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Canelo y Chávez, un año después

Canelo se enfrentará al mejor libra por libra mientras que Chávez Jr. busca recuperar credibilidad Getty Images

MÉXICO -- Lo que es la vida, las buenas decisiones, las malas, los errores y los aciertos. Hace un año, a uno se le criticaba por no tener un rival que lo dignificara como un verdadero Campeón del Mundo y al otro se le aplaudía, al fin, haber tomado la prueba de fuego que, se supone, lo elevaría del nivel de Campeón a ídolo.

Pero, una vez más, lo que es la vida. Siete meses después, al que se le criticaba encontró un rival que le dio el crédito que buscaba y, aún mejor, el pasaporte a la pelea de su vida, una pelea que paralizará seguramente México, ante el mejor peleador del mundo.

El otro, entró en un marasmo que parecía no tener final. Tras perder por primera vez, fue encontrado culpable de haber usado una sustancia prohibida, castigado nueve meses y multado, al menos al inicio, con 900 mil dólares de una bolsa de 3.5 millones.
La vida, o mejor dicho, el boxeo, los puso en la situación del otro en 12 meses.

Hace un año Saúl 'Canelo' Álvarez batallaba por encontrar rival luego de la lesión de James Kirkland y la derrota, inesperada, de Víctor Ortiz, que le abrió la puerta a Josesito López, un engreído Superligero que, de la noche a la mañana, era el retador del tapatío. La pelea se programó para el 15 de septiembre en el MGM Grand de Las Vegas.

También hace un año, se anunciaba que Julio César Chávez y Sergio 'Maravilla' Martínez darían conferencias de su duelo por Estados Unidos y México en el mes de julio, para sacar al único Campeón Mediano del Consejo Mundial de Boxeo. Sería la pelea que pondría a Chávez Jr. en el nivel que su apellido requería y también se realizaría el 15 de septiembre en Las Vegas, sólo que a un par de kilómetros del MGM, en el Thomas & Mack Center.
La historia ya la conocen. Canelo noqueó a Josesito y Chávez perdió, pese a un último round tan dramático como emocionante, ante Martínez.

Más tarde, en abril de este año, el tapatío venció a Austin Trout ante 40 mil personas en el Alamodome de San Antonio para unificar los títulos de peso Superwelter en su versión CMB y AMB, mientrasJulio seguía suspendido.

En la actualidad, Canelo, criticado o no, tiene el respeto por haber tomado una pelea de primera línea, ante el mejor del mundo, en la persona de Floyd Mayweather, y con amplias posibilidades de meterse en la selecta elite del boxeo mexicano el próximo 14 de septiembre en el MGM Grand de Las Vegas. Justo la situación que hace un año estaba viviendo Julio César, su eterno rival mediático.

También ahora, Chávez Carrasco está en la antesala de recuperar la credibilidad que perdió no sólo al dejar su invicto en el ring, sino por haber fallado un examen antidopaje que lo alejó de los cuadriláteros, a los que volverá el próximo 7 de septiembre en el Staples Center de Los Ángeles ante Brian Vera, un rival de cuidado pero poco nombre.

Ya veremos si después de septiembre las cosas vuelven a cambiar o siguen su curso, lo que sería espléndido para el boxeo mexicano que, pese a todo, sigue creyendo que al menos uno de ellos, o los dos, serán el futuro del pugilismo azteca.