Enrique Rojas 11y

Un pelotero de película

Nota del editor: Esta historia está disponible también en inglés.

CLEARWATER, Florida -- El prospecto dominicano de los Mellizos de Minnesota, Miguel Sanó, es un pelotero de película, y no solo en el sentido figurado de la frase.

Sanó, quien cumplirá 20 años en dos semanas, no se deja amedrentar por las cámaras que lo rodean, mientras se abre paso a batazos limpios en el sistema de desarrollo de los Mellizos, rumbo a las Grandes Ligas, donde podría aterrizar en cualquier momento, más probablemente en el 2014, aunque el propio pelotero no descarta que sea este mismo verano.

Pese a ser el jugador más joven de su liga, el torpedero convertido en antesalista coquetea con una triple corona de bateo, al tiempo que sonríe para las cámaras. Las mismas que lo han seguido a todos lados desde que era un niño de 15 años creciendo libremente en los campos de juego de San Pedro de Macorís, en el este de República Dominicana.

"Eso no me afecta", dijo Sanó a ESPNdeportes.com antes de un partido en Clearwater esta semana. "Creo que me ayuda porque en Grandes Ligas estaré rodeado de cámaras ¿no? Pienso que me ayuda acostumbrarme desde ahora", agregó.

La travesía de Sanó por las ligas menores está siendo grabada desde hace dos años por la productora "Guagua Film" para una película documental que se llamará "La Historia de Miguel Sanó", que concluirá cuando el jugador debute con los Mellizos.

"La Historia de Miguel Sanó" comenzará exactamente donde terminó "El Pelotero", el controversial documental estrenado el año pasado que además de registrar el polémico proceso de la firma de Sanó al profesionalismo, denunció prácticas de corrupción de las organizaciones de Grandes Ligas en el reclutamiento de los prospectos dominicanos.

"El Pelotero", producido por Bobby Valentine, quien para entonces era manager de los Medias Rojas de Boston, causó malestar en la oficina del comisionado de las ligas mayores y llamó la atención de mucha gente.

"Me siento contento", dijo Sanó, el prospecto #11 de ESPN para este verano. "Tener una película es algo que te hace sentir bien, la segunda será mejor que la primera. Eso no me afecta [para jugar], mantengo mi mente liberada, enfocado en lo importante", agregó.

Ser el centro de la atención pública parece no afectar el juego de Sanó, quien recibió un bono de $3,15 millones de dólares para firmar con Minnesota en el 2009, después de una larga investigación, que incluyó exámenes de huesos y otras pruebas, para determinar si en realidad tenía 16 años como dicen sus documentos y alegaban sus tutores.

En sus primeros cuatro años en el profesionalismo batea .287 con 64 jonrones y 282 carreras impulsadas. Tras pegar 28 jonrones y empujar 100 carreras en 129 juegos en la Liga del Medioste (Clase A media) en el 2012, Sanó batea .366 y lidera la Liga Estatal de la Florida (Clase A fuerte) con nueve jonrones y 24 carreras impulsadas en 24 choques con Fort Myers Miracle.

Exactamente la mitad de sus 34 hits -- también ha pegado siete dobles y un triple -- son extrabases. Con apenas 280 partidos de experiencia profesional, Sanó ya está pensando en el próximo nivel y no descarta jugar en el Target Field este mismo año.

"El equipo dice que podría subir [a Doble A] el próximo mes, pero no me dejo llevar por eso. Todos los días trato de jugar más duro y cuando esté allí trataré de hacer lo mismo, jugar duro cada partido, cada día, cada entrada", dijo sobre una posible promoción.

"Espero estar en Grandes Ligas al final de este año, estoy trabajando para eso. Si no es este año, será al principio de la próximo. Creo que merezco la oportunidad, tengo las herramientas y el potencial", dijo Sanó con pasmosa confianza.

"Miguel luce muy cómodo haciendo lo que está haciendo. Más maduro y cada día más cerca del nivel de estar listo para las Grandes Ligas", dijo Doug Mientkiewicz, manager de Fort Myers. "Estamos hablando de un chico muy joven, pero que tiene tiene mucho orgullo y no se conforma con hacer las cosas a medias", agregó el dirigente.

Antes de pensar en Grandes Ligas, Sanó necesita quemar otras etapas y mejorar algunas áreas. Completar la transición a la tercera base y mejorar el conocimiento de la zona de strike, son algunos de esos aspectos, aunque no los que más preocupan al pelotero.

"He mejorado. Después de jugar en el campocorto toda mi vida, fue difícil aconstumbrarme a la tercera base al principio porque tenía muchos movimientos en las piernas. Trabajé duro en la pelota invernal y luego con Paul Molitor en los entrenamientos para acostumbrarme", dijo.

"No me preocupa hacer swing", dijo Sanó, quien se ponchó 144 veces en el 2012 y promedia más de un ponche por juego en su carrera. "Es cuestión de ajustes. El año pasado tomé 80 bases por bolas y este año llevo bastante. Creo que puedo convertirme en un pelotero de 100 bases por bolas", dijo tranquilamente.

"Lo que más quiero mejorar es el inglés. Me he enfocado 100% en eso y me gustaría hablar mejor inglés para cuando llegue a AA", apuntó el prospecto, que también trabaja en mantenerse en los alrededores de las 230 libras. "Llegué a los entrenamientos con 238, pero ya estoy en 229, que es mi peso ideal", dijo.

Subir a la Doble A es la meta más inmediata de Sanó. Mientras el jugador piensa que eso podría ocurrir muy pronto, sus entrenadores prefieren esperar que sea su desarrollo que dicte el próximo paso.

"Las organizaciones tienen un plan general que incluye a un pelotero, pero también al grupo que estará a su lado. Sanó podría agotar 200 turnos en Clase A y entonces otros 200 en Doble A antes de estar listo para el próximo nivel", dijo Iván Arteaga, coach de pitcheo de Fort Myers y gerente general de Margarita en la liga invernal de Venezuela.

"Ya en la Doble A, estará muy cerca de las Grandes Ligas", dijo Arteaga.

"No es mi decisión, pero creo que ya está listo para jugar en AA", dijo Mientkiewicz. "Hay que entender que Minnesota no quiere que Sanó suba de nivel para luego bajar. Cuando lo llamen a Grandes Ligas, por ejemplo, será para que se quede por mucho tiempo", agregó Mientkiewicz.

Mientras llega la llamada para informarle sobre su futura asignación, Sanó disfruta al máximo sus principales placeres: Batear una bola de béisbol y posar para las cámaras.

"Me gusta que me graben, pero no pierdo el enfoque", dijo Sanó. "No lo perdí cuando me firmaron y me dieron lo que para un pobre es mucho dinero. Soy una persona humide, de una familia humilde que ha recibido muchos consejos de mucha gente, incluyendo peloteros de Grandes Ligas", dijo Sanó, quien destacó el rol de mentor que ha jugado en su formación su compueblano Robinson Canó, la gran estrella de los Yankees de Nueva York.

"Canó me ha enseñado como enfrentar estas cosas como el tener dinero... las mujeres y esas cosas", dijo Sanó, un protagonista de películas de la vida real.

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