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La venta de Lionel Messi

BUENOS AIRES -- La venta de Messi. El tema tiene en vilo a Catalunya y a las dos Españas. La azulgrana y la madridista. Unos no dan crédito. Los otros se frotan las manos. El mundo asiste incrédulo a un festival de despropósitos impensado hace dos días, aunque previsible dadas algunas señales sotto voce procedentes del entorno del FC Barcelona.

En junio se corrió la voz en la Ciudad Condal de que Agustí Benedito, excandidato a la presidencia del Barça, había asegurado durante una reunión con su círculo íntimo, que Sandro Rosell, presidente de la entidad, quería vender a Messi. El grado de indignación de la persona que informó al respecto a quien escribe era (y es) mayúsculo.

En julio, más. En la previa del encuentro de las peñas (Trobada de Penyes) del FC Barcelona se esparció el rumor que el Barça había detectado que las lesiones musculares de Messi iban a ser cada vez más frecuentes. Este otro confidente regresó abatido, descorazonado, de Barcelona y así se mostró cuando reveló el momento y el contenido de la charla.

En agosto, otra ración de carbón. Se responsabilizó exclusivamente a Lionel Messi y a Jorge, su padre, de la llegada de Gerardo Martino como nuevo entrenador del Club. Nadie atendió a que el técnico argentino, más allá de alguna opinión, tiene un pasado brillante que incluye la dirección general de la selección que más cerca estuvo de eliminar a España durante el Mundial de Sudáfrica 2010.

En la primera fase del campeonato, entre septiembre y noviembre, aún con registros de equipo campeón, se acusó al 'Tata' Martino de querer cambiar las señas de identidad del equipo. Y se señaló a Messi por hacer causa común y avalar esa supuesta transformación.

En octubre (el día 5), Sandro Rosell informó los dos grandes objetivos para 2013-14 en la Asamblea de Compromisarios. "Mantener la excelencia deportiva y reducir la deuda por debajo de los 200 millones de euros". Cabe destacar que el pasivo del FC Barcelona a 30 de junio de 2013 alcanza los €331 millones. Y que la cláusula de rescisión de Lionel Messi es de €250 millones. En dicha reunión el mandatario informó los nuevos estatutos, que obligan a que la junta directiva, en caso de que el balance económico arroje pérdidas, tendrá dos años para sanear las cuentas a partir de la temporada en que informe ese resultado. Si no lo lograra, sus miembros estarán obligados a dimitir y deberán resarcir dichas pérdidas con su propio patrimonio.

En noviembre Lionel Messi se volvió a lesionar y el Club, que nombró el día 19 a Albert Montagut como nuevo director de comunicación (cuarto responsable del área en los 3 años que Rosell lleva como presidente), no se ocupó demasiado en explicar por qué Leo iba a desarrollar la primera fase de su rehabilitación física en Argentina. Al fin y al cabo, lesionado, en Barcelona no habría podido colaborar demasiado con el equipo. No interesó que las lenguas viperinas diseminaran su veneno acusándolo de ser un jugador poco comprometido con la institución, pese a haber sido el gran motivo de orgullo del FC Barcelona durante los últimos 8 años y una persona tremendamente admirada en todo el planeta.

En diciembre, tres golpes más a la línea de flotación. El día 10, Javier Faus, vicepresidente económico del FC Barcelona, afirmó sobre Lionel Messi en la emisora RAC1 que "no veo una razón para mejorarle el contrato a un señor al que ya se lo mejoramos hace seis meses". El día 16 el diario El Mundo, de Madrid, en su portada publicó que Jorge Messi, padre de Leo, "está siendo investigado por blanquear dinero de la droga". El día 20 el diario El País, de Madrid, anunció que "Messi estudia desvincularse a su padre de la gestión de su fortuna".

Lionel Andrés Messi Cuccitini (26 años), futbolista, pero hombre antes que nada, no aguantó más y salió a rebatir cada golpe como lo hace en la cancha. Hacia delante, buscando disuadir tanto juego brusco. El día 21 de diciembre se mandó un eslalon sorprendente en RAC1, la misma emisora en la que lo desafió la mano derecha del presidente.

"El señor Javier Faus no sabe nada de fútbol y quiere manejar el Barcelona como si fuera una empresa, y no lo es. Le recuerdo que ni yo ni nadie de mi entorno pedimos nunca ningún aumento ni renovación, y eso él lo sabe muy bien. El Barcelona es uno de los equipos más grandes del mundo y debe ser representado por los mejores dirigentes también". Pim.

"Estoy mentalizado en mi recuperación y no pienso en otra cosa. Intento llegar al máximo nivel físico posible. Mi familia me comentó un poco lo que se está diciendo no sólo a mí sino a personas que quiero como mi papá o jugadores que son amigos, y lo lamento profundamente. Lo que hacemos nosotros en estos partidos es ciento por ciento benéfico". Pam.

"Estoy profundamente unido a mi papá y a mi familia, en lo personal y en lo profesional. Si de mí depende seguirá siendo el presidente de la empresa y de la fundación. Como siempre digo, yo me dedico a jugar al fútbol y el se dedica a mis intereses fuera del campo y a seleccionar a los mejores profesionales". Pum.

A partir de acá, a usted, mi estimado lector, le empezará a llover de todo. Que Leo le decía "presi" a Joan Laporta, el anterior presidente -con quien tenía un trato fluido- y que con el actual máximo mandatario no tiene el mismo feeling. Que el FC Barcelona es Nike y Lionel Messi es Adidas. Que Joan Laporta, en una entrevista reciente en la que le pidieron grabar un mensaje para Leo, se emocionó por recordar sus épocas juntos y casi rompió a llorar en cámara por lo mucho que lo quiere y le agradece. Pasión que le cuesta transmitir en sus discursos a Sandro Rosell, quien pretende levantar un nuevo estadio con capacidad para 105.000 espectadores por recomendación de Javier Faus, ya que el emprendimiento le reportará unos 35 millones de euros al club. Que el propio Faus ha recomendado evitar bajo todo concepto más renovaciones al alza de los jugadores con contratos más altos que llevan muchos años en el club (busca potenciar el cambio de figuritas, cromos en España). Que Sandro Rosell tiene trato cercano con Florentino Pérez hace años, y que además comparte negocios turbios con jerarcas de la Confederación Brasileña de Fútbol. Que a Lionel Messi le patrocina Turkish Airlines y el Barça está esponsoreado por Qatar Airways, casualmente la empresa que más interés tiene en el nuevo estadio. Que a Sandro Rosell le asesora el expresidente Josep Lluís Núñez, para quien lo más importante en sus 22 años de gobierno siempre fue la economía...

"Me gustaría muchísimo que este año que viene todos pusiéramos el interés del club por delante de los intereses personales", le dijo el presidente Sandro Rosell a los empleados del club esta semana tras el almuerzo de felicitación por las Fiestas de fin de año. Los próximos meses nos darán una pauta de lo que significan para quien debe conducir el FC Barcelona hasta el 30 de junio de 2016, "el interés del club" y "los intereses personales". Por de pronto, no haber hecho nada para evitar que Lionel Messi se arrojara de cabeza a la pileta de barro es otra mala señal. Aunque magnates como Erick Thohir y Massimo Moratti no piensen lo mismo.