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IRVING -- ¿Qué tan emocionado está Randy Gregory de formar parte de los Dallas Cowboys? El recluta de segunda ronda del club se hizo un tatuaje con la estrella solitaria en su antebrazo. Hay muchas formas de mostrar compromiso, pero el apoyador novato eligió la ruta más permanente con su tatuaje. Ciertamente, los Cowboys se han esperanzado en que su selección de Gregory, quien arrojó positivo en una prueba antidoping del combinado de talento y acarrea problemas extra campo, lleve a una relación laboral al largo plazo. La semana pasada, Gregory dijo en entrevista con ESPN Dallas 103.3 FM que podían culpar a la inmadurez por sus problemas fuera del campo. "Eso es algo que definitivamente he trabajado y algo que definitivamente puedo arreglar", declaró Gregory en la entrevista del viernes. "Tengo 22 años de edad, pero pienso que me puedo manejar bastante bien y necesito llevarme mejor en cuanto a la toma de decisiones. Pienso que la gente se está envolviendo en la marihuana y creen que sólo es un problema de hierba. "No creo que sea un problema de marihuana. Creo que es toma de decisiones. Pienso que soy inmaduro. Definitivamente trabajaré en eso. Quiero demostrar que todos están mal y quiero hacerlo con este equipo. Pienso que éste es el mejor equipo en donde puedo hacer eso". También le preguntaron si ha fumado marihuana desde que arrojó el último positivo. "No la he tocado y también me siento muy bien. Todo esto sirve como anestesia, para ser honesto. Estoy drogado con la vida ahora mismo y no quiero perder ese efecto", expuso. El propietario y gerente general de los Cowboys, Jerry Jones, habló con Gregory antes de decidir invertir su segunda selección del draft (N° 60 global) en él.
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