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MADRID -- Pepe, jugador del Real Madrid y de la selección de Portugal, confesó estar cansado de que se le tilde como un defensa que se emplea con dureza con sus rivales. El central merengue aprovechó la puesta de largo de Nike de cara a la Copa del Mundo para defender su fútbol y clamar que lo suyo no es juego sucio, sino alto ritmo competitivo.  "Las estadísticas están ahí", señaló rodeado de los nuevos productos de la marca que le patrocina. "Yo soy un jugador que me gusta ganar los balones, no me gusta perder los partidos, soy muy competitivo. Cometo muy pocas faltas. soy si no me equivoco el central con menos faltas de la liga española. La gente está ahí para valorar y estoy en una temporada muy buena que no quiero estropear. Espero seguir así y terminar en el mejor momento", añadió. Pepe es uno de los jugadores que menos faltas cometen de media. Hasta abril acumulaba 15 de promedio y llegó a cometer una por cada 169 minutos de juego. Ocupa el puesta 243 en este apartado. Según Pepe, su fama se debe a aquel lance en el que agredió a Casquero en marzo de 2011 con dos patadas al delantero en el área. Aquello le costó la expulsión, cuatro partidos de sanción y un estigma que le perseguirá durante su carrera y que le obliga a escuchar los cánticos de 'asesino, asesino' en muchos de los estadios que visita. "No son todo el mundo (le pone la etiqueta de duro). Yo cometí un error, pagué por ese error que he cometido. Todo el mundo ha fallado algún día, son cosas que pasan. La gente tiene esa idea mía pero yo intento ayudar a mi club de la mejor manera posible y la selección. Soy el que soy y espero estar muchos años en fútbol para poder dar lo mejor de mí", apuntó. Independientemente de su fama sobre los terrenos de juego, Pepe está encarando una temporada en la que ya es campeón de la Copa del Rey con el Real Madrid, club con el que también lucha por la Liga y la Liga de Campeones. Además, también visualiza en un horizonte muy cercano el Mundial de Brasil, donde su selección quedó encuadrada en el grupo G junto a Alemania, EEUU y Ghana. "Nuestro objetivo principal es pasar la primera fase", comentó ataviado con el último modelo de la playera de su país presentado por Nike en Madrid. "Tenemos un grupo súper difícil, pero nos encontramos con confianza de pasar. A partir de ahí iremos partido a partido. Estaremos preparados para la primera fase que va a ser bastante dura para nosotros. Vamos a tener tiempo de preparar los partidos y espero que Portugal esté a la altura de poder hacer un buen Mundial. Queremos darle una alegría a nuestros aficionados", declaró. A priori, a piedra más complicada en su camino es la de la selección de Alemania, equipo que ya les venció en la Eurocopa pasada. "Vamos a preparar el partido contra Alemania, vamos a salir a ganar el partido, como Portugal siempre hace. Queremos ganar el partido al revés de la Eurocopa, que tuvimos muchas ocasiones pero no ganamos el partido. Vamos a cuidar un poco más los detalles para cuando llegue ese partido podamos estar fuertes mentalmente", apuntó antes de valorar las fortalezas de sus rivales en Brasil, que tendrá varios jugadores contra los que está disputando la semifinal de la Liga de Campeones. "Son partidos distintos, los alemanes son futbolistas que corren mucho, trabajan mucho, son muy buenos tácticamente y tienen mucha calidad. Espero que tengamos la suerte que no tuvimos hace dos años en la Eurocopa. Espero poder ganar en este Mundial y seguramente vamos a hacer todo para poder ganar este partido", señaló. A pesar de la mesura ante Alemania, Pepe manifestó que hay que guardarle mucho respeto a las selecciones de EEUU y Ghana, dos combinados nacionales, que según el jugador están creciendo mucho y no pondrán las cosas fáciles. "Hay que tener respeto a EE.UU. y Ghana. EEUU es una selección que en 2010 llegó a una final de competición importante (Copa Confederaciones), es un trabajo que están haciendo bien. A nivel colectivo es una selección muy buena. Trabajan mucho y son organizados a nivel táctico y por eso nosotros tenemos un grupo súper difícil y tenemos que estar muy preparados para llegar bien", argumentó. Éste será un Mundial muy especial para Pepe, que aunque defiende los colores de la selección lusa, no olvida que él es natural de Brasil, un país en el que tiene mucha familia y amigos. "Yo nací en Brasil, mis familiares viven todos allí. Para mí es importante por estar en el lugar donde he nacido. Pero bueno, como he dejado muy claro, Portugal me ha dado la oportunidad de ser el que soy, la gente siempre me ha tratado muy bien. Soy muy grato a los portugueses y espero poder contribuir de la mejor manera posible con mi trabajo, determinación, mis ganas y poder llegar lo más lejos posible", sentenció.
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