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Se acaba el tiempo

Tony Romo será el segundo mariscal de campo con mayor edad entre los titulares de la NFC. Getty Images

IRVING -- Estos días, Tony Romo es uno de los tipos viejos, un jugador que está más cerca del final que del comienzo.

Ya no es el jovial y fresco novato no reclutado procedente de Eastern Illinois. Es un veterano de nueve temporadas, esposo y padre de familia. Y es la piedra angular de todo lo que sucede --bueno o malo-- con los Dallas Cowboys, dependiendo en si crees que Romo es parte de la solución o parte del problema.

Con 33 años de edad cuando transcurra la siguiente temporada, Romo será el segundo mariscal de campo titular más viejo de la NFC para una franquicia que ha sido el ejemplo de la mediocridad por casi dos décadas.

Romo tiene registro de 17-21 como titular desde el 2010 y los Cowboys han quedado fuera de los playoffs en cuatro de las últimas cinco temporadas, pero no existe duda alguna de que el mariscal de campo obtendrá una extensión contractual a largo plazo en la temporada baja. Puede culparse a la ridícula estrategia de los Cowboys a la hora de adquirir y desarrollar pasadores por eso.

Hablamos de una franquicia que ha reclutado apenas a tres pasadores desde que seleccionaran a Troy Aikman con la primera selección global en el 1989: Bill Musgrave en 1991, Quincy Carter en 2001 y Stephen McGee en 2009. Musgrave y McGee fueron tomados en la cuarta ronda, y Carter, escogido en la segunda, también debió haberse ido en la cuarta. Los Cowboys usaron una selección suplementaria de primera ronda en el 1990, en Steve Walsh.

Comparen eso a una franquicia como los Green Bay Packers, quienes han reclutado a 12 pasadores desde 1992.

Hay que entender que la única razón por la que una franquicia da a un mariscal de campo veterano con una victoria de playoffs una extensión de largo plazo por unos 14 millones de dólares anuales es porque cree que puede ganar un Super Bowl. Para hacerlo, Romo deberá desafiar las probabilidades.

Desde 1999, solamente un pasador mayor a los 31 años de edad ha ganado un Super Bowl (Brad Johnson, a los 34, con los Tampa Bay Buccaneers en el 2002). Joe Flacco, el JMV reinante del Super Bowl XLVII, tiene 28 años y viene de una de las mejores postemporadas en la historia de la NFL, con 11 pases de touchdown y cero intercepciones.

Como sabemos, Romo lleva apenas un triunfo de postemporada en siete campañas como titular. Ningún mariscal de campo con tanta longevidad como titular tiene menos triunfos de playoffs. Jerry Jones está depositando su fe en sí mismo y en la organización para construir el equipo alrededor de Romo sin que se requiera que el mariscal de campo sea el epicentro de la ofensiva. Romo está dejando atrás sus mejores años --hablando de sus cualidades atléticas-- y entra a la porción de su carrera donde la sagacidad es más importante que la potencia en el brazo, y la inteligencia queda por arriba del atleticismo.

El draft ha enriquecido a la NFC con varios mariscales de campo capaces de llevar a sus equipos a un título.

Robert Griffin III de los Washington Redskins, Colin Kaepernick de los San Francisco 49ers y Russell Wilson de los Seattle Seahawks tienen 25 años de edad, o menos. Matt Ryan de los Atlanta Falcons tiene 27 y Aaron Rodgers de los Green Bay Packers, quien ya tiene un Super Bowl en su haber, tiene apenas 29.

Eli Manning de los New York Giants tiene 32, y Drew Brees de los New Orleans Saints tiene 34. Entre ellos se han combinado para ganar tres campeonatos.

Hay una fuerte competencia, y ni siquiera hemos hablado de mariscales de campo como Cam Newton de los Carolina Panthers, Matthew Stafford de los Detroit Lions, Josh Freeman de los Tampa Bay Buccaneers y Sam Bradford de los St. Louis Rams. Ninguno supera los 25 años. Vaya, Hasta el pasador de los Chicago Bears, Jay Cutler, está en su mejor momento a los 29 años de edad.

Para que Romo lidere a los Cowboys hasta el Super Bowl, Jerry debe construir el equipo alrededor de Romo del mismo modo en que lo hicieron en su momento los Denver Broncos alrededor de John Elway.

Cuando los Broncos ganaron Super Bowls consecutivos en 1997 y 1998, estaban armados alrededor del corredor Terrell Davis, ala cerrada Shannon Sharpe y receptor abierto Rod Smith. Ellos hicieron el trabajo pesado.

En un puñado de situaciones por partido, los Broncos pidieron a Elway entregar una de sus jugadas mágicas, y lo consiguió. Al principio de su trayectoria, los Broncos pidieron a Elway hacer todo el trabajo pesado, y fue lo suficientemente dinámico para llevar a Denver hasta tres Super Bowls, razón por la cual está en el Salón de la Fama.

Nadie está comparando a Romo con Elway en términos de talento, solamente en cuanto a lo que los equipos exigen a cada jugador hacer.

Hace un par de años, Romo era fácilmente uno de los cuatro mejores mariscales de campo en la NFC.

No más. Y ahora ni siquiera hay debate.

¿Ahora comprenden --aparte de lo obvio-- por qué es tan difícil para Romo llevar a los Cowboys hasta un título?