|
PARÍS -- Gran manera de aprovechar la invitación. El convenio entre los países sedes de torneos del Grand Slam tiene sus beneficios. Esta vez Nick Kyrgios aprovechó al máximo su wild card. El australiano de apenas 18 años venció a Radek Stepanek por 7-6 (4), 7-6 (8) y 7-6 (11). Ganó dos puntos menos que el europeo, pero absorbió la presión de los minutos claves para alzarse con la victoria. Su rival no era un detalle. El aplomado checo de 34 años sabe de batallas, experiencias coperas, títulos ATP y presencia en el top 10. Pero no se amilanó. A Kyrgios no le importó estar ubicado en el 262º lugar en el ranking y con nula experiencia en torneos grandes, más allá de alguna invitación en su país. Es más, habituado a los Futures, solamente jugó dos Challengers: en uno fue semifinalista y en el otro fue el campeón, nada menos. Es que, claro, lo suyo es aun la categoría juvenil donde lidera el ranking Sub 18 gracias a haberse quedado con el abierto de su país en enero al vencer en la final a Thanasi Kokkinakis, otra promesa australiana. Nacido en Camberra, llevará la bandera de la esperanza australiana y el peso de la renovación por un largo tiempo. Hoy no lo afecta...
|
