Israel Gutierrez 10y

Bosh y Oden entusiasman al Heat

MIAMI -- Probablemente no sea una exageración decir que el Miami Heat lidera la NBA en perspectiva.

Dado el nivel de escrutinio que este grupo vivió cuando empezó a jugar en conjunto en el 2010, y la impaciencia que los rodeó hasta que ganaron el primer campeonato en 2012, LeBron James y compañía ya han descubierto la reacción adecuada para casi cualquier circunstancia.

De modo que, mientras los de afuera se preguntan exactamente cuándo es momento de entrar en pánico por las rodillas de Dwyane Wade --quien se perdió su cuarto partido consecutivo el jueves, cuando Miami derrotó a Los Angeles Lakers por 109-102-- el Heat nos recordó en cambio cómo debería ser la reacción adecuada.

Lo hicieron el jueves con un LeBron bastante enchufado (sin señales de piloto automático), quien anotó 27 puntos, bajó 13 rebotes y repartió seis asistencias. Se limitó a decir que es esa época del año: "Estamos en la segunda parte de la temporada y todos los partidos cuentan".

Lo hicieron al demostrar que Chris Bosh es enteramente capaz de llenar el vacío de anotaciones de Wade, ya que marcó 31 puntos con 15 aciertos en 22 intentos, el segundo mejor porcentaje de tiros de su carrera (68 por ciento) cuando ejecuta al menos 20 lanzamientos.

Pero sobre todo, un miembro más reciente del Heat ofreció la dosis más grande de perspectiva.

Estamos hablando de Greg Oden, el jugador de 7 pies que ha estado fuera de juego durante cuatro años y está regresando de puntillas a la acción regular de la NBA.

Oden jugó su cuarto partido el jueves -- la primera vez que ha visto acción en partidos consecutivos -- y permaneció en la cancha 10 minutos, un récord personal esta temporada.

Al parecer, nada importante ocurrió durante esos minutos. Cinco puntos, cinco rebotes, un tiro bloqueado y tres faltas no serían algo para destacar.

A menos que seas Oden, quien considera cinco rebotes como una especie de hito.

"Eso es lo máximo que he conseguido este año", dijo Oden, quien permaneció bastante alejado de los medios de comunicación mientras se rehabilitaba para este lento y constante regreso a la cancha.

"Definitivamente estoy a destiempo para los rebotes. La mayoría de las veces, yo estoy bajando y el rebote me pasa justo por encima de la cabeza. Fue muy alentador para mí haber conseguido cinco rebotes hoy".

Los compañeros de Oden notaron mucho más de lo que indica la ficha.

"Su actividad", dijo James cuando le preguntaron qué fue lo que le gustó de los 10 minutos de Oden. "Bloqueó un disparo, buscó algunos rebotes ofensivos, tuvo la oportunidad corregir con algunas volcadas. Se podía ver que estaba un poco fuera de ritmo, pero eso está bien. Es muy activo.

"Lo que me encanta ver es cuando salta y aterriza y vuelve a posicionarse en defensa. Incluso cuando el balón fue salvado bajo nuestro aro cerca del banco y quedó en manos de [Pau] Gasol, lo vi entrar volando a buscarlo y siguió jugando. Eso es positivo para él, para nosotros como equipo, como franquicia, simplemente verlo hacer estos pequeños pasos en su camino de regreso".

El entrenador Erik Spoelstra no pudo contener la sonrisa cuando le preguntaron acerca de Oden.

"Me encantó", dijo Spoelstra. "Lo que estamos viendo es un poco de destiempo por la inactividad. Pero si te fijas en el vaso medio lleno, puedes ver que está en los lugares correctos. Eso es lo que no se puede enseñar en este juego. Se encuentra en los lugares indicados. Es sólo una cuestión de tiempo que haga esas jugadas, y no tenemos a nadie más en el plantel que pueda hacer ese tipo de jugadas".

El Heat ciertamente no tiene a nadie más del tamaño de Oden, y es por eso que su fichaje fue considerado como un intento de resolver el gran problema que Miami tiene para contener a Roy Hibbert, el grandote de los Indiana Pacers que suele aniquilar al Heat por dentro.

Y por momentos --ha jugado un total de 29 minutos esta temporada-- se puede ver el tipo de efecto que Oden podría tener incluso contra un gigante de 7-2 pies como Hibbert.

Por ahora, si bien 10 minutos y cinco rebotes se destacan como sus principales logros, Oden simplemente está tratando de encontrar comodidad en el sistema del Heat. Básicamente está emulando a Chris Andersen, cuya actividad a lo largo de la línea de fondo y cerca del aro ha bautizado a dicha área como "the bird box" ("la caja del ave", "caja" porque Andersen se niega a ser enjaulado).

"Llegar a la caja del ave, llegar a la línea de fondo, establecer pantallas", dijo Oden. "Creo que básicamente ahí es donde estoy. Es un buen sistema, y estoy empezando a aprenderlo. Cuanto más esté en la cancha, más cómodo me sentiré con él.

"Aún tengo un largo camino por recorrer. Todavía no estoy tan rápido como me gustaría estar ahí afuera".

Oden, quien dijo que su límite oficial de minutos es "cuando estoy cansado", también puede tener un impacto significativo sobre Bosh.

Es bastante evidente que a Bosh le gusta jugar en su posición natural de ala-pivote de vez en cuando. Es algo que ha podido hacer más a menudo últimamente, ya que Spoelstra lo ha alineado junto a Andersen contra las alineaciones más grandes.

Con Oden, Bosh puede pasar aún más minutos jugando de cuatro, y Bosh aprovechó esto el jueves. Se enfrentó a Gasol y le eclipsó, trabajando su juego de media distancia casi a la perfección.

También ayudó que Wade estuviera fuera nuevamente, ya que Bosh contó con más espacio y más oportunidades para ser agresivo.

En cuanto al regreso de Wade del pequeño contratiempo que sufrió durante la última gira del Heat, LeBron logró ofrecer el nivel adecuado de aprensión sobre el tema.

"Cada vez que un hombre se pierde varios partidos seguidos, hay un cierto sentido de preocupación", dijo James. "Tenerlo [a Wade] en la cancha nos hace más peligrosos. Pero al final del día, tenerlo saludable también nos hace más peligrosos".

Cuando la temporada se reduzca a los partidos críticos de mayo y junio, nadie recordará cuatro juegos perdidos en enero.

Tal vez nadie sepa mejor que Oden que está bien perderse algunos partidos por el bien mayor.

Arrancó la temporada el 15 de enero. Ha jugado tres de cinco partidos desde entonces. Y a pesar de que dice que es "hora de empezar a meterle ritmo", solamente sus rodillas pueden decirle con certeza cuándo volverá a jugar.

Y eso está muy bien.

"Después de lo que he pasado, no tengo más que paciencia", dijo Oden. "Fue un camino largo y arduo.

"Y después de cuatro años, ¿qué son un par de juegos?"

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