha asegurado después del entrenamiento en Granada que el partido del domingo será "una guerra" y que "no habrá sonrisas hasta el final", puesto que sus jugadores saben que se trata "de una oportunidad para dar un salto y competir contra un equipo que está en nuestra misma situación".
Aguirre ha asegurado que sus futbolistas "están comprometidos con la causa, quieren salir de esta mala racha lo antes posible y así me lo han transmitido".
De todas formas, el técnico del Espanyol ha negado que exista ansiedad: "¿Por qué? Faltan 25 partidos y estamos a tres puntos de salir del barro".
La confianza de Aguirre en su equipo es total. "Si estuviéramos a cinco puntos y faltaran tres jornadas no estaría con esta 'risota', pero hay mucha calidad en el equipo", ha apuntado.
De todas formas, el técnico ha dicho que no se conforma con nada, "sólo con que el bloque luche, pelea, corra e intente ganar, luego el marcador será el que sea".
El 'vasco' ha dirigido en Granada su tercera sesión como entrenador del Espanyol después de una semana "atípica". "El lunes estás en casa, el martes te llaman, el miércoles no sabes qué pasará, el jueves ya estás trabajando, a mi hijo le operan de cruzados y jugamos contra el Granada en horario raro", ha añadido.