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Pineda, gran labor, pero sin triunfo

TORONTO-- Los Yanquis de Nueva York no supieron aprovechar la excepcional salida del abridor dominicano Michael Pineda y fueron blanqueados 4-0 por los Azulejos de Toronto para su tercera derrota de la temporada la tarde del sábado.

Pineda, en su primer partido en Grandes Ligas desde septiembre de 2011, dominó sobre la lomita al permitir sólo una carrera limpia en cinco hits en seis entradas completas, pero cuadrangulares de los jardineros dominicanos Melky Cabrera y José Bautista contra el relevista David Phelps sellaron el marcador a favor de Toronto para su primera victoria de la temporada en casa.

"Me siento bien contento por ese jonrón en el octavo inning, pero el picheo fue la clave, Dickey y el bullpen, y ahora hay que seguir trabajando fuerte para seguir sumando victorias", dijo Cabrera en referencia a la labor del ganador del Cy Young 2012, el nudillista RA Dickey, quien permitió cinco hits en cinco entradas y dos tercios, ponchando a seis Yankees en la blanqueada.
Cabrera, que subió a Grandes Ligas y jugó con los Bombarderos de 2005 a 2009, conectó su segundo cuadrangular de la serie, después de habérsela sacado del parque en su primer turno ante el as japonés Masahiro Tanaka la noche anterior. El dominicano también conectó el primer hit contra Pineda con una rola al campocorto, aunque no fue bien fildeada por Derek Jeter.

"Hizo muy buena labor, fue una tremenda salida de él", agregó Cabrera en referencia a Pineda. "De veras que fue bueno que saliera del juego para que pudiéramos conseguir la victoria".
Pineda limitó a sus tres compatriotas dominicanos, y tres de los mejores bateadores en Grandes Ligas, Cabrera, Bautista y Edwin Encarnación a un solo hit en nueve turnos combinados, incluso consiguiendo un ponche contra Bautista en la tercera entrada.
"De verdad que no me impresionó lo que hizo Pineda porque sé que tiene la capacidad para hacer eso", dijo Bautista a ESPNDeportes.com. "Tiene tremendo potencial y puede convertirse en uno de los mejores lanzadores de la liga por el arsenal de lanzamientos que tiene y por la explosividad que tiene cuando la pelota sale de sus manos".

Bautista, quien enfrentó a Pineda durante su año como novato con los Marineros de Seattle, destacó que el tamaño del corpulento de abridor dominicano es un arma tan poderosa como lo son muchos de sus lanzamientos.

"Es un pitcher imponente, y en momentos se nota incluso intimidante sobre la lomita y es bastante difícil concentrarse y no notar el gran tamaño que tiene, saca a uno de concentración", admitió.

En tres partidos contra Pineda y los Marineros en 2011, Bautista conectó un solo hit en nueve turnos contra el ahora quinto abridor de los Yankees, y el estelar jardinero destacó que le pareció que se ha convertido en un lanzador mucho más efectivo a través de su recuperación los últimos dos años.

"Ahora no es tan errático. Antes lo enfrenté en dos o tres salidas, y aunque ahora no tira tan duro, lo noté muy controlado", dijo Bautista. "También lo vimos lanzar en los campamentos de entrenamiento y se vio muy controlado, hasta ahora lo que me ha demostrado del nuevo Pineda al anterior es que tira mucho más lanzamientos para strikes".

Pineda no necesitaba mayor endoso que escuchar las palabras de uno de los mejores bateadores en Grandes Ligas y mirar las estadísticas al final del partido, pero el manager Joe Girardi también dijo sentirse muy complacido con su desempeño.

"Esto podría significar mucho para nuestro equipo, y estoy seguro que significa mucho para él ser capaz de competir al más alto nivel porque ha hecho un montón de trabajo en los últimos dos años. Se la pasó demasiado tiempo en rehabilitación en Florida y estoy seguro de que está muy contento con el lugar donde está", señaló el dirigente neoyorquino al finalizar el partido.

A pesar de la derrota, Pineda expresó sentirse sumamente orgulloso de su trabajo la tarde del sábado.

"Es impresionante después de dos años fuera volver a la Grandes Ligas y me siento muy contento de haber tenido un juego como el de hoy", dijo Pineda. "Me llena de orgullo poder picharles a buenos bateadores y sacar out y aunque perdí el juego de hoy me siento orgulloso de que estoy de regreso en Grandes Ligas".