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Fin del viaje para Piratas o Cards

Si el béisbol se comportara como una ciencia exacta, el primer viaje de los Piratas de Pittsburgh a la postemporada en más de dos décadas debería terminar el miércoles en el Busch Stadium, la casa de los Cardenales de San Luis.

Piratas y Cardenales se miden en el quinto partido de la serie divisional entre ambos y dada la historia reciente, los vientos favorecen a los de San Luis.

Desde el 2011, San Luis ha enfrentado ocho partidos de vida o muerte y en siete de ellos ha salido victorioso.

Sólo el pasado año cayeron en el séptimo encuentro de la serie de campeonato de la Liga Nacional ante los Gigantes de San Francisco , a la postre campeones de la Serie Mundial.

Así que la presión extrema no le es ajena a la mayoría de los jugadores del manager Mike Matheny, quien enviará a la lomita a su mejor carta de triunfo, el derecho Adam Wainwright.

Ganador del primer encuentro de esta serie, Wainwright ha enfrentado cuatro veces a los Piratas en el 2013.

En los dos primeros encuentros (julio 31 y agosto 13) salió sin decisión, pero los venció con blanqueada durante siete innings el 7 de septiembre y luego los limitó a una limpia y tres hits en el inicio de la serie divisional.

En siete actuaciones en juegos de postemporada, el derecho de 31 años tiene balance de tres triunfos sin derrotas y efectividad de 2.27.

Su rival será el jovencito Gerrit Cole, derecho de 23 años que dominó a San Luis en el segundo choque de la serie, cuando los Piratas necesitaban a toda costa un triunfo que les permitiera viajar a Pittsburgh con las acciones igualadas.

Cole trabajó el viernes pasado durante seis innings, en los que sólo aceptó dos hits, incluido un jonrón solitario de Yadier Molina, con cinco ponches propinados.

El manager Clint Hurdle se dejó llevar por el instinto y prefirió al inexperto novato que al inconsistente A.J. Burnett, a quien le tocaba el turno en la rotación.

Pero Hurdle sabe que no hay mañana y el historial de Burnett en playoffs deja bastante que desear, con dos triunfos, tres derrotas y efectividad de 6.37.

Y más aún teniendo en cuenta su desastrosa salida en el juego inaugural de la serie ante Wainwright, en el que toleró siete limpias, con seis hits y cuatro pasaportes, en apenas dos episodios de labor.

¿A cuál de los dos equipos se le acabará el camino el miércoles? ¿Cuál será el rival de los Dodgers de Los Ángeles en la última escala antes de la Serie Mundial?

Difícil de predecir, sobre todo cuando la suerte se define en un solo partido, pero los Cardenales deben salir al terreno del Busch.