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Todd Christensen se opuso al cambio que eventualmente lo hizo brillar

Todd Christensen fue pieza fundamental para el último triunfo de Super Bowl de los Raiders. Getty Images

La redacción de ESPN.com.mx eligió a los jugadores más representativos para cada número de jersey, desde el 99 hasta el 1, para dar a conocer sus semblanzas a modo de conteo regresivo hasta el arranque de la temporada regular del 2015. Aquí puedes consultar la lista completa.

MÉXICO -- En un principio, se opuso por completa a la idea del cambio.

Todd Christensen fue reclutado por los Dallas Cowboys en la segunda ronda del draft de 1978 como fullback después de una carrera estelar en BYU. Pero su negativa a cambiar de posición a ala cerrada, aunado a una fractura en el pie, acabaron de inmediato con su estadía con el equipo de Tom Landry.

Christensen aterrizaría con los New York Giants, con quienes duraría apenas un par de semanas --y un partido de la temporada de 1979-- pero su camino lo llevaría finalmente hasta Oakland, donde se convertiría eventualmente en uno de los Raiders más emblemáticos de la estadía del equipo en Los Ángeles.

“Dallas no define los roles de jugadores individuales", recordó Christensen en una entrevista con The Dallas Morning News en 1983. “A la corporación no le preocupa la expresión individual. Me preguntaron, ‘¿Quieres ser un ala cerrada?’. Respondí que estaba bien. Pero luego una semana más tarde me preguntaron si lo prefería, y yo dije que prefería ser un corredor. Esa no fue la respuesta correcta. Como resultado me encontré desempleado, lo que no fue placentero. De no haber sido por los Raiders, yo sería un amargado”.

A Christensen le costó un poco de trabajo hacer el cambio de posición como jugador de fútbol americano profesional, pero nunca le costó trabajo expresarse. Conocido como uno de los jugadores más elocuentes y poseedor de un amplio vocabulario, Christensen alguna vez recitó un poema de 15 versos de su autoría --llamado "A Destiny to Win"--, dedicado para los Raiders, ante los medios.

"Recuerdo a Todd siempre empleando palabras grandes y citando a autores y poetas famosos", señaló el ex entrenador en jefe de los Raiders, Tom Flores, en un comunicado emitido por el equipo a la muerte de Christensen en el 2003. "Era cómico en ocasiones porque nadie sabía de lo que hablaba. No vi mucho de él recientemente, pero echo de menos la diversión, los grandes momentos que compartimos en la familia de los Raiders".

La realidad es que el cambio de posición le vino como anillo al dedo, y Christensen tardó en poco en lucir su versatilidad en la NFL. En 1982, durante la temporada de huelga de la NFL, Christensen atrapó 42 pases para 510 yardas con cuatro touchdowns en nueve encuentros, abriendo los ojos a varios de lo que era capaz de hacer sobre un emparrillado, en la primer campaña del equipo en Los Ángeles.

Sin embargo, la temporada de destape fue la de 1983. Christensen atrapó 92 envíos para 1,247 yardas con 12 touchdowns. Sus 92 recepciones no solamente fueron la mayor cantidad en la liga ese año, sino también constituyeron una marca histórica para alas cerradas.

Esa campaña se culminaría con el máximo triunfo posible de la NFL, el Super Bowl. Los Raiders se encontraron a los Raiders en el Super Bowl XVIII, y Los Ángeles aplastó a Washington por 38-9 para el último título de la franquicia.

No obstante, Christensen no había terminado. En 1986, volvió a liderar a la liga en recepciones --y de paso imponer nueva marca absoluta para alas cerradas-- con 95 recepciones, un total que simplemente no se veía con jugadores de su posición, de la posición que no quiso jugar en un principio.

Christensen se retiró en el '88, después de una carrera que incluyó cinco viajes al Pro Bowl y dos inclusiones al primer equipo All-Pro. Sin embargo, su facilidad de palabra lo mantuvo ligado al fútbol americano como analista. Después de un par de pruebas para jugar al béisbol con los Oakland Athletics y Anaheim Angels, Christensen se volvió comentarista de NFL con NBC, y más tarde regresó al juego colegial trabajando partidos para ESPN, antes de mudarse a la MountainWest Sports Network, y eventualmente recalar en CBS.

Desafortunadamente, Christensen falleció en noviembre del 2013 debido a complicaciones surgidas después de una cirugía de trasplante de hígado. De acuerdo a su hijo Toby, la familia creía que las complicaciones en la salud de su padre habían comenzado 25 años antes gracias a una operación de vesícula que no se realizó correctamente.

Los números de Christensen se comparan favorablemente contra los de cualquier ala cerrada que pertenece al Salón de la Fama. Actualmente, hay ocho alas cerradas en el recinto de Canton y los totales de Christensen se colocan a la par de la mayoría de ellos: 461 recepciones para 5,872 yardas con 41 touchdowns. Con todo y eso, lo más recordado de Christensen sigue siendo su gran personalidad.

"Se trataba de un tipo muy, muy inteligente, cerebral", dijo el actual propietario de los Raiders, Mark Davis, a su muerte. "También era un tipo muy alocado, divertido, y un gran receptor. Simplemente un tipo grandioso en todos los aspectos".