BUENOS AIRES-- Sean Maitland fue una de las grandes apariciones en el Super Rugby de los últimos tiempos y una gran revelación para Nueva Zelanda. Sin embargo, en 2012 renunció a sus aspiraciones con los All Blacks para pasar a Glasgow Warriors y vestir así la camiseta de Escocia.
El wing, nacido en Tokoroa, hizo su gran aparición en la Copa del Mundo Juvenil obtenida por Nueva Zelanda en 2007. El 2008 sería su año de despegue, ya que el título con Crusaders lo puso entre los jugadores más respetados y reconocidos del rugby internacional.
Maitland también fue uno de los grandes eslabones en la Air New Zeland Cup con Canterbury, llevándolo al ansiado título. Sin embargo, aquel 2009 cerraría con saldo negativo tras haber sufrido una lesión en el tendón que lo dejaría afuera de casi toda la temporada de Super Rugby.
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"Pasar a Escocia era el mejor movimiento para mí y estoy feliz de que se haya realizado"
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El 2010 sería promisorio luego de la recuperación. Una gran campaña, ya como fullback establecido de Crusaders lo llevaría a disputar los juegos centenarios con la Nueva Zelanda Maorí, donde marcó el try del triunfo ante Irlanda en Rotorua. Al año siguiente, Maitland tendría su mejor temporada llevando nuevamente a Crusaders a una final de Super Rugby e igualando la marca de cuatro tries en un mismo partido ante Brumbies.
Tras un gran 2011 y a la espera constante de una citación en los All Blacks, Maitland aceptó una oferta de Glasgow y se trasladó a tierras escocesas. Gracias a su descendencia (sus abuelos se trasladaron de Escocia a Nueva Zelanda en la década del 60), la citación al seleccionado europeo no se hizo esperar y el debut con la camiseta azul se concretó el 2 de febrero de 2013 ante Inglaterra.
Un enorme Seis Naciones hizo que las posibilidades de trasladarse al hemisferio Sur a ponerse la camiseta de British and Irish Lions sean concretas. Allí disputó cinco de los siete partidos en la gira de Australia.
Ahora será el turno de un nuevo Seis Naciones que lo tendrá como gran protagonista.