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Diario de las Finales NBA: 18 de junio

LA FOTO: Caras de preocupación

EL ANÁLISIS: Tiempo de definición

Por Bruno Altieri, enviado especial

MIAMI -- De regreso en el American Airlines Arena, el clima pasó de algarabía a tensión. El calor y la humedad siguen vigentes, pero en la calle todo se vive con hermetismo: el Miami Heat debe ganarle a los San Antonio Spurs los dos juegos restantes en su casa para quedarse con el bicampeonato.

Como si esto fuera poco, para lograrlo deberá romper uno de los mandamientos de esta serie: ni Miami ni San Antonio han ganado juegos consecutivos en lo que va de Finales.

En el otro lado del ring, esperan los Spurs. Luego de ganar el Juego 5 en el AT&T Center, le trasladaron la presión de estar contra las cuerdas a su rival. Desde un punto de vista psicológico, Gregg Popovich y los suyos saben que esta tiene que ser LA noche, sobre todo teniendo en cuenta lo que puede significar un potencial séptimo partido fuera de casa con la carga previa de haber perdido el anterior.

La localía no ha sido factor en esta serie -ambos equipos quebraron una vez- y no debería ser factor trascendental ahora. Es importante, claro, pero no será lo que marque la diferencia. La serie está escrita desde el segundo juego, lo que ha cambiado en grande es la ejecución.

Vivimos unas Finales con ritmo de montaña rusa. Subidas y bajadas drásticas, sin transiciones ni llanuras. Diferencias abismales en los marcadores entre dos equipos que juegan, cada uno a su manera, un básquetbol brillante.

En los primeros tres juegos de la serie, marcaron la diferencia los hombres de rol. Luego llegaron las estrellas, primero el Big Three de Miami y luego el de San Antonio. Hemos visto absolutamente todo en esta definición del campeonato, pero aún quedan dudas de cara al Juego 6.

¿Cuáles serán los ajustes de Erik Spoelstra de cara al trascendental partido de esta noche? En la NBA no se acostumbra a cambiar drásticamente, sobre todo cuando el manual ya fue enviado a impresión previamente. En este caso, Miami no debería modificar su línea de ruta para esta noche.

A mi entender, continuará con la política de cuatro perimetrales y un interno, con LeBron de falso cuatro, con una salvedad: activará a Chris Andersen, el jugador olvidado de las últimas dos presentaciones.

Andersen como cinco natural puede darle mucho a Miami, por su carga al rebote y su actitud para ganar terreno en la pintura. Se mueve con soltura y es un jugador muy inteligente, algo que contradice, a todas luces, su corte de pelo estrambótico.

La razón de su aleteo en el banco de suplentes tuvo nombre y apellido: Chris Bosh. Si el ala-pivote del Heat, transformado en centro, está en una buena noche -y se somete al roce que tanto odia- Andersen no tiene lugar en esta estructura de 4-1.

TRES PUNTOS FUNDAMENTALES
Hay tres puntos fundamentales de esta eliminatoria que alimentan la radiografía previa de este Juego 6. El primero tiene que ver con la defensa de Miami y las pérdidas de balón de San Antonio. Si los Spurs ceden las posesiones fácilmente -o toman tiros poco cómodos- el conjunto del Heat puede correr. A cancha abierta, LeBron James y compañía son un grupo de toros enfrentando muros de papel. El juego se termina cuando esto se hace frecuente.

La segunda cuestión a considerar son los puntos anotados en la pintura. Los Spurs han ganado cuando pudieron controlar los ataques sistemáticos de afuera hacia adentro del Heat. Si James está solo en la búsqueda del aro, entonces el trabajo para Kawhi Leonard -y el resto de los hombres de San Antonio, incluyendo al inquilino Boris Diaw- se hace más sencillo. Si jugadores como Mario Chalmers, Dwyane Wade o Norris Cole se convierten en una segunda vía de anotación con penetraciones hacia el aro, la defensa de los Spurs tiene que moverse más y eso se traduce en problemas. Es mucho más difícil tapar varios agujeros que uno solo ante una filtración.

El tercer punto a considerar es el boxout, algo de lo que se habló poco en esta eliminatoria. El Heat es un equipo especialista en la carga del rebote ofensivo, y cuando San Antonio juega con grandes, muchas veces se confía en este apartado. Tiago Splitter es el ejemplo más cercano. Los centímetros ante atletas como Wade o James no garantizan absolutamente nada. En este punto, la concentración y la reacción juegan un rol determinante, en ambos equipos.

Los Spurs deben abastecer a Tim Duncan para que el juego vaya de adentro hacia afuera. Con una alineación de cuatro pequeños, el plan que tendrá Spoelstra será presionar sobre los tiradores para que todo pase alrededor de Timmy D. Si esto sucede, Duncan tiene que hacer pagar a la defensa de Miami merced al emparejamiento desfavorable. Lo mismo con Tiago cuando vea minutos de acción. Si esto sucede, deberán ajustar abajo y entonces sí llegará el balón a los tiradores con la rotación que tanto ha caracterizado a los Spurs en esta serie.

El ritmo juega un factor determinante. El que impone la velocidad impone las diferencias en estas Finales. En este sentido, Tony Parker es fundamental. Muchas veces se lo analiza sólo por las acciones de pick and roll -que las hace con maestría, claro- pero su huella en el juego es mucho mayor. En el Juego 4, ni Cole ni Chalmers pudieron hacer pie para controlarlo y eso obligó al coach de Miami a moverse, por gran parte del juego, sin un armador definido.

Históricamente, LeBron ha respondido en un juego de eliminación. Promedia, según ESPN Stats & Info, 31.5 puntos por aparición en esta clase de partidos. En estos momentos, sus 21.6 puntos (43.6% en TC) están muy por debajo de lo que ha promediado en postemporada, y eso es virtud de la defensa de Leonard y las rotaciones de los restantes jugadores de Spurs.

"El Juego 6 deberá ser una historia diferente. Debemos leer el partido mejor. Estamos deseando jugar en casa", dijo Spoelstra en conferencia de prensa luego del quinto partido.

Un último dato: los equipos que han estado 3-2 arriba en Finales NBA, han ganado la serie en el 83,3% de las veces (35-7, con un 14-3 desde que se instauró el formato 2-3-2 en 1985.

¿Tendremos campeón este martes? En pocas horas, conoceremos la respuesta.