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Una carrera para recordar

INDIANÁPOLIS -- La edición 91 de las 500 millas de Indianápolis se corrió bajo un cielo gris, con tres horas de retraso por lluvia y terminó 34 vueltas antes de lo previsto tras una bandera amarilla.

Eso no suena divertido, pero la carrera del domingo quedará entre las mejores de la historia.

Incluyó momentos dramáticos de sobrepaso, el tipo de acción que se necesita para recuperar los fanáticos perdidos con la NASCAR en la última década.

¿Qué vieron los fanáticos? Vieron a Marco Andretti competir nuevamente por la victoria, luego de una dolorosa derrota como novato, para esta vez terminar con una voltereta hacia atrás a 200 millas por hora.

Observaron al dos veces ganador en Indy, Helio Castroneves, caer hasta el lugar Nº 29 tras sufrir un problema al cargar combustible en los boxes, para luego recuperarse y terminar tercero.

"Nunca perdí la fe en mi equipo y ellos siempre confiaron en mi", dijo Castroneves. "Mantuvimos la compostura y obtuvimos un resultado fantástico".

Los fanáticos vieron además a Davey Hamilton, quien casi pierde sus dos pies en un accidente hace seis años, finalizar en un impactante noveno lugar en su primera carrera desde el accidente.

Pudieron ver también a dos leyendas --Al Unser Jr. y Michael Andretti-- correr en Indy probablemente por última vez.

Y vieron a Danica Patrick pelear con los líderes una vez más en Indy. Patrick estaba segunda hacia al final de la carrera antes de terminar octava, para su tercer final entre los mejores 10 en tres carreras en esta pista.
"Ganaré esta carrera en algún punto", dijo Patrick. "No puedo no ganar después de estar tan cerca otra vez".

La carrera tuvo 24 cambios de mando entre nueve pilotos en las 166 vueltas antes que la lluvia designara a Dario Franchitti como ganador por primera vez.

El presidente de la IndyCar Series, Brian Barnhart, merece crédito por no rendirse luego de la primera tormenta y sacar la bandera roja en la vuelta 113 de las 200 programadas para el evento.

La mayoría de la gente creyó que la carrera estaba terminada, pero Barnhart se dio cuenta que todavía quedaba muchísima luz solar para sacar de regreso los autos a la pista.

"Me saco el sombrero con la liga", dijo el ex ganador de las 500 de Indy, Buddy Lazier, quien terminó en el puesto Nº 19. "Hicieron un gran trabajo volviendo a poner la pista en condiciones".

Algunos de los 275 mil asistentes estimados se fueron a casa pensando que Tony Kanaan había ganado. Cuando salió la bandera roja, Kanaan estaba primero, Marco segundo y Patrick tercera, lo que hubiera significado una barrida en el podio para el equipo Andretti Green Racing.

Franchitti tuvo sensaciones encontradas durante la lluvia.
"Parece que mi mejor amigo (Kanaan) va a ganar", dijo Franchitti. "Mis otros compañeros están segundo y tercero, por lo que sería un gran día para nosotros. Pero mi lado egoísta sentía que podía hacer algo si volvíamos a correr".

Kanaan tomó el liderato cuando superó a Marco en un reinicio, segundos antes que la carrera se detuviera por un choque detrás de ellos.

La lluvia llegó momentos después, por lo que parecía que Marco había perdido el primer lugar en el peor momento posible por segundo año consecutivo. Marco perdió la carrera del año pasado cuando Sam Hornish Jr. lo superó pocos metros antes de la línea de llegada.

Esta vez Marco debió esperar y ver la lluvia caer, preguntándose si tendría otra chance. La tuvo, pero el final no resultó como esperaba.

Y los fanáticos que se fueron, se perdieron 53 vueltas de salvaje manejo y jugadas estratégicas que decidieron el resultado.

Luego del reinicio de la carrera, Marco tocó sus ruedas con Dan Wheldon, luego voló por el aire y chocó con el suelo de cabeza antes de regresar a la posición normal. Afortunadamente, salió caminando solamente con algunos moretones.

Franchitti heredó la primera posición al continuar en la pista cuando Kanaan y Hornish fueron a boxes durante una precaución. Eso generó el retraso de Kanaan tras un trompo realizado al intentar evitar el choque de Jaques Lazier en el reinicio.

Las chances de Kanaan se terminaron luego de tener el auto más dominante durante gran parte del día.

"Era el día de Dario", dijo Kanaan. "Pero mi gran decepción fue porque si no íbamos a correr 200 vueltas, ¿para qué continuamos? Obviamente, estoy seguro que Dario lo ve de otra manera".

Todo depende de tu punto de vista - mitad lleno o mitad vacío. Algunas personas verán las 500 milas de Indy en 2007 como una decepción recortada por la lluvia, pero miren entre las gotas y verán una carrera para recordar.