LONDRES -- Max Mosley, ex presidente de la FIA, no solo gusta del nuevo sonido de los motores, además se hace responsable por el mismo. Durante su mandato, Mosley se ocupó de tres temas en especial: seguridad, rebajar los costes y estar actualizados.
El último apartado se refiera a la tecnología verde, que llegó cuando la F-1 da la bienvenida a los 1.6 turbo V6 con ERS. Sin embargo, el cambio no ha sido acogido bien por todos, algunos fans piden que se suba el volumen de esta F-1.
Y si los fans buscan un culpable, Mosley se ofrece felizmente.
"Si alguien debe ser culpado, debo ser yo", aseguró para el Daliy Mail. "Nosotros fuimos los que pensamos esa nueva tecnología. Han pasado 10 años desde entonces, y de hecho me gusta el sonido".
"Me ponía estas cosas (protectores de oídos) debido a que el ruido de los motores durante 40 años o más. Es tarde para salvar mis oídos, pero no para las próximas generaciones. Menos ruido es mejor para las familias. Puedes llevar a niños a las competencias sin temor a que queden sordos", dice el británico.
"Es importante para la F-1 evolucionar. La seguridad fue el gran reto del siglo 20 y la sustentabilidad ambiental es el reto del siglo 21. Si ese hecho no es entendido, el deporte corre el riesgo de volverse irrelevante".
"La responsabilidad social corporativa es importante para los fabricantes, así que hay una necesidad de moverse en esa dirección para que el deporte no pierda patrocinios y fabricantes que se dan cuenta de lo importante que es esta tecnología en el desarrollo de sus autos de calle".
"Si hay alguna cosa que pudo haber sido mejor, es como se entendieron las nuevas regulaciones y las razones detrás de estas; se tuvieron que explicar mejor al público. Una oportunidad se perdió en eso", concluyó.