Lo mejor del 2007

Los cuatro años de frustraciones, sucedidos por la venta del goleador holandés Rudd van Nistelrooy contra la llegada de Michael Carrick como incorporación más importante, no presagiaban una gran temporada para Manchester United.

Sin embargo, el cuadro conducido por Sir Alex Ferguson despejó todas las dudas enseguida, porque pisó fuerte en la Premier League, donde la dupla Ronaldo-Rooney se hizo temible, apoyada por la experiencia y calidad de Scholes y Giggs.

Pero el United no sólo volvió a los primeros planos en la liga local, también alcanzó la final en la FA Cup. Y pareció una aplanadora en algunos pasajes de la UEFA Champions League, donde se deshizo de la Roma en cuartos de final con un sorprendente 7-1.

Tal vez, la única mancha para este equipo fue su eliminación en primera rueda en la Carling Cup ante un rival menor. Y, aunque, en un momento de la temporada Ferguson se animó a soñar con su segunda "triple corona", que finalmente no pudo lograr, el título de punta a punta en la Premier League, fue indiscutible y devolvió al Manchester United en lo más alto. Y no termina ahí.

En esta temporada 2007/08, que ya casi llega a su Ecuador, el equipo de Old Trafford de nuevo está en la pelea por la liga, tras un comienzo un tanto dubitativo. Y en la Champions fue probablemente el mejor en la fase de grupos.

No caben dudas, el gigante ha despertado tras cuatro temporadas de sequía y está sediento de gloria.

Aunque para muchos la Liga de España es la más fuerte del mundo, la UEFA Champions League 2008/07 vio a la Premier League, prácticamente acaparar todo.

Tres de sus representantes se metieron entre los cuatro mejores de la máxima competencia europea. Chelsea dejó en el camino al Valencia, mientras que Liverpool goleó al PSV Enindhoven, para llegar a semifinales. Y Manchester United humilló a la Roma.

Finalmente, sólo Liverpool alcanzó la definición, o más bien, la gran revancha de la del 2005, porque su rival fue, nada menos que, el AC Milan. Esta vez, la Orejona quedó en manos de los italianos, pero los equipos ingleses han logrado volver a ser de los más respetados y temidos del continente. Por segundo año consecutivo tuvieron un representante en la final.

En la actual temporada, los cuatro equipos de la Premier sobrevivieron la fase de grupos, de nuevo fueron protagonistas y van por más...

El final del 2006 los vio con un presente gris y un futuro lleno de dudas. Se creía que sus días en el fútbol inglés estaban contados. Sin embargo, los argentinos Javier Mascherano y Carlos Tevez aceptaron el desafío: se quedaron en la Premier League y hoy son casi indiscutibles en sus equipos.

Claro que en el medio hubo un cambio importante para ambos. Primero fue para Mascherano: en febrero y tras un complicado traspaso, llegó al Liverpool, un equipo, sin dudas, más a su medida. Tuvo su período de adaptación, pero ahora es una pieza fija en el esquema de Rafa Benítez, quien ya está buscando la forma de asegurarse la permanencia del argentino en los Reds.

Luego fue el turno de Tevez quien llegó, nada menos, que al poderoso Manchester United. Pero incluso antes de esta transferencia había desmostrado que la barrera del idioma no iba a impedir que se expresara con la pelota. El Apache fue uno de los artífices de la gran remontada del West Ham, que consiguió salvarse del descenso.

Después sí, tras superar algunas trabas reglamentarias de la FA, el delantero arribó a Old Trafford. La adaptación de Tevez resultó mucho más rápida que la de su compatriota y ya lleva jugados 21 partidos con nueve goles.

Otro latino que empieza a hacerse notar en el fútbol inglés es el paraguayo Roque Santa Cruz. Decidió dejar la Bundesliga donde no tenía la continuidad que deseaba y apostó por la Premier. En el Blackburn ya participó en 21 partidos, entre liga y copas, y aunque, por ahora alterna buenas con no tan buenas, suma nueve goles.

Es probable que el Rovers no le de el mejor marco para destacarse como los dos argentinos, pero para ser su primera experiencia en esta competitiva liga, su desempeño es más que aceptable. Tal vez el futuro lo encuentre vistiendo la camiseta de un equipo más importante y le de la oportunidad de brillar en grande.

¿Premio consuelo para el Chelsea? Si se piensa que era un equipo con la Champions League entre ceja y ceja y que perseguía el tricampeonato en la Premier League, y no logró ninguno de esos objetivos, la respuesta sería: sí.

No obstante, eso no cambia el hecho de que el cuadro conducido por José Mourinho levantó dos copas, dos más para la vitrina de Stamford Bridge, que en la etapa del protugués debe haber necesitado ampliarla.

Además, estas dos conquistas tienen un valor agregado: en ambos casos, Chelsea tuvo que definir ante rivales de gran nivel.

En la Carling Cup (la de menor importancia) se enfrentó a los "chicos" del Arsenal y Didier Drogba sentenció el triunfo 2-1, casi al borde del tiempo suplementario.

En la FA Cup, el contrincante fue Manchester United en el mítico pero renovado Wembley. Otra vez el goleador marfileño sentenció una agónica victoria, que le dio a José Mourinho el único título inglés que le faltaba.

Para algunos fue simplemente un "manotazo de ahogado" de Steve McClaren, pero para la mayoría, el regreso más esperado.

Había pasado casi un año desde que el mismo McClaren lo había "borrado" de la lista de seleccionables, para diferenciar su período del de su predecesor, Sven-Goran Eriksson.

Lo cierto también es que David Beckham no había tenido una buena primera mitad de temporada en el Real Madrid y, el anuncio del traspaso al LA Galaxy de la MLS para agosto de este año, fue la expusa perfecta para Fabio Capello para marginarlo en el Merengue.

Pero los buenos rendimientos del mediocampista inglés en sus pocas chances de jugar, obligaron al DT italiano a volver atrás con su decisión y, a su vez, empezó a ser una presión para McClaren, cuya selección andaba a la deriva en la clasificación a la Eurocopa 2008.

Finalmente, el 1º de junio, en un amistoso contra Brasil, Becks volvió y el estadio de Wembley lo ovacionó.

Es cierto que con él solo no bastó para evitar la catástrofe en la Euro, pero sí quedó en evidencia que todavía tiene mucho por darle a Inglaterra, pese a su "semi-retiro" en el fútbol estadounidense.