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Jean De Villiers: una voz autorizada

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BUENOS AIRES--Talentoso y creativo. Jean De Villiers superó varias lesiones y se transformó en uno de los mejores centros del mundo. El back realizó su primera aparición en el plano internacional para el equipo de Seven de Sudáfrica, que terminó en el segundo lugar en la temporada 2001/2002, en el IRB World Sevens Series, y tercero en los Juegos de Commonwealth del 2002.

Comenzó su carrera jugando como wing, pero su posición es centro. Cabe destacar que De Villiers es producto del Paarl Gimnasium, cuna de muchos jugadores estrella de Sudáfrica, entre ellas Marius Joubert y Schalk Burger. No obstante, retomando a la Selección, también en el 2002 hizo su presentación en el rugby XV en la World Cup de Menores de 21, anotando cuatro tries en el certamen que ganaron los Junior Springboks.

Por su parte, las grandes actuaciones que tuvo dieron fruto de una gran recompensa: su aparición a nivel superior, que fue en noviembre del mismo año, contra Francia. Pero allí, sufrió una importante lesión en la rodilla a los cinco minutos de juego. De esta forma, quedó desafectado para jugar el Mundial del 2003. Sin embargo, después de recuperar su condición física, se convirtió en uno de los emblemas de los Boks en el 2004, año en el que los sudafricanos se llevaron, inesperadamente, todos los laureles en el Tres Naciones. En dicho certamen, el centro junto a su compañero Joubert marcaron el mejor score de tries, tres cada uno.

Dos años después, De Villiers fue el capitán de los Springboks en el partido que disputaron ante el combinado World XV, en el Ellis Park, el 11 de junio. Si bien era un titular indiscutido en la Selección, en la Copa del Mundo del 2007 sólo jugó 40 minutos en el partido inaugural, debido a un desgarro que sufrió en los bíceps. Pese a eso, el equipo sudafricano hizo una gran campaña y superó por 15 a 6 a Inglaterra en la final, consagrándose así campeón.

"En Argentina nunca es fácil jugar"

La fuerte racha de De Villiers continúo en el 2008, año en que jugó 13 tests con los Springboks, incluida la histórica victoria sobre los All Blacks, en Carisbrook y los tres partidos en su gira por el Reino Unido, donde concluyó invicto. Además, fue nombrado el Mejor Jugador de Sudáfrica del año. Por su parte, ese mismo año, jugó con Western Province la Currie Cup y el Super Rugby con los Stormers, equipo donde fue el capitán durante la temporada.

En el 2009, fue seleccionado para los dos primeros Test contra los British & Irish Lions. En esa serie, los Springboks tuvieron una ventaja de 2-0. De Villiers, también tuvo un papel importante en el equipo de Sudáfrica que ganó su segundo Tres Nations. Después de ese certamen, asumió contrato con Munster por un año, con opción a renovarlo. Su primer partido fue contra Newport-Gwent Dragons, en la Liga Celta.

El centro informó su intención de abandonar Munster en febrero del 2010 con el fin de asegurar un lugar en el equipo de Sudáfrica para la Copa del Mundo del 2011, y en junio acordó su regreso a Western Province y los Stormers.

Ya en el 2012, fue elegido como capitán de los Springboks. El entrenador Heyneke Meyer se mostró encantado de dicho anuncio, debido a las buenas actuaciones que había tenido el centro en el Super Rugby. El 9 de junio fue el primer test en Durban, donde Sudáfrica venció a Inglaterra 22-17; en dicho encuentro De Villiers anotó un try. La próxima prueba de la serie ante los ingleses fue en Johannesburgo. Los Boks ganaron 36-27, mientras que en Port Elizabeth empataron en 14.

Luego, tras finalizar el Rugby Championship, el centro se unió a Western Province durante las últimas etapas de la Currie Cup. Se lesionó en su primer partido de vuelta, lo que lo hizo perder las últimas instancias. El 27 de octubre acompañó al equipo a la final contra los Natal Sharks como el jugador número 23. Triunfó y recibió una distinción post partido.

En la temporada 2013 volvió en junio a comandar a los Stormers, tras recuperarse de una lesión en el esternón. Actualmente, continúa siendo el capitán de los Springboks.