LA HABANA -- El Clásico Mundial de béisbol contribuyó a la fiebre con la que se vive el campeonato de béisbol de la isla, porque al conquistar el segundo lugar los cubanos se ganaron el respeto de la afición, explicó a la AP el derecho Yadel Martí.
"El Clásico fue lo más grande, difícil e importante. Antes del torneo fueron muchos los que nos menospreciaron y pocos los que apostaron por nosotros", recordó Martí.
Después de un entrenamiento con Industriales, equipo que espera por el ganador de la semifinal Villa Clara-Santiago de Cuba para jugar la final del campeonato cubano de béisbol, Martí recalcó que el Clásico "fue el medidor del valor real de los peloteros cubanos".
El cuerpo de lanzadores de la isla fue uno de los más cuestionados "y sin embargo respondimos" dijo Martí, elegido en el equipo todo estrella del Clásico donde Cuba perdió 10-6 en la final frente a Japón.
El derecho capitalino de 26 años no permitió carreras en el Clásico, salvó dos cotejos en la primera ronda y ganó uno en la segunda etapa. Además fue el abridor de la semifinal que Cuba ganó 3-1 contra República Dominica, en cuatro entradas y un tercio toleró un imparable y otorgó un boleto sin permitir carrera.
Tradicionalmente la final del campeonato cubano desata pasión en la isla donde el béisbol es el deporte rey.
"Veía Cuba en el quinto lugar del Clásico como máximo, imaginaba como extraordinario quedar cuarto, pero ni en sueño me imaginaba en la final", comentó René Sierra, un mecánico fanático de Industriales.
"El excelente papel de Cuba en el Clásico dejo mil cosas positivas, creció la motivación de la afición mientras los peloteros saben que al más alto nivel si se puede", comentó Rey Vicente Anglada, manager de Industriales y del equipo de Cuba después del Clásico.
"El Clásico prestigió los títulos internacionales que ostenta Cuba, en particular las tres medallas de oro olímpicas" manifestó Carlos Rodríguez, presidente de la federación cubana de béisbol.
"La unidad y cohesión de los jugadores fueron clave", afirmó Martí. "Nos preparamos pensando que ese torneo era lo máximo, nos ubicaban atrás pero nos concentramos, conscientes de la responsabilidad y para quedar lo más cerca posible del primer lugar", recordó Martí.
Sierra espera con ansias la final del campeonato, y aseguró que "este año hay más pasión porque nos dimos que realmente tenemos uno de los mejores béisbol del mundo".