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LIMA -- El fútbol peruano regaló el sábado, como hace casi cuatro décadas en circunstancias similares, una alegría a sus compatriotas, duramente golpeados por el violento terremoto que asoló la costa sur del país el pasado miércoles. En medio del duelo nacional por el sismo de 8 grados de magnitud, la selección sub 17 cumplió con alcanzar una victoria en su debut en el Mundial de Corea, el primero que recibe por clasificación a un combinado peruano de cualquier categoría desde 1982. Fue el centrocampista Alonso Bazalar, hijo del veterano internacional Juan Carlos Bazalar, quien venció a los 29 minutos de juego al portero de Corea del Sur, el país anfitrión del torneo, y dedicó el triunfo a sus compatriotas. "Esto es para todo el pueblo peruano, para todas las familias que están sufriendo, y para aquellos que han perdido a sus seres queridos", declaró Bazalar desde Corea a la agencia oficial Andina. Perú pasó con esa victoria a comandar la clasificación del grupo A del torneo, con 3 puntos, dos más que Togo y Costa Rica, que empataron al inicio de la jornada. Pero el resultado obtenido por los "jotitas", llamados así por su seleccionador, el ex internacional Juan José Ore, conocido como Jota Jota, ha hecho recordar un suceso igual de doloroso que se presentó en 1970 en el país andino. El 31 de mayo de ese año Perú también fue golpeado por un terremoto de 7,5 grados de magnitud que se ensañó con la ciudad de Yungay, que fue barrida del mapa por un posterior aluvión, y dejó más de 70.000 víctimas mortales. Ese sismo se produjo dos días antes de que la selección peruana debutara en el Mundial de México 70 frente a Bulgaria, en el estadio de la ciudad de León. Al inicio de ese encuentro, los jugadores peruanos, que eran dirigidos por el brasileño Didí, mostraron que no se habían repuesto del impacto de la tragedia, al recibir rápidamente dos goles de los búlgaros. Sin embargo, pronto aparecieron grandes figuras como Alberto Gallardo, Teófilo Cubillas, Hugo Sotil, Roberto Challe o Héctor Chumpitaz para concretar una remontada histórica. Fueron goles de Gallardo, Chumpitaz y Cubillas los que permitieron a Perú sumar su primera victoria en ese mundial y dar una alegría en medio del dolor a sus sufridos compatriotas. El hoy técnico Roberto Challe recordó los sucesos de hace 37 años y el impacto que significó para los jugadores enterarse de la tragedia. "Por la noche, las noticias en los canales mexicanos daban la información bravísima. Muchas vidas desaparecieron en Perú, al igual que ciudades enteras. Nuestra preocupación deportiva quedó de lado, quise llamar a Lima y vi a todos mis compañeros muy alarmados", relató Challe en una columna que publica en el diario deportivo El Bocón. Una circunstancia similar a la que experimentaron los jóvenes de la sub 17 en Corea, cuando se enteraron del sismo que, a las 18.41 horas del miércoles, golpeó la costa peruana y dejó al menos 500 muertos, miles de heridos y damnificados. Reimond Manco, la figura de Perú, relató que conversaba con su madre por "chat" y pudo ver por la cámara de la computara como se movían las cosas en su casa y poco después se interrumpió la comunicación, ya que se produjo el corte de electricidad en Lima. Ya repuesto del susto, luego de que se confirmara que sus familiares habían resultado ilesos, Manco dedicó hoy el triunfo "al pueblo peruano que está sufriendo por todos los daños causados por la naturaleza" "Este triunfo como que va a hacer olvidar un momento el dolor y darle un poquito de alegría a nuestros compatriotas", declaró el atacante al portal Perú.com. El técnico Oré manifestó al mismo portal su satisfacción por haber cumplido con la promesa de dar una alegría a sus compatriotas en medio de la tragedia. "Nos sentimos contentos no solo por el triunfo, sino porque nos habíamos comprometido a dar una alegría al pueblo peruano, que está pasando por malos momentos, y pudimos cumplirlo", aseguró.
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