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Estadísticas, curiosidades y datos a seguir durante el draft de la NFL

Mario Williams fue el último liniero defensivo en salir 1° global, hazaña que busca Jadeveon Clowney. AP

MÉXICO -- A las puertas del próximo draft de la NFL, entran en juego diversos aspectos a considerar más allá de talento, análisis de expertos, proyecciones e incluso gustos personales.

Siempre está el fantasma paralelo de las estadísticas y tendencias, las cuales parecen inagotables en un sorteo con más de 40 años de existencia en su modalidad actual.

Es factible partir desde cualquier ángulo para tratar de adivinar y aportar a los almanaques del draft, desde algo inherente como la fraternidad de Derek Carr, mariscal de campo de Fresno State, con David Carr, selección N° 1 global por los Texans en el 2002, hasta el azar de cuánto va durar la primera ronda: si las dos horas que abarcó en 1972 o las seis del 2007.

En el apartado del parentesco, donde se han forjado grandes dinastías en la historia de la NFL, podemos asegurar que David Carr está fuera de la discusión. Caso contrario del corredor James Wilder Jr., de Florida State, hijo del líder corredor y máximo receptor en la historia de los Tampa Bay Buccaneers, James Wilder.

La universidad de Vanderbilt nos presenta un producto que tiene sangre legendaria, toda vez que el receptor Jordan Matthews es primo de Jerry Rice.

Alabama entra con confianza al sorteo al tiempo que tres de sus estelares -- el profundo Ha Ha Clinton-Dix, el tackle Cyrus Kouandijo y el apoyador C.J. Mosley-- estarán presentes en el evento. Junto a Texas A&M, ninguna escuela tendrá más representantes este año, durante el cual el Crimson Tide podría anotarse la racha más larga de jugadores tomados en el Top 10 de la primera ronda desde 1967 (empatados con cinco).

Los Aggies tendrán embajadores presentes con el mariscal Johnny Manziel, el receptor Mike Evans y el tackle Jake Matthews. Con la posibilidad que los tres escuchen su nombre en la primera ronda, representarían casi el 30 por ciento de los jugadores que han salido en dicha instancia para Texas A&M en la historia del draft común (11).

El último Aggie en escuchar su nombre dentro de los primeros 32 fue Luke Joeckel, en el 2013, por los Jacksonville Jaguars en 2° lugar.

No obstante de su animosidad, es probable que el primer aludido la noche del jueves en el Radio City Music Hall de New York no provenga de los programas citados, toda vez que South Carolina presume a su mejor hombre en el ala defensiva Jadeveon Clowney.

En la historia global del draft, sólo 13 linieros defensivos han encabezado la generación de un sorteo, con Mario Williams, en el 2006, como el último referente.

Manziel, ganador del Trofeo Heisman en el 2012, es sólo uno de numerosos talentos que presenta la baraja de jugadores a elegir este año en controles ofensivos. Nombres como Blake Bortles de Central Florida, Teddy Bridgewater de Louisville y Carr de Fresno State, esperan ser escuchados en la primera ronda y sueñan en encabezar la lista.

No podemos descartar elementos como Aaron Murray de Georgia ni A.J. McCarron de Alabama, quienes podrían compartir el destino que trazó EJ Manuel en el último draft al ser nombrado en la primera vuelta pese a las valoraciones generales.

Bridgewater, Bortles y Manziel se declaran elegibles al draft antes de tiempo, por lo que en caso de ser nombrados en el 1° casillero global --posibilidad latente con los Texans en dicha posición-- integrarían de inmediato una lista de élite.

Desde 1990, nueve mariscales de campo que saltaron de forma prematura al draft, fueron tomados de inmediato. Con la excepción de algunos como Jeff George, Tim Couch, JaMarcus Russell y probablemente Sam Bradford, los equipos han encontrado dividendos cuando apuestan por los pasadores que no resistieron la tentación de brincar a la NFL en cuanto tuvieron la oportunidad.

La única certeza que existe antes del draft, es que las tendencias se van a incrementar o romper en cuanto Roger Goodell devele la primera selección. Ya sea Clowney, Manziel, Khalil Mack de Buffalo o el jugador menos esperado a causa de un canje, el libro de estadísticas se continuará alimentando y nunca está de más contar con una brújula literaria.