MÉXICO -- Giovani Segura ultima los detalles para llegar la siguiente semana a Puerto Rico y desativar a "La Bomba". El ex campeón del mundo aseguró que ante Jonathan González, demostrará su supremacía y dejará en claro que quien lo haya escogido como escalón, se ha equivocado.
Segura (29-3-1, 25 KO) expondrá prácticamente su carrera ante González (13-0, 11 KO) el próximo 17 de agosto en un duelo eliminatoria para disputar el campeonato de peso mosca de la Organización Mundial de Boxeo en poder del sonorense Juan Francisco Estrada.
"Tengo mucho qué demostrar, tengo una muy buena preparación, ya casi en el peso, con buena condición física, a ir por la victoria de nuevo y demostrar todo lo que tenemos de experiencia y pegada", expresó el peleador guerrense.
"Decidimos darle la oportunidad porque me acercaría a una pelea con el "Gallo" estrada, estamos los dos ranqueados y esto nos pone a tiro de piedra para tener una pelea por el Campeonato", agregó el "Guerrero Azteca".
Giovani, quien dedicará el pleito a la memoria de su fallecido manager Arturo Mota, señaló que ante González dejará en claro que ni la juventud ni hambre de "la Bomba" le evitarán salir de nuevo triunfante de la Isla del Encanto, y si es por la vía rápida, mejor.
"Esperemos que sea una victoria clara y si se puede por nocaut mejor que es a lo que voy. Voy con una mente positiva. La victoria con Iván Calderón fue algo muy positivo, tengo buenos recuerdos y el hecho de viajar a esos terrenos me motiva más, dejé una buena impresión y quiero responder", señaló el ex monarca de peso mini mosca.
Giovani descartó que la ayuda que haya recibido González de Calderón pueda hacer diferencia. "Yo creo que le podría perjudicar, cuando fui la primera vez con Calderón pensaban que me iban a ganar, hasta ahorita se ha repetido la historia, no sé si (escogerme) sea capricho de un peleador sin experiencia o una mala decisión que tuvieron sus managers, porque para mí (Jonathan) no está listo para estas peleas", apuntó.
Giovani aseguró que esta pelea le servirá de plataforma para demostrar que su carrera no está acabada. "Este domingo viajamos, hicimos una gran preparación, la pelea con (Édgar) Sosa me dejó algo bueno, porque incluso anduvimos fuera de ritmo por la inactividad, fuera de distancia, me costó dar el peso más de lo normal y ahora ya estamos en el peso, en distancia, muy bien todo y se ha conseguido una pegada mucho más fuerte y vamos por todo", finalizó el peleador de 31 años, nueve más que su rival.