NUEVA YORK -- Tras su retiro en el ATP de Winston Salem, Mardy Fish confirmó que no jugará el Abierto de los Estados Unidos. Desde la organización del torneo citaron que el jugador expuso "razones personales". Pero el propio ex N°7 del mundo amplió en su cuenta de Twitter: "Lamentablemente mi salud no me dejará jugar este año el US Open. Gracias a todos por el apoyo". Como consecuencia (defendía octavos), bajará hasta cerca del puesto 400, lo que reabre las dudas respecto a su futuro.
La salud de Fish se había vuelto un tema ineludible casualmente desde el último US Open. Jugando un gran tenis y logrando muy buenos resultados en la gira norteamericana, el estadounidense se daba de baja sorpresivamente en Flushing Meadows horas antes del esperado choque con Roger Federer, para luego explicar a través de un comunicado que habían reaparecido sus problemas cardíacos; la misma arritmia que lo había marginado de Roland Garros y que lo había llevado a decir en una entrevista con el USA Today haber sentido que el corazón se le salía del pecho.
Desde entonces, pasó un proceso de recuperación muy lento y muy íntimo. "Jamás voy a olvidar todo lo que tuve que atravesar. Son muy pocas las personas que me vieron en esos momentos y son aquellos en los que debo apoyarme para seguir adelante", confesaba la última semana.
En marzo de este año, volvió para jugar Indian Wells y con la idea de ya de a poco ir reinsertándose en el circuito. Pero poco después se bajó de Miami, también de algunos Challengers locales en los que pensaba tomar ritmo, luego de la gira de arcilla y finalmente de Wimbledon.
El retorno efectivo se hizo, entonces, en la propia gira norteamericana previa al US Open. Pero el desafío era mayúsculo: debía defender semifinales en Washington, cuartos en Montreal, cuartos en Cincinnati y octavos en Flushing Meadows. Solo pudo superar la primera ronda en la capital -hizo octavos- y esta semana en Winston Salem, torneo para el que aceptó una invitación dado que no estaba en sus planes jugarlo.
"¿Cuán lejos tengo que ir para volver adonde estaba? ¿Quiero, realmente, pasar por todo eso? -se preguntaba Fish días atrás en Cincinnati-. Muchas cosas se ponen a prueba y uno tiene que pensar si aún tiene ese fuego y esas ganas que se necesitan". Habrá qué ver cómo seguirá la historia...