CINCINNATI -- Cada año, al entrenador en jefe de los Cincinnati Bengals, Marvin Lewis, se le ocurre una frase para poner en las palabras de sus jugadores. No ha encontrado la adecuada para esta temporada, y quiere que refleje la actitud del equipo.
"Ya lo tengo", declaró Lewis. "Es sólo que no puedo encontrar la manera de hacerlo atractivo".
Mi sugerencia, después de pasar un tiempo en el vestuario durante el primer día del minicampamento obligatorio, es simple, "Es momento". Puede no ser tan memorable o llamativo como le gustaría a Lewis, pero personifica el sentimiento de un equipo joven, talentoso y hambriento que quiere más.
En el 2011, Cincinnati pasó de iniciar la temporada como el equipo N° 32 en el Power Ranking de ESPN.com a ganarse un lugar en los playoffs. La temporada pasada, los Bengals demostraron que podían manejar el éxito, llegando a los playoffs en temporadas consecutivas por primera vez desde 1981-1982.
El siguiente muro que debe caer para esta franquicia no es sólo calificar a los playoffs, sino avanzar, algo que no ha logrado en 22 temporadas, la sequía activa de victorias de postemporada más larga en la liga.
La última vez que los Bengals ganaron en los playoffs fue un partido de la Ronda de Comodines, el 6 de enero de 1991. ¿Hace cuánto fue eso? "Home Alone" era la mejor película en taquilla, Lewis era entrenador de apoyadores en la Universidad de Pittsburgh y A.J. Green tenía dos años de edad.
Lo que hace creer que los Bengals están listos para dar el siguiente paso es su mentalidad. Pueden criticar la fuerza de brazo de Andy Dalton o su falta de un receptor abierto establecido distinto a Green. Pueden criticar a los Bengals por no utilizar sus más de 20 millones de dólares de espacio bajo el tope salarial y no hacer una contratación importante en la agencia libre además de la firma del apoyador, James Harrison.
Lo que no se puede cuestionar es el enfoque de este equipo, el cual fue evidente en un día de junio, para hacer algo de ruido en enero. La mayor adquisición de la temporada baja no fue Harrison o el recluta de primera ronda del draft, Tyler Eifert. Es un gran sentido de urgencia.
Tan sólo pregúntenle a Dalton si esta es una temporada importante para él y lo entenderán.
"Creo que es importante para este equipo", señaló Dalton. "Lo que hemos hecho desde que llegué aquí, hemos tenido dos apariciones en los playoffs y no hemos jugado bien una vez que llegamos ahí. Creo que es importante para nosotros demostrar que vamos a volver a los playoffs y no sólo calificar, sino que ganaremos un partido de postemporada y llegaremos lejos. Eso es lo que espera este equipo. Con todos los [jugadores] que tenemos aquí, trajimos devuelta a todos los miembros del equipo del año pasado, básicamente, y creo que es la actitud que estamos teniendo este año".
Los Bengals sin duda tienen el talento para igualar esa actitud. Tienen a los mejores jugadores a la ofensiva y defensiva en la AFC Norte con Green y el tackle defensivo, Geno Atkins. Serán un equipo más explosivo a la ofensiva. Serán más dominantes presionando al pasador, lo que ya era una fortaleza del equipo.
A diferencia de los Ravens, que se desprendieron de nueve titulares del equipo campeón del Super Bowl, los Bengals adoptaron la filosofía opuesta y retuvieron a la mayor parte de los suyos. Los únicos dos titulares que no fueron recontratados son el apoyador externo, Manny Lawson, y el profundo, Chris Crocker.
Eso demuestra que los Bengals creen que tienen los jugadores adecuados para ganar. Sólo deben tener a esos jugadores para ejecutar mejor.
Lewis quiere que sus jugadores recuerden el dolor de la derrota de playoffs, 19-13, ante los Houston Texans hace cinco meses, así como las veces que pudieron haber cambiado su destino. Ha hablado con ellos acerca de hacer la jugada cuando es segundo intento y estás desmarcado. Señaló que no puedes volar el balón en tercera oportunidad y cuatro yardas por avanzar.
La mayor oportunidad perdida de ese partido de postemporada se produjo con tres minutos por jugar en el partido y los Bengals enfrentando una tercera oportunidad y 11 yardas por avanzar, mientras caían por seis puntos (19-13). Green realizó un doble movimiento para ponerse detrás del defensivo de los Texans y Dalton lanzó el balón por encima de él.
A Lewis se le preguntó si era justo decir que un mariscal de campo de élite habría completado ese pase con Green.
"Vamos a decir que, para nuestro pasador, queremos realizar uno de esos pases y completarlo", expresó Lewis. "Tuvimos un par de oportunidades para hacer jugadas grandes en ese partido, y las desperdiciamos. Esas son las cosas que un buen jugador realiza. Un gran jugador va a hacer esas cosas. Así es como uno se gana ese estatus. Si no, nunca serás visto como tal. Tienes que ganar los partidos grandes --los cuales ha ganado-- pero debes ganar partidos de postemporada y después, obviamente, ganar un Super Bowl para ser visto como un mariscal de campo de élite en la NFL".
Como he escrito en varias ocasiones, Dalton es la clave para que los Bengals emprendan una carrera en los playoffs. Hicieron todo lo que pudieron en el draft para ayudar al titular de tercer año, invirtiendo sus primeras dos selecciones en jugadores talentosos, el ala cerrada, Eifert, y el corredor, Giovani Bernard. Cincinnati también recontrató al tackle derecho, Andre Smith, para mantener intacta la línea ofensiva de Dalton.
El otro movimiento importante de la temporada baja fue firmar a Harrison, el Jugador Defensivo del Año del 2008 que estuvo las últimas nueve temporadas con los Pittsburgh Steelers. Harrison aporta experiencia de campeonato así como una necesaria disposición para un joven e impresionante equipo de Cincinnati.
Cuando se le preguntó si sentía que los Bengals están en la fila para tener una temporada especial, Harrison respondió, "No he estado aquí lo suficiente para decir lo que siento. No he participado en ningún partido con estos muchachos todavía. He tenido ocasiones en las que pensé que estaríamos en problemas este año, y lo convertimos en algo genial. Así que no puedes dejar de entrenar".
Harrison está en lo correcto. Las conversaciones de temporada baja a menudo han demostrado no tener sentido. La temporada pasada, en un comunicado de prensa acerca del campamento de entrenamiento, la ejecutiva de los Bengals, Katie Blackburn, fue citada llamando a esa temporada de Super Bowl. Lewis entregó playeras que decían DNO, lo que quería decir, 'Destino: New Orleans', que fue sede del Super Bowl.
Si los Bengals quieren alcanzar el mismo nivel que los Ravens, New England Patriots, Denver Broncos y Houston Texans, es momento para que este equipo lo demuestre en el campo.
"Somos un equipo con hambre. Aún somos jóvenes y todavía lo queremos", sentenció Atkins. "Sabemos que es momento, y el coach Lewis ha destacado que cada año va a ser diferente así que tenemos que aprovecharlo. Creo que este año tiene razón".