MÉXICO -- El equipo Morelia aún sigue en Chicago, donde jugó la SuperLiga, torneo en el cual ya está eliminado.
Antes de tomar el avión de regreso a México, el equipo trabajó el aspecto físico con el profesor Gustavo Leombruno. Fernando Arce y Wilson Tiago olvidaron la lesión que tenían y entrenaron con sus compañeros.
Y pasada la medianoche el cuadro michoacano arribará a la ciudad de Morelia y quedará concentrado en un hotel para el compromiso del sábado contra el Veracruz.
Los Monarcas iniciarán el torneo Apertura 2007 como local, luego de hacer una pretemporada completa dirigidos por su nuevo entrenador José Luis Trejo.
La novedad en la concentración es la presencia del delantero Ever Guzmán, campeón del mundo Sub-17 con México en 2005. Se unió al plantel después de jugar con la Selección Sub-20 los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro y tuvo la oportunidad de participar en el partido contra el América en la Súperliga.
"Me acoplé muy bien al equipo. Mis compañeros me dieron la confianza para cederme el balón. El profe Trejo confió en mí al ponerme a jugar 45 minutos. Espero tener la oportunidad de jugar en la liga", comentó Ever, quien no tuvo la fortuna de jugar el Mundial de Canadá Sub-20.
Aunque reconoce que le hubiera gustado jugar el Mundial, se dijo satisfecho por el rendimiento que tuvo México en Río, en donde se consiguió la medalla de bronce. "Fue una experiencia muy bonita. Tuve la oportunidad de conocer otras costumbres y de compartir el evento con mis compañeros", señaló.
MÁS ROCE Y CRECIMIENTO
Ever sabe que por diferentes motivos perdió terreno a nivel juvenil, por lo que Jesús Ramírez ya no lo convocó a la Selección Sub-20. Pero el tiempo lo ha madurado y se siente con mejor estado físico y futbolístico para rendirle al Morelia, sobre todo porque sabe que José Luis Trejo lo tiene en mente para jugar.
"He crecido bastante; eso lo dan los torneos, el roce internacional. Espero seguir aprendiendo de los compañeros y del cuerpo técnico que me toquen".
Reconoció el jugador que haber jugado en la Primera A en el torneo pasado le ayudó mucho para fortalecer su carácter, y ahora que regresa al primer equipo está comprometido a entregarse al máximo.
"Se juega un fútbol diferente, de más roce. Todo estuvo bien, y me debe servir mucho".