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Sin lugar para milagros

BUENOS AIRES -- Tal como había comentado la semana pasada, la final alemana era prácticamente inevitable. Borussia Dortmund y Bayern Munich dejaron a Real Madrid y Barcelona, respectivamente, al borde del nocaut en Alemania y lo terminaron de confirmar en España.

Al margen de lo imprevisible que puede resultar el fútbol, estamos convencidos de que llegaron los dos mejores equipos a la definición del sábado 25 de mayo, en Wembley.

REAL MADRID 2-0 BORUSSIA DORTMUND (GLOBAL: 3-4)
El conjunto merengue llegó a la revancha ante Dortmund con más chances de clasificarse que su clásico rival. Su objetivo era marcar rápido para acrecentar la esperanza de remontada.

Lo cierto es que, al no haber cambiado por gol sus primeras dos chances, Borussia Dortmund se asentó en el Bernabéu y le jugó de igual a igual. Sin embargo, su falta de rigurosidad defensiva, a diferencia del Bayern, y su ambición ofensiva lograron que Real Madrid se ilusione hasta último momento.

Un factor insoslayable fue la "ausencia" de Ronaldo. Si bien disputó los 90 minutos, Cristiano no tuvo incidencias en el juego. Algo atípico en el portugués, que tal vez tuvo lagunas con su selección, pero rara vez en su equipo. Justo cuando Real Madrid más lo necesitaba, el segundo mejor jugador del mundo no dijo presente. Y así se hipotecaron grandes chances de clasificar.

Ojo que Dortmund también tuvo una baja de peso: Mario Götze. La salida por lesión a los 14 minutos del futbolista de 20 años (vendido en 38 millones de euros al Bayern), le quitó poderío ofensivo y manejo del balón en el medio al equipo de Klopp. ¿Qué hubiera pasado si CR7 y Götze estaban en su nivel? Seguramente, todavía un mejor partido del que fue.

En el complemento, Dortmund pudo haber definido la serie en cuatro contras, pero Lewandowski, no tuvo ni el 10 por ciento de pizca de suerte de la semana anterior. Así, el equipo blanco logró sobrevivir y, jugado el todo por el todo, marcó dos goles en cinco minutos para poder respirar, en los últimos 10, un aire que no había tenido hasta el momento.

Quiero destacar un gol con buenos gestos técnicos. Su autor controló con pie izquierdo (siendo derecho), le quedó la pelota corta y la metió arriba. Recursos de un gran atacante llevados a cabo por Sergio Ramos, tal vez el mejor defensor del mundo.

El tiempo llegó a su fin y para ser honestos, se clasificó el mejor. Un Dortmund que ya había mostrado superioridad en los cruces de la fase de grupos y que lo reafirmó en los 180 minutos de semifinales.

Respecto al futuro de Real Madrid, me extraña que Gonzalo Higuaín haya sido silbado al salir de la cancha. Desde su llegada a fines de 2006, pagó largamente el dinero que invirtieron en él, marcando goles en todas las competencias. No puedo creer que el maltrato se deba al rumor instalado de un posible pase al Barcelona. Es injusto que tenga que pasar por esta situación. Me siento defraudado con el público de Real Madrid.

En cuanto a Mourinho, el propio entrenador expresó en conferencia de prensa que no tiene resuelto su futuro. Si hay alguien que tiene el privilegio de elegir dónde quiere trabajar y vivir es justamente Mourinho. Es un técnico ganador que asume en equipos con posibilidades económicas, que lo acercan más al éxito que al fracaso. Con una buena billetera, teniendo a Kaká, se puede comprar a Özil. Y teniendo a Özil, se puede comprar a Modric. Vaya donde vaya tiene que saber que las críticas van a estar siempre.

BARCELONA 0-3 BAYERN MUNICH (GLOBAL: 0-7)
Así como Ronaldo estuvo "ausente" dentro de la cancha en Real Madrid, Lionel Messi no participó en Barcelona y se quedó los 90 minutos de la revancha en el banco de suplentes.

Vamos a ser sinceros: Messi no está bien desde Paris. Todos somos humanos y los cuerpos, en un determinado momento, nos pasa factura. Jugó siempre en Barcelona y para su Selección. En la última doble fecha de Eliminatorias, estuvo contra Venezuela y disputó todo el partido contra Bolivia en La Paz.

Cuando hago un jugo, en un momento no puedo exprimir más la naranja. Esto es exactamente lo mismo. A Messi se lo exprimió demasiado. Tiene la suerte de jugar en Europa, en un gran equipo, donde da placer verlo jugar. Está claro que en Sudamérica no sería tan protegido. La sumatoria de viajes y minutos hacen que tarde o temprano se tenga que quedar afuera. Afortunadamente para él, le ocurrió al final de la temporada.

Este aviso tiene que hacerle ver que debe regular un poco. En el momento más importante del equipo, no estuvo al 100 por ciento. Y por más que sea el mejor de todos los tiempos, hoy en día cuesta mucho dar ventajas físicas.

Como técnico, uno puede querer arriesgar al jugador en una final. Pero cuando todavía queda lo más importante por jugar, es más complicado. ¿Qué pasaba si Messi no jugaba la revancha contra PSG? Quizás hubiera llegado totalmente recuperado para la semi. Afortunadamente para la selección argentina, esta lesión llegó un año antes del Mundial. En síntesis: hay que ser inteligente para darle descanso a un futbolista que, a punto físicamente, corre con "el caballo del comisario".

Este asunto no sirve como atenuante. Hoy por hoy, Bayern Munich es el mejor equipo del mundo. A lo sumo con Messi, Barcelona podría haber ganado la vuelta en Camp Nou, pero de ninguna manera dar vuelta la eliminatoria.

El conjunto de Heynckes es el único capaz de disputarle la posesión al Barcelona. Le gusta tener la pelota, cuenta con jugadores capacitados para lograrlo, un mediocampo equilibrado con Javi Martínez y Schweinsteiger, futbolistas desequilibrantes por afuera como Robben y Ribery, un Kroos lesionado pero fútbol y llegada con Müller, y goleadores que no perdonan.

En los de Vilanova quedó evidenciado que la fuerza defensiva no es el primer atributo. Y en ofensiva, nunca encontró espacios ante una defensa muy bien parada. Está claro que las ausencias repercuten: Adriano no es Jordi Alba, faltaron Busquets, Puyol, Mascherano y el propio Messi. Se enfrentaron un equipo completo y otro cansado, producto de una temporada larga, con siete jugadores en España, selección que tuvo que buscar su clasificación en Francia. Son pequeños detalles a tener en cuenta. Los jugadores cuanto más se usan, más se gastan.

Igualmente, como dije anteriormente, el resultado es elocuente. Un global de 7-0 lo suficientemente categórico para no agregar más nada. Los propios Xavi y Villa, campeones europeos y del mundo, reconocieron la superioridad del rival.

Ya tendremos tiempo para analizar lo que veremos en la gran definición. Mientras tanto, la performance de Bayern Munich, campeón de Bundesliga, finalista de la Copa alemana y en tres de las últimas cuatro ediciones de Champions, me deja una pregunta: ¿podrá Pep Guardiola hacerlo jugar mejor y llegar a las instancias definitivas?

Felicidades.