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América hoy es el ejemplo de Chivas

MÉXICO -- Éste América tiene un aroma diferente. No sé si vaya a ser campeón, pero cada vez estoy más convencido que la llegada de la dupla de Ricardo Peláez y Miguel Herrera era el revulsivo que la club necesitaba, así como también la afición quería. El reflejo no sólo está en la cancha, ya también se puede ver en las tribunas con todo y promociones. Antes las había y la respuesta era el desinterés y el desprecio.

¿En verdad se necesita ser un genio para entender que la historia muestra que los entrenadores mexicanos son los que han triunfado en los últimos años? Las respuestas están a la mano no fuera de casa. Sé que Jorge Vergara esperaba una revolución de la mano de Johan Cruyff y John Van's Schip y la apuesta no estaba descabellada, pero me queda claro que desde la salida de José Lui Real de la dirección técnica del equipo, las Chivas hicieron todo lo contrario al América y van como los cangrejos.

¿Cuándo perdió Chivas la brújula? Desde la salida del Güero en el Apertura 2011. Desde octubre de ese año, los experimentos (Quirarte, Ambriz, Coyote –interino-, John Van'ts Schip) comenzaron a fallar y el equipo ha ido a pique, al punto que la afición se aleja cada vez más del equipo más popular de México. Hoy quizá no se vea reflejado en el Omnilife que estará lleno, pero sí en los últimos partidos en casa, donde las butacas del inmueble lucen su rojo colorido, en medio de la desolación y la tristeza. Hoy el estadio es un elefante blanco o más bien, rojiblanco.

Dicen que errar ese humanos, sin embargo, Jorge Vergara boicoteó su propio crecimiento y hoy paga factura a sus múltiples yerros, que se asemejan a los que tuvo su odiado rival azulcrema en su momento. La identidad es lo último que debe perderse. ¿Recuerdan aquella frase de Alfredo Tena en el sentido de que envidiaba el trabajo de Chivas? Hoy les firmo que sucede todo lo contrario.

No creo que ningún dueño de equipo desee o quiera perder. Sería una estupidez de mi parte señalarlo. Me queda claro que el orgullo de Vergara ha llevado a su barco a hundirse estrepitosamente, no así América que con trabajo, dedicación, ambición y el devolverle la grandeza a la institución va por buenos pasos. Las Semifinales en los dos últimos campeonatos, el invicto en la actual temporada, el juego que despliegan y el regreso de la gente a sus otroras gélidas tribunas del Azteca, así lo muestran.

América tiene un año que aceptó que el proyecto iba a tierra recapacitó y ahí están los resultados, parece que Jorge Vergara ya también lo hizo al regresar a Benjamín Galindo. Dio marcha atrás, pero el tiempo perdido quizá sea el mismo lapso que tendrá que recuperar para que los resultados y los seguidores crean en Chivas. Hoy, Guadalajara va dos pasos atrás del América. Una pena si se considera que en la carrera, el Rebaño llevaba la punta. Hoy va detrás sacando la lengua y esó sí arrastrando mucha verguenza. En México los directivos le quieren hacer al genio y descubrir el hilo negro. Pregúntenle a los aficionados del Pachuca que llenaron el Hidalgo. Llegó un símbolo como Gabriel Caballero y regresó la identidad al equipo.

Corregir es de sabios. Esperamos señor Vergara que en el futuro no haya más caprichos y deje que la gente trabaje. El futbol se inventó hace poco más de un siglo y no ha cambiado mucho ¿eh?, por favor, no quiera reeiventarlo.