MELBOURNE -- El número uno del tenis mundial, el serbio Novak Djokovic, criticó con dureza al exciclista estadounidense Lance Armstrong, que reconoció haberse dopado, y le calificó como "una vergüenza para el deporte". A días de la también polémica declaración de Christophe Rochus, además hablaron la rusa Maria Sharapova y el serbio Janko Tipsarevic, mientras que la estadounidense Venus Williams y el español Nicolás Almagro prefirieron omitir su opinión.
"Sería ridículo de su parte negar la evidencia ya que había miles de pruebas. Es una vergüenza para el deporte tener a un deportista como Armstrong. Ha engañado al deporte. Ha engañado a mucha gente en el mundo entero con su carrera, con su historia", dijo Djokovic tras su triunfo ante el checo Radek Stepanek en el Abierto de Australia.
Djokovic, quien dijo que a Armstrong "se le tienen que retirar todos los títulos y merece sufrir", resaltó que "he perdido confianza en el ciclismo igual que le ha pasado a mucha gente. Yo lo seguía antes. A todos los grandes campeones. Pero ha habido muchos escándalos ya".
El número uno del mundo, en contrapunto de lo dicho hace unos días por el belga Christophe Rochus, remarcó que "los tenistas son de los deportistas más limpios. No me importa pasar controles diez, veinte o treinta veces cada año. Son las reglas. Los controles ahora son más estrictos y severos. Y si es igual para todos los jugadores está bien".
Por su parte, la rusa Maria Sharapova, número dos del mundo, destacó al respecto que "es una historia realmente triste, porque se trata de deporte" y apostilló que "estoy feliz que nuestro deporte está tan limpio como puede ser porque estamos constantemente a prueba".
En tanto, la estadounidense Venus Williams trató de mantenerse alejada, dijo que no había visto la entrevista y que la mayoría de los jugadores, más o menos, están centrados en el torneo. "No puedo hablar de algo que no sé nada al respecto, así que voy a mantener mi boca cerrada. No soy un experto en esas cosas. Es todo lo que puedo decir", dijo en conferencia.
A su vez, Janko Tipsarevic trazó un paralelo en la forma en que se controla el dopaje en el tenis. "Una vez me siguieron a Kenia para hacer una prueba. No me estaba escondiendo, estaba haciendo mi pretemporada. Me despertaron por la mañana y hasta pensé que era alguien que nos quería robar", comentó.
El serbio, después, dio su punto de vista de la situación. "No está bien lo que hizo. Engañó al deporte y a muchas personas".
Por último, Nicolás Almagro tampoco quiso opinar al respecto por no haber visto la declaración. "No voy a decir nada, porque no tuve oportunidad de verlo. Quiero verlo antes de hablar. No sé lo que pasó", marcó.