MÉXICO -- El "Boletos agotados" en las taquillas del estadio Azul no impidió que más de un centenar de aficionados se dieran cita en el inmueble que albergará la ida de la final entre Cruz Azul y América esta jueves, en busca de un boleto.
La esperanza era tanta que seguidores de la Máquina formaron una larga fila desde las 10 horas, optimistas de que la realidad daría un giro de 180 grados y regresarían a casa con el boleto en la mano.
Sin embargo, las taquillas se mantuvieron cerradas, por lo que poco a poco la gente se fue retirando del lugar, resignada a ver el partido de la liguilla Clausura 2013 por televisión o adquiriendo un boleto en la reventa, la cual siempre está presente. Después de las tres de la tarde ya no había personas añorando un boleto, sólo curiosos que se detenían.
De acuerdo a comentarios que hacía la gente entre sí, los revendedores tasaron el boleto más caro en 2,000 y 1,500 pesos, cifra que espantó a los ahí presentes.
Está garantizado el lleno en el Azul, así como un amplio dispositivo de seguridad por parte de las autoridades capitalinas. Se presume que para este jueves habrán entre 2,000 y 2,500 de policías resguardando el orden en los alrededores.