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Mikey tratará de recuperar el cinturón

DALLAS -- Mikey García dijo que enfrentó y derrotó a Juan Manuel López con más motivación que la habitual en sus 30 peleas profesionales anteriores.

El púgil méxico-americano quería vencer y convencer al mundo de que su problema en la báscula el día anterior nada tuvo que ver con falta de preparación o irresponsabilidad.

Aseguró que simplemente su cuerpo se resistió a bajar más libras y que evitó poner en riesgo su carrera y más aún, su vida.

Noqueó en el cuarto asalto a López con un potente zurdazo al hígado, luego de que un par de rounds antes ya lo había derribado por primera vez con un espectacular recto de derecha.

García ya había perdido su campeonato un día antes al pasarse dos libras en la ceremonia de pesaje.

"La decepción fue grande, para mí y para muchas personas por lo que pasó en el pesaje", reconoció García (31-0, 27 KO's). "Lloré de coraje porque sabía que perdería mi campeonato fuera del ring".

"Pero todos se dieron cuenta de que llegué en gran forma y soy un buen boxeador", agregó. "Esta fue una victoria muy satisfactoria".

A pesar del problema en la báscula, López ni siquiera está seguro que fue su último combate en la categoría Pluma.

Dijo que está dolido tras perder su título de la Organización Mundial de Boxeo en la báscula y que le gustaría tratar de recuperarlo.

"Hice más de lo posible para dar el peso y no se logró", dijo. "Quizá en otra ocasión sí lo pueda dar y me gustaría poder volver a conquistar este campeonato".

"Pero también me interesa mucho una pelea en las 130", agregó, "y si me conviene tal vez ahí me quedo".

Su padre y entrenador, Eduardo García, y el presidente de la promotora Top Rank, Bob Arum, dijeron que Mikey tiene que ir a la categoría Superpluma para evitar sacrificar más su cuerpo y poner en riesto su integridad física.

Arum dijo que cuanto antes intentará organizar una pelea de García contra el campeón Superpluma de la OMB, Rocky Martínez.

"Tiene que pelear en 130 libras", dijo Arum. "Ya no puede sacrificar más su cuerpo para dar las 126. "Espero enfrente a Martínez. Tiene un futuro brillante".

López (33-3, 3 KO's) comenzó la pelea del sábado tratando de presionar desde el principio, aunque sus golpes fueron poco certeros y sin conectar en realidad al físico de García, quien usó su izquierda para medir distancia.

"Esa era mi estrategia, atacar todo el tiempo", explicó López. "Pero no pude lastimarlo nunca".

García puso orden de inmediato en el segundo capítulo con un recto de derecha directo al rostro de López, quien se fue a la lona para recibir la cuenta de protección; se levantó y de nuevo intentó hacia el frente.

Sin embargo, ahí García dijo que sabía que tenía todo para noquear al puertorriqueño.

"Cuando lo golpeé miré que lo podía lastimar, pero aún no estaba listo para caer", consideró García. "Lo mire que todavía tenía ganas, que tenía toda su fuerza. Estaba peleando".

"No quise atacar para tratar de noquearlo porque podía arriesgarme a un golpe de él".

López cayó en el cuarto round con un gancho al hígado y ya no pudo levantarse.

"Se paró muy lastimado", dijo García. "Si lo dejaban continuar, iba a tratar de pararlo otra vez".

Reconoció que su rival aún tiene una pegada fuerte, que sintió un recto en la cara, cuando se dio cuenta de que había que tener cuidado con su izquierda.

"Sacamos la victoria, salió todo a mi manera y gracias a Dios no hubo complicaciones en la pelea", señaló García. "No salí golpeado, fue una buena victoria para mí".