ROMA - Rudi García, el técnico francés que revolucionó la Roma y la llevó a realizar una campaña inédita, todavía confía en la posibilidad de pelearle el "scudetto" a una Juventus cada día más cerca de alzarlo por tercer año en fila.
"Con cada fecha que pasa, si la distancia (ocho puntos) se mantiene resulta más difícil. Pero a veces cuando parece que nada puede pasar, llega la sorpresa", se entusiasmó García, quien presentó este miércoles su autobiografía.
"Todos los caminos conducen a Roma. El fútbol es mi vida", se titula el libro presentado por García, quien reconoció que Roma la tiene más difícil esta fecha que Juventus, pues su equipo visitará a Fiorentina, mientras el líder recibirá a Bologna.
"Nosotros jugaremos en Florencia ante un rival duro, mientras que el de Juventus parece más accesible en los cálculos previos. De todos modos, mientras tengamos vida, tendremos esperanza", fue la metáfora elegida por García.
"Roma y Juventus están rompiendo todos los récords en el campeonato. Nosotros queremos ganar todos los partidos que jugamos y ellos también", destacó el DT "giallorosso", cuando restan cinco fechas para el final del torneo.
García apuesta a achicar distancias antes del domingo 11 de mayo, cuando Roma reciba en el estadio Olímpico a Juventus, que podría llegar ya consagrado como tricampeón del "Calcio" a ese partido.
Volviendo a la gran temporada de su equipo, el francés afirmó que "es mérito de todos" y dijo que "la victoria más hermosa es haber logrado que los fanáticos de la Roma hayan vuelto a sentirse orgullosos de su equipo". "La comunión que existe hoy entre los aficionados y el equipo es de por sí algo extraordinario y para mí representa una de las mayores satisfacciones", completó García, quien aseguró que lo seduce más un proyecto ganador, que el dinero en sí.
Por eso, al final de esta temporada y pase lo que pase, García se sentará a discutir el futuro con el presidente del club, James Pallotta, y con el director deportivo, Walter Sabatini, para conocer sus planes. Si los caminos siguien "conduciendo a Roma" y coinciden, la renovación por otras dos temporadas del contrato con el entrenador será prácticamente automática, tal como aclaró el propio García.
"Cuando trabajo en un club lo hago como si fuese el último. La suerte de un técnico no depende siempre de sí mismo, sino de los resultados y de los dirigentes. A mí también me puede pasar que deba irme de un lugar en el que me sienta cómodo", graficó.
"Por las dudas, siempre tengo lista la valija en la puerta de casa", completó con ironía García, quien sueña con seguir en la Roma porque "me siento muy a gusto y espero poder pagar con títulos".
"Nunca elegí un destino por el dinero, sino por el proyecto y creo que la idea de los dueños de la Roma quieren convertirla en uno de los grandes clubes de Europa, una idea que comparto", completó.