LONDRES -- El entrenador en jefe de los Miami Dolphins, Joe Philbin, no está preocupado por la seguridad en su puesto luego de reunirse con el propietario Stephen Ross tras la tercera derrota consecutiva del equipo este domingo.
"No, en absoluto", declaró Philbin a la prensa en Londres tras caer 27-14 ante los New York Jets en Wembley Stadium. "Estoy preocupado por mantener al equipo en su rumbo, arreglar todo y tenerlos preparados para enfrentar a los Tennessee Titans".
Los Dolphins (1-3) han sido superados 91-48 durante su racha perdedora.
Es probable que se realicen más reuniones con el propietario durante la semana de descanso cuando Philbin vuelva a Florida. Los Dolphins han lucido poco preparados y han ido en desventaja al medio tiempo en cada uno de sus cuatro partidos esta temporada. Miami también ha sido superado 37-3 en el primer cuarto esta temporada, lo que es un pobre reflejo de su cuerpo de entrenadores.
"Aún no podemos entrar en pánico", expresó Philbin. "Parece que las paredes se cierran sobre uno. Todos nos damos cuenta de eso. Así que vamos a revisar las cosas y ser honestos sobre dónde nos encontramos, qué estamos haciendo bien y lo que no estamos haciendo bien".
Philbin dijo que planea mantener al coordinador defensivo Kevin Coyle, quien también está en la silla caliente. Ha habido una falta de conexión entre los jugadores y el sistema defensivo de Coyle, y Philbin confirmó este domingo que los jugadores se reunieron con Coyle esta semana para intercambiar ideas sobre qué podría funcionar mejor.
"No había conformidad. Tuvimos una reunión defensiva el lunes y hablamos de ciertas cosas", reconoció Philbin. "Los jugadores hablaron. Los entrenadores hablaron. Él se reunió con distintos grupos y hubo retroalimentación".
Sin embargo, no hubo cambios en su rendimiento. Miami permitió 425 yardas totales y 207 yardas terrestres contra los Jets.